Koldo ofreció a Ábalos mascarillas del socio de Aldama en Dominicana tras el estado de alarma
El comisionista trasladó al asesor ministerial la oferta de una empresa de Bernardo Castillo el 16 de marzo de 2020

Ilustración de Alejandra Svriz.
Pedro Sánchez decretó el estado de alarma el 14 de marzo de 2020. Dos días después, Koldo García ofreció al ministro de Fomento, José Luis Ábalos, una remesa de 10 millones de mascarillas de una empresa navarra. La sociedad estaba cotitulada por Bernardo Castillo, socio de Víctor de Aldama en República Dominicana. El propio Ministerio de Transportes avaló al empresario ante el Gobierno de la isla caribeña. La propuesta llegó al asesor ministerial a través del comisionista, revela un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. Finalmente se adquirió el material sanitario a Soluciones de Gestión.
«Tienen 10 millones de mascarillas. Vienen de Turquía. El distribuidor es este y el teléfono te lo mando ahora», escribió Koldo García a Ábalos a las 12.26 horas del 16 de marzo de 2020. Diez minutos antes le había remitido un certificado de inclusión de la empresa en el registro de operadores: «CIF Intracomunitario Ttes Anabal.PDF». La UCO subraya que una de las personas al frente de la mercantil era Castillo, «vinculado a Aldama societariamente a través de las sociedades Pilot Real Estate y Logística Comercial Montelimar».
Koldo García explica a Ábalos que la empresa vende a 3,14 euros la unidad de mascarillas. «Son FPP3 y el pago es 50% al encargo de ellas y 50% a la entrega. Pedido mínimo 10.000.000 de mascarillas. Tú me dices si necesitas algo más», insiste el asesor. El entonces ministro le solicita el contacto del responsable y este se lo envía de manera instantánea. Este diario no ha podido certificar que se produjera una llamada a la Empresa Anabel y Berna, ubicada en Corella (Navarra).

Ábalos y las mascarillas
La localización de la empresa no es baladí. Aldama desveló en la Audiencia Nacional la existencia de «cupos» y el supuesto reparto de comisiones según esta división. En ese contexto declaró que, a través de Koldo García, habría pagado 15.000 euros al actual secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán. El comisionista de la trama de las mascarillas señaló abonó esa cantidad «para contentarle de alguna manera» tras entrometerse en «una licitación con una constructora» cuyo nombre obvió.
Los investigadores subrayan que Castillo era «cotitular» de la mercantil que ofreció la mascarillas. Socio del comisionista, fue administrador solidario de Logística Comercial Montelimar, una de las empresas de Aldama, entre agosto de 2019 y marzo de 2023. El empresario tuvo un papel clave en República Dominicana, donde ayudó a la trama a desarrollar sus negocios. La red enviaba importantes transacciones a la isla caribeña para dificultar la trazabilidad del dinero obtenido con las mordidas. Koldo García llegó a avalarle ante las autoridades locales.
Castillo ocupaba el cargo de director de Gruprex en España, un colectivo de profesionales que tiene como objetivo representar a los extranjeros que visitan Dominicana y a los nacionales que residen en el exterior para atraer inversiones al país caribeño. Entre sus colaboradores se encuentra Pronalab, un laboratorio fundado por Jorge Brizuela, El venezolano, y dirigido por Ignacio Díaz Tapia, uno de los «mosqueteros» de Aldama.
El socio del comisionista intervino en una operación empresarial para invertir en un centro ambulatorio de Santo Domingo, capital de Dominicana. También intercedió para que Probalab, Megalab y Pronatal, todas firmas vinculadas a Aldama, pusieran dinero en el Centro Médico de Servicios Ambulatorios (Cemehonsa).
Compra de un todoterreno
Puertos del Estado y ADIF, entes vinculados al Ministerio de Transportes, compraron 13 millones de mascarillas a Soluciones de Gestión por 36,5 millones de euros. La adquisición fue avalada por Aldama. Según los investigadores, el comisionista conocía de antemano que su oferta iba a ser la elegida gracias a su relación con Koldo García. El departamento de Ábalos recibió esos días otra oferta por la mitad de precio, pero fue rechazada.
Un año después del negocio frustrado de las mascarillas, Ábalos compró un Range Rover Sport a través de Castillo. Una gestión en la que estuvo auxiliado por Joseba García, hermano de su asesor ministerial. La UCO especifica que, en el momento de la adquisición, el vehículo tenía 13 años. El exministro abonó 15.000 euros al propietario, Calzados Arancha, por el todoterreno de lujo en agosto de 2021.
«La participación de Bernardo Castillo (…) resulta significativa, ya que este pertenecería en ese momento al círculo próximo de Aldama», insisten los investigadores. Ábalos pide en diciembre de ese año a Joseba García que le ayude a conseguir la factura de la compra del vehículo: «Ayer me llamó el de la Gregoria para pedirme la factura y el teléfono del vendedor. El teléfono lo necesita para enviarle un mensaje por el que autoriza la transferencia del vehículo». El hermano de su asesor ministerial le comenta que tendrá la factura esa misma tarde y que el teléfono es el de «Berna Calzado», en alusión al socio de Aldama en Dominicana.