La Fiscalía pide a Griñán que aporte informes médicos actualizados sobre su cáncer
El informe del centro penitenciario afirmaba que dispone de un convenio con la Sanidad Servicio Andaluz de Salud para derivar pacientes encarcelados
La Fiscalía quiere saber en qué situación se encuentra José Antonio Griñán antes de posicionarse sobre su ingreso en prisión. El Ministerio Público ha solicitado a la Audiencia Provincial de Sevilla que reclame al expresidente de la Junta de Andalucía informes médicos actualizados sobre su «diagnóstico, tratamiento y eventuales complicaciones efectivas». Lo hace después de que los profesionales del centro penitenciario afirmaran que la cárcel cuenta con capacidad para asistir al exdirigente socialista.
Como ha adelantado Diario de Sevilla, los fiscales Juan Enrique Egocheaga y Manuel Fernández Guerra presentaron el pasado martes un escrito en el que recordaban a la Audiencia Provincial que en su auto del 13 de enero decidió aplazar el ingreso en prisión de Griñán en virtud del artículo 80.4 del Código Penal hasta que «concluya las sesiones de radioterapia». Además, acordó recabar un informe de los servicios sanitarios del centro penitenciario sobre la posibilidad de tratar en él la enfermedad.
La Fiscalía considera que «siendo posible el tratamiento del penado en el centro penitenciario conforme a la documentación obrante en autos, con carácter previo a pronunciarnos sobre el ingreso en prisión para el cumplimiento de la pena impuesta se requiera a su representación procesal para que aporte información médica actualizada sobre diagnóstico, tratamiento y eventuales complicaciones derivadas del mismo».
La situación de Griñán
Griñán, de 76 años, fue condenado a seis años de prisión por prevaricación y malversación de caudales públicos en noviembre de 2019 por el caso ERE. Debía ingresar en prisión en enero, pero argumentó que padecía un cáncer de próstata y solicitó retrasarlo. El tribunal aceptó la demanda, aunque antes solicitó un informe forense al Instituto de Medicina Legal (IML) para saber si el expresidente andaluz podría tratarse en la cárcel. Cientos de presos en España ya lo hacen.
El informe del IML reconocía que «se trata de una enfermedad muy grave» y estimó que existían «altas posibilidades de curación». No obstante, afirmó desconocer el tratamiento prescrito a Griñán en forma de medicación y radioterapia, por lo que le resultaba imposible determinar «cuál será su evolución» sanitaria.
Con esas conclusiones, la Audiencia Provincial señaló en un auto el 13 de enero que «procedía el aplazamiento de la ejecución de la pena hasta tanto el penado finalice las sesiones de radioterapia». No obstante, acordó recabar información de los servicios sanitarios del centro penitenciario «sobre la posibilidad de tratamiento de la enfermedad en dicho centro». El informe avala su ingreso en prisión.
El documento, de cinco páginas, realiza un repaso de los servicios materiales y humanos de los que dispone la cárcel. Además, revela que existe un convenio con el Servicio Andaluz de Salud (SAS) para derivar reclusos que necesiten asistencia. «Las consultas programadas no plantean problemas con los desplazamientos» porque existe un acuerdo con la Policía Nacional que «garantiza la salida de cinco pacientes al día».
«Una vez recibida dicha documentación, que se remita a los servicios sanitarios del centro penitenciario de Sevilla, para que ratifique o modifique las conclusiones recogidas en su informe de 8 de marzo de 2023, en particular, sobre la posibilidad de tratamiento dentro del marco de colaboración descrito con el SAS conforme a su experiencia con reclusos con padecimientos semejante», indican los fiscales en su escrito.
El centro penitenciario expone dispone un convenio con la sanidad andaluza para derivar pacientes encarcelados a los hospitales Macarena y Virgen del Rocío en caso de requerir atención médica especializada. El informe revela que entre los procedimientos diagnósticos que siguen los reclusos en hospitales sevillanos hay procedimientos terapéuticos como la quimioterapia, la radioterapia (tratamiento que sigue Griñán), la rehabilitación, fisioterapia o diálisis.
Unas terapias que se realizan «en cuantas sesiones el especialista considere necesarias, así como con la periodicidad que se considere para el mayor beneficio del paciente». Para ello existe un acuerdo con la Policía Nacional que «garantiza la salida de cinco pacientes al día». No obstante, hay «una gran problemática» con las salidas urgentes, ya que los agentes no siempre tienen disponibilidad para efectuar los traslados.