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Política

Albares tensiona a los diplomáticos al demorar un trámite para trabajar en la UE

El ministro se resiste a entregar un certificado a los embajadores que se quieren ir al Servicio Europeo de Acción Exterior

Albares tensiona a los diplomáticos al demorar un trámite para trabajar en la UE

José Manuel Albares, tras la reunión del Consejo de Ministros del 9 de septiembre. | Foto: Carlos Luján (Europa Press)

Un simple trámite administrativo está provocando tensión e impaciencia entre los diplomáticos españoles que quieren optar a uno de los puestos que el Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) ha sacado a concurso para renovar a jefes de misión de la UE en el extranjero. Varios aspirantes a embajador tienen de plazo hasta el próximo martes para presentar los documentos de la solicitud, pero les falta un certificado que expide el Ministerio de Asuntos Exteriores y que acredita su condición de diplomático. Van pasando los días y el documento en cuestión no les llega.

Fuentes diplomáticas consultadas por THE OBJECTIVE subrayan que el departamento que dirige José Manuel Albares «está jugando con los tiempos» porque al ministro «no le gusta la estampida» del personal del ministerio para trabajar en el SEAE. Este diario ya desveló en febrero que un total de 43 diplomáticos se habían presentado al anterior concurso para optar a jefe de misión en una embajada de la UE. Se trató de la cifra más alta de españoles en los quince años del Servicio Europeo de Acción Exterior. Al final, solo consiguió premio Raúl Fuentes, quien estuvo de número dos de la Representación Permanente española ante la UE entre febrero de 2020 y julio de 2024. La alta representante, Kaja Kallas, le nombró embajador de la UE en República Dominicana.

Varios de los afectados por esta demora temen que les ocurra lo mismo que a otros compañeros del último concurso, quienes tuvieron que esperar «hasta el último minuto» para recibir el certificado de Exteriores. En al menos un caso, el documento llegó al destinatario tres horas antes del cierre del plazo y le pilló en mitad de un vuelo, por lo que finalmente no pudo optar a los puestos del SEAE que ambicionaba.

Las citadas fuentes subrayan que el retraso en dicho trámite se debe a la «obsesión» de Albares por saber quién quiere marcharse del ministerio y que las solicitudes se están analizando «caso por caso» en el Gabinete del ministro. Un buen número de los aspirantes a entrar en el SEAE son veteranos diplomáticos que en los últimos años han sido apartados de puestos de responsabilidad. El jefe de la diplomacia española se ha rodeado de directores generales y asesores más jóvenes que él -solo hay una excepción con Alberto José Ucelay, que lleva el área de Política Exterior-, con el fin de que «no le hagan sombra ni le puedan rebatir». De ahí que muchos de ellos prefieran una salida europea «antes que seguir haciendo pasillo» en el ministerio.

A principios de año, la elección de la diplomática española Belén Martínez Carbonell como secretaria general del SEAE provocó el primer choque entre Albares y Kallas. La elegida se convirtió de facto en la número dos del servicio exterior europeo, si bien el ministro intentó que su puesto lo ocupase Marcos Alonso, el actual representante permanente de España ante la UE y uno de los diplomáticos más próximos al ministro, ya que fueron compañeros de promoción y guardan una estrecha amistad desde que accedieron a la Carrera Diplomática en el año 2000.

En la elección de la número dos de Kallas hubo un proceso interno dentro del SEAE en el que se pudieron presentar candidaturas. Martínez se postuló tras una dilatada trayectoria dentro de la diplomacia europea, en la que lleva más de quince años trabajando tanto en el SEAE como en la Comisión Europea. Desde julio de 2021 tenía el cargo de directora general de la Agenda Global y Relaciones Multilaterales por decisión directa de Josep Borrell, así que su perfil estaba al alcance de muy pocos.

Esta diplomática está casada con el mencionado Raúl Fuentes, nuevo embajador de la UE en República Dominicana. Casi todo el tiempo de su trabajo en la Reper española estuvo a las órdenes de Alonso. Sin embargo, Fuentes no fue un diplomático del agrado del ministro y tuvo que dejar la legación española en Bruselas en julio de 2024 tras una exigente Presidencia española de la UE en la que cargó sobre sus hombros buena parte de las negociaciones con el Parlamento Europeo en asuntos que requieren la unanimidad de las instituciones comunitarias. Antes de abandonar Bruselas, intentó optar al puesto de delegado del SEAE en Túnez, pero finalmente se quedó con la miel en los labios, ya que llegó a la terna o lista corta de candidatos.

Así que tras el fiasco de Túnez, tuvo que pedir a Exteriores el reingreso en la Carrera Diplomática, pero quedó «apartado» en un despacho del ministerio sin ningún cometido concreto durante más de un año. Cuando Albares se enteró de la candidatura de Martínez, intentó convencer a Kallas de que la mejor opción era Alonso, a quien intentó promocionar por todos los medios. Pese a la insistencia del jefe de la diplomacia, la ex primera ministra estonia se resistió a los deseos del ministro y le instó a presentar la candidatura del embajador español. Así fue al final, pero Martínez quedó por delante de Alonso y el resto de candidatos en los exámenes para el cargo.

Polémica con los expertos nacionales

Tras ello, la Asociación de Diplomáticos Españoles (ADE) envió un escrito al subsecretario del ministerio, Xavier Martí, en el que criticó que se hayan anulado todas las incorporaciones de Expertos Nacionales Destacados (END) en el SEAE que dirige Kallas, así como «no financiar más incorporaciones de este tipo en el futuro». Una acusación que fue negada por el ministro a través de la Oficina de Información Diplomática (OID). «Las incorporaciones de diplomáticos españoles como expertos nacionales continúan tanto para el SEAE como para la Comisión», dejó claro un portavoz de Albares.

​Los empleados públicos españoles pueden trabajar temporalmente en cualquiera de las instituciones europeas y de las agencias de la UE bajo la figura del experto nacional destacado, conocida en inglés como Seconded National Expert. En el caso del servicio exterior europeo, todos los END españoles son diplomáticos. La ADE tildó entonces de «preocupante» el deterioro en la relación del departamento de Albares con el equipo de la ex primera ministra estonia. Un choque «con consecuencias para la defensa de nuestros intereses y también para la incorporación de nuevos diplomáticos españoles en dicho Servicio», indicó la principal asociación que representa al colectivo.


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