La resolución del laudo de E.ON amenaza con abrir otro agujero de 600 millones a España
El Gobierno debe resarcir con 1.161 millones de euros a las empresas afectadas por la retirada de ayudas a las energías renovables
Complejo de generación de energías renovables de Canarias. | Europa Press
España debe resarcir con 1.161 millones de euros a las empresas afectadas por la retirada de ayudas a las renovables. La cuantía aumentará en los próximos meses, ya que está previsto que las autoridades internacionales resuelvan nuevos laudos. El fallo de la queja interpuesta por la alemana E.ON se antoja inminente y supondrá un agujero de otros 600 millones para el Estado, el montante más elevado de la veintena de procesos que ya han caído del lado de las compañías. Una cifra similar a los casos que aún no han sido resueltos y que podrían elevar la factura por encima de los 2.000 millones.
El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero puso en marcha en 2007 un plan de apoyo a la producción eléctrica procedente de fuentes renovables muy beneficioso para los inversores. Seis años más tarde Mariano Rajoy modificó ese régimen y las empresas denunciaron que el cambio mermaba sus ingresos, por lo que acudieron a instancias internacionales. España acumuló 51 procedimientos ante el Ciadi, una institución dependiente del Banco Mundial que se encarga de dirimir los pleitos.
El órgano ha resuelto por el momento una veintena de litigios, el 90% favorables a las empresas, que cifran en 1.161 millones la suma con la que debe indemnizarles el Estado, que se niega a pagar. Consideran que los laudos pendientes de resolución elevarán el monto por encima de los 2.000 millones. Las compañías habían reclamado inicialmente cantidades cercanas a los 8.000 millones.
España no paga
Un nuevo laudo se cierne sobre España. «Es el más elevado de todos los que quedan por resolverse», sostienen fuentes de las empresas afectadas a THE OBJECTIVE. La alemana E.ON presentó la reclamación ante el Ciadi en agosto de 2015, cuando ya lo habían hecho otras compañías. A pesar de que demoró su denuncia, los expertos explican que la resolución es «inminente» porque todos estos procesos comparten fundamentos de derecho y eso facilita el procedimiento.
«Si tenemos en cuenta los precedentes, la sentencia será favorable», avanza un portavoz de las compañías en litigio. Estima que el Ciadi obligará a España a satisfacer los 600 millones que solicita E.ON. Y continúa: «Es la reclamación más importante de todas las pendientes. Aunque solo se estime parcialmente lo sería, ya que como mínimo tendrán que pagar una indemnización de 200 millones de euros».
Hasta el momento se han resuelto 21 laudos. El montante más elevado es el que se le reconoció a la estadounidense Nextera, 290 millones de euros. Una cantidad que podría doblar E.ON si finalmente el fallo es favorable para la empresa. El podio lo completan Eurus, pendiente de cobrar 106 millones, y Antin, 101. El Gobierno se niega a abonar esas cantidades, así que muchas compañías han acudido a la justicia ordinaria para solicitar embargos de bienes para satisfacer los pagos que se les adeuda.
Un tribunal londinense bloqueó a principios de abril las cuentas del Instituto Cervantes en Reino Unido por la deuda en materia de energías renovables. La decisión supone un hito, ya que es la primera vez que solicitan embargar bienes de España en el extranjero por una deuda a terceros. Unos días más tarde la Corte Suprema de Australia abría la puerta a incautar activos por valor de 101 millones si nuestro país deja sin resarcir la cantidad que debe abonar a Antin.
La estrategia del Gobierno cuesta a España 248 millones de euros extra. Esa es la cantidad que ha aumentado la factura por los intereses de demora, según estimaciones de las empresas afectadas. Equivale al 21% de la cifra que debe abonar el Estado si se limita a cumplir los procedimientos resueltos. La cuantía responde a sobrecostes judiciales e intereses financieros. Un agujero que puede incrementarse con la cantidad con que, previsiblemente, habrá que compensar a E.ON.
La empresa alemana con sede en Düsseldorf es fruto de una fusión entre VEBA y VIAG en 2000. E.ON es una de las mayores empresas del sector de las renovables en Europa. Ha conseguido expandirse por países de Europa del Este y tiene una importante presencia en Rusia, donde participa en negocios de gas natural. Ha comprado algunas compañías como Sydkraft en Suecia o Powergen en Reino Unido y trató de adquirir Endesa en España, una operación que arruinó la OPA de Acciona y la italiana Enel.
