La Fiscalía pide extraditar a Perú a un español por abusar presuntamente de su hijo menor
Los hechos habrían tenido lugar en Cádiz, donde viajó el hombre con el niño en 2010 mientras su madre se recuperaba de una enfermedad
La Justicia de Perú reclama a un español por abusar, presuntamente, de su hijo menor de edad. El reclamado contrajo matrimonio con una mujer de nacionalidad peruana en 2006 y se estableció en Cusco. Un año después nació su vástago, con el que viajó a Cádiz en 2010 mientras su esposa se recuperaba de una enfermedad. A su vuelta, una frase del pequeño alarmó a la madre. La Fiscalía accede a la solicitud de extradición, pero el reclamado se opone. La vista tendrá lugar este miércoles en la Audiencia Nacional.
El reclamado se casó en Perú en 2006 con una ciudadana de ese país. Su hijo, víctima de los hechos, nació el 21 de julio del año siguiente. La familia fijó su residencia en Cusco, una localidad ubicada en los Andes peruanos que fue la capital del Imperio Inca y es conocida por sus restos arqueológicos. Convivían con otros cuatro hijos de la mujer, frutos de una relación anterior.
El 4 de febrero de 2010 el reclamado trasladó al menor a España para que se ocupara de él su hermana, ya que la madre del niño sufría un cuadro de tuberculosis. Padre e hijo se quedaron en nuestro país durante seis meses, regresando a Perú en septiembre. Días después, el pequeño salió del baño y se acercó a uno de sus hermanos con el pantalón a la altura de los muslos. Una vez enfrente de ellos le dijo que le metiera el dedo por el ano y después «el churro».
El Código Penal de Perú
Su madre lo escuchó, preguntó al reclamado qué significaba churro y este le contestó que así se llamaba en su tierra al pene. La mujer supo más tarde por el menor que su marido le había «metido el churro y que le dolía su potito». Los hechos habían ocurrido en España mientras el menor se encontraba con su padre. Un informe médico concluyó que los abusos se correspondían con esa época, tres o cuatro meses antes de la fecha en que la ciudadana peruana interpuso la denuncia.
El Código Penal de Perú establece que los hechos son constitutivos de un delito de violación sexual consumada a menor de edad y, alternativamente, un delito de actos contra el pudor en menor. La Fiscalía sostiene que en nuestro país, según la diligencia a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, supondría en aquellos momento un delito de abuso sexual, pero con la reforma legal, la denominada ley del solo sí es sí, serían constitutivos de un delito de agresión sexual.
El reclamado fue detenido en octubre de 2014 en Cádiz en virtud a una orden internacional expedida por un juzgado de Cusco en mayo de ese año. Ese mismo día se incoó expediente de extradición pasiva. El hombre quedó en prisión provisional, aunque días más tarde salió en libertad tras pedirlo la Fiscalía.
Un año después, la Embajada de Perú en España informó que la solicitud de extradición estaba en trámite ante el Tribunal Supremo de su país, pero el padre del menor no aceptó.
El asunto llega este miércoles a la Audiencia Nacional. El reclamado no tiene procedimientos penales en España. El único lugar donde se ha abierto una causa por los hechos es en Perú, aunque nunca fue acusado. La Fiscalía estima que procede extraditarle «por beneficio del menor y del buen fin del procedimiento». Tendrá que dirimirlo un juez porque se niega a ser deportado, como establece la Ley de Extradición Pasiva y los acuerdos al respecto entre ambos países, en vigor desde 1994.
La Fiscalía considera que debe primar la jurisdicción peruana para «proteger los intereses del menor», que actualmente tiene 14 años. El Ministerio Público defiende este escenario «por lo complicado que sería conseguir su declaración a distancia en condiciones de serenidad y protección adecuada de su testimonio, siendo además en Perú donde está el resto del material probatorio».