The Objective
Tribunales

Un juez investiga a Sonsoles Ónega por llamar «hombre» en televisión a una exmilitar 'trans'

La periodista está citada a declarar por delito de discriminación al expulsar del plató a Francisca Javier Avellaneda

Un juez investiga a Sonsoles Ónega por llamar «hombre» en televisión a una exmilitar ‘trans’

La periodista Sonsoles Ónega ha sido denunciada por la mujer 'trans' Francisca Javier Avellaneda, ex militar. | Ilustración de Kevin Borja.

Francisca Javier Avellaneda, exmilitar que se cambió de sexo registral de hombre a mujer para tratar de recuperar a su hijo, pasó un mal trago el 7 de marzo de 2024, cuando fue invitada al programa Y ahora Sonsoles, que conduce la periodista Sonsoles Ónega. En riguroso directo, la presentadora puso en duda su identidad sexual, acusándola de haber cometido «fraude» aprovechando la ley trans, refiriéndose a ella como «hombre», y terminó expulsándola del plató de malas formas. Por aquel episodio, Avellaneda se ha querellado contra Ónega, que, según ha podido saber THE OBJECTIVE, ha sido citada a declarar el próximo 11 de noviembre en el Juzgado de Instrucción número 1 de Alcobendas (Madrid) por un presunto delito de discriminación con el agravante de haberse producido en un medio de comunicación social, violando supuestamente el artículo 27 de la ley trans.

La querella, a la que ha tenido acceso este medio, señala que Avellaneda fue invitada «no para contar su historia ni mucho menos tratar la situación de su hijo, sino poner en entredicho la identidad y expresión sexual de la denunciante». Esta aseveración se fundamenta en que el rótulo con el que fue presentada fue «¿Fraude en la ley trans?», y en que Ónega dijo estar hablando con uno de esos «hombres con documentación de mujer», una afirmación, reza la querella, «total y absolutamente tránsfoba».

Al comienzo de la entrevista, la periodista preguntó a su invitada por qué tomó la decisión de cambiarse de género, y esto enfadó a la denunciante, que consideró que se le estaba pidiendo una «justificación», y que se estaba dejando entrever que había cometido «lo que el propio programa había denominado fraude de ley». De ahí en adelante, la cosa fue a peor, sobre todo a raíz de la intervención de la periodista y escritora trans Valeria Vegas, que confrontó con Francisca Javier Avellaneda.

La grabación de este programa se produjo en el marco del nacimiento de la asociación Trans No Normativos (TNN), cuyos miembros (militares, policías y guardias civiles, en gran medida) fueron desfilando por los platós de televisión. En este contexto, Vegas increpó a Anega: «¿Por qué les seguís trayendo? ¿Van a venir todos por aquí? Son cromos». «Lo que va a decir usted es lo mismo que el de ayer y el de anteayer», dijo Vegas refiriéndose a Avellaneda, al que preguntó «qué tipo de disforia tiene». Según la querella, «aquellas expresiones hirieron gravemente» a la denunciante.

La querella recoge distintos momentos en los que tanto Sonsoles Ónega como Valeria Vega se refirieron a Francisca Javier Avellaneda como si todavía fuese un hombre. Concretamente, emplearon los términos «señor» y «troll». Además, Paula, la madre de un hijo trans, se refirió despectivamente a la invitada como «este».

La tensión fue in crescendo cuando Francisca Javier Avellaneda se defendió de las críticas sobre su aspecto (varonil, pues no se ha hormonado) diciendo que «también hay lesbianas que no se depilan», y, sobre todo, cuando habló de las denuncias falsas por violencia de género. Entonces, Vega se refirió a Avellaneda como «gentuza» y Ónega decidió expulsarla: «A este programa ha venido todo el mundo, no me he arrepentido de traer a nadie, a usted sí (…). Que le corten el micrófono, hasta aquí, en este plató no. Si va a decir barbaridades, yo decido si las quiero escuchar o no».

Tras su expulsión, con el micrófono de la invitada ya cerrado, se pudo escuchar a Miguel Lago, colaborador del programa, en los siguientes términos: «Periodismo. Mentiras y facherío vario, no. Esto es horroroso. Somos muchísimo mejores que todo eso. Esto no es censura, qué vergüenza más grande. Vienen a aprovecharse…».

Discriminación

La querellante argumenta que en el programa «se cuestiona su cambio de sexo, si se ha hormonado o debe hacerlo, si tiene disforia de género y de qué tipo, negándole incluso el trato de mujer, dándole el de varón, negando por lo tanto su cambio de sexo». Estos extremos, reza el texto, «constituyen un trato humillante que entraña menosprecio y descrédito» al demandante «por razón de su identidad sexual».

«Igualmente, la Sra. Avellaneda tuvo que soportar como se justificaba la comisión de los delitos de sustracción de menores cometidos por la madre del hijo de mi mandante», abunda la querella, que considera un agravante «el alcance y la repercusión de la emisión de programa», arguyendo que «desde entonces» Francisca Javier Avellaneda «padece a diario insultos, menosprecios e incluso terceros que desean la muerte de la denunciante». «El trato humillante recibido por mi demandante le ha causado graves daños morales y psicológicos», zanja la demanda. 

Por todo lo expuesto, se han incoado diligencias previas por un presunto delito contra los derechos fundamentales contra Sonsoles Ónega, Miguel Lago, Valera Vegas, la madre del chico trans que intervino en el programa, y Buendía Estudios.

Publicidad