Ábalos montó una gira por Cali, Medellín y Lima con la consultora de su hijo en 2015
De los 129 viajes de «cooperación» que hizo entre 1989 y 2015, solo en esos no declaró el asunto de la misión

Víctor Ábalos en la toma de posesión de su padre como ministro de Transportes. | PSOE
Cali, Medellín, Bogotá y Lima. El exministro José Luis Ábalos incluyó a la consultora de su hijo Víctor en una gira que realizó por América Latina en noviembre de 2015 bajo el pretexto de un viaje de cooperación internacional. Así figura en el currículo donde el exministro enumera 129 viajes relacionados con sus labores como cooperante entre 1989 y 2015. La gran mayoría, 102, los hizo a América Latina. Y de ellos, 55 fueron a Perú y Colombia, los países en los que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha localizado propiedades inmobiliarias a su nombre.
En noviembre de 2015 Ábalos ocupaba la secretaría general del PSOE en la Comunidad Valenciana. Viajó a Colombia y a Perú por un motivo que no revela, pero que el propio exministro circunscribe a su labor de cooperante. En el registro de viajes que elabora para su currículo (que la UCO rescata de un dispositivo incautado a su asesor Koldo García) aparece como «entidad remitente» la sociedad External Programmes Consulting. Una firma de la que es administrador único su hijo Víctor y que principalmente ejerce labores de consultoría para empresas que quieran asentarse en América Latina.
La ruta lleva en noviembre de 2015 al exministro por Lima, Medellín, Cali y Bogotá, zonas de gran conflictividad por el narcotráfico. El motivo de ese viaje es desconocido: Ábalos no revela los asuntos que hacen trasladarse a Perú y Colombia, como sí hace en el resto de desplazamientos que realizó entre 1989 y 2015. En total, durante esos años, hizo 129 viajes por Europa, África y América Latina, siendo estos últimos los más numerosos (102).

Las cuentas de Ábalos
Esa gira no fue la única que realizó Ábalos con la sociedad de su hijo. En febrero de 2015 se desplazó a Bogotá, Cali, Popayán y Medellín. De nuevo el asunto de los viajes queda vacío. Tampoco figura asunto ni organizador del viaje en el apunte correspondiente a una expedición a Bogotá y Cali dos años antes, en marzo de 2013, cuando el exministro solo era diputado raso del PSOE.
La fecha coincide con la que el exministro ha declarado como el momento en que vendió la parcela que adquirió en Tulúa en 2003 revelada por la UCO en su último informe. En ninguno de estos cuatro viajes reseñados aparece motivo alguno, pero sí se incluyen dentro del registro personal de expediciones de «cooperación». Es importante reseñar que la empresa de Víctor Ábalos se dedica a asesorar empresas que quieren asentarse en América Latina. Él mismo relató el pasado 13 de marzo en el Supremo que el país donde desarrolla mayor actividad es Colombia.
Los viajes internacionales del cooperante Ábalos se extienden por 28 países, 15 de ellos en América Latina. Además de Colombia y Perú, hizo ocho desplazamientos a Chile; siete a Nicaragua; seis a Uruguay; cuatro a Honduras, Bolivia y Paraguay; dos a Argentina, Cuba, Ecuador, Guatemala, República Dominicana y Venezuela; y uno a Panamá. El exministro incluye en su currículo 28 viajes a varios países europeos, Vietnam, Palestina, Sáhara Occidental, Senegal y Argelia.
Los investigadores han localizado en Colombia un chalé que estuvo a nombre de Ábalos. El inmueble está situado en Tulúa, localidad situada en el Valle del Cauca, uno de los 32 departamentos del país. La UCO lo cifró inicialmente en 2,5 millones de dólares (2,1 millones de euros), aunque más tarde matizó que, en realidad, se trataba de 2,5 millones de pesos colombianos, unos 751 euros. El exministro reconoció a través de su cuenta de X que compró el terreno en 2003 y que lo vendió una década más tarde sin construir. No obstante, jamás lo incluyó en su declaración de bienes del Congreso.
El ‘ladrillazo’ en Perú
Solo un día después de conocerse el informe, el juez que investiga al exministro en el Supremo por la compra de mascarillas durante la pandemia ha acordado seguir investigando su patrimonio. Para ello ha solicitado información bancaria y datos sobre sus ejercicios fiscales en la última década. Además, pone el foco sobre la Fundación Internacional de Apoyo al Desarrollo Local y Social (Fiadelso), creada en 1992 y con la que la ONG canalizó miles de euros en ayudas públicas a Colombia y Perú para mejorar la vida de los más vulnerables.
El informe elaborado por la UCO le otorga la propiedad de dos terrenos en Chimbote (Perú), donde se levanta el polémico centro que ocupó durante más de una década la Asociación de Vivienda de Trabajadores Marítimos y Portuarios Miguel Grau. Un año después de que Ábalos fuese nombrado ministro, una ciudadana local se personó en una comisaría de Chimbote para reclamar la propiedad como representante del actual diputado del Grupo Mixto. Unos días más tarde, este acudió al Consulado de Perú en Madrid para autorizarle a gestionar el inmueble.
Chimbote vendió el terreno en condiciones ventajosas como agradecimiento al compromiso social del exministro. La municipalidad lo cedió en verano de 1998 por apenas 430 euros, pero más de dos décadas después sigue escriturada a su nombre. El edificio está valorado hoy en 1,2 millones de euros. Ábalos explicó en el Supremo que no dispone de ninguna propiedad en el exterior y que este caso es «circunstancial» porque Fiadelso está en trámites de extinción y no dispone de personalidad jurídica.
La ONG de Ábalos ha desarrollado diferentes proyectos en países en vías de desarrollo, especialmente en América Latina. El exministro ocupó la presidencia de Fiadelso entre febrero de 1998 y octubre de 1999. Aunque se distanció de la primera línea, mantuvo una relación muy estrecha con la entidad, ya que varias personas de su círculo formaban parte del patronato. La fundación recibió al menos 5,5 millones de euros en subvenciones entre 2004 y 2015.
Fiadelso acometió 39 proyectos entre marzo de 1998 y 2010 en seis departamentos de Perú, situados en su mayoría en la zona norte del país. La región que más proyectos recibió fue Áncash, donde se ubica Chimbote, con 19 intervenciones por valor de 897.639 euros. No obstante, la mayoría del dinero que la ONG de Ábalos llevó al país andino (2,3 millones de euros, según ha constatado este diario) tuvo como destino el departamento de Cajamarca: 1,17 millones de euros procedentes de subvenciones públicas españolas.