The Objective
Tribunales

La UCO pone el foco en una cuenta bancaria que comparten las hermanas Pardo de Vera

La Guardia Civil solicita a la Audiencia Nacional que pida nuevos datos del patrimonio de la expresidenta de ADIF

La UCO pone el foco en una cuenta bancaria que comparten las hermanas Pardo de Vera

Isabel Pardo de Vera y su hermana, la periodista Ana Pardo de Vera.

La Guardia Civil pone el foco en una cuenta que comparten las hermanas Pardo de Vera. La Unidad Central Operativa (UCO) ha entregado al juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno un informe patrimonial sobre la expresidenta de ADIF Isabel Pardo de Vera y el ex director general de Carreteras Javier Herrero. Los agentes piden al magistrado que solicite información adicional a la Agencia Tributaria y a diversas entidades financieras para culminar las pesquisas de ambos investigados por el denominado caso Koldo. Los agentes les consideran «facilitadores de asistencia» para el amaño de las adjudicaciones y quieren saber si recibieron por ello «cualquier tipo de prestación».

El oficio al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE incluye una relación de los productos financieros en los que aparece Isabel Pardo de Vera. En la lista hay cuatro cuentas bancarias vinculadas a la presidenta de ADIF entre junio de 2018 y julio de 2021, tras la salida de José Luis Ábalos del Ministerio de Transportes. Los cuatro depósitos financieros pertenecen a Abanca, una entidad financiera gallega, región de la que es originaria la ingeniera.

La expresidenta de ADIF es titular en las cuatro cuentas bancarias, todas ellas activas. Tres son cuentas de ahorro, dos en solitario y otra compartida con su hermana, Ana Pardo de Vera, actual directora Corporativa y de Relaciones Institucionales del diario Público. La abrieron el 5 de enero de 2005, hace más de dos décadas. Este diario ha tratado sin éxito de conseguir la versión de la periodista. Pardo de Vera también comparte otro depósito –una cuenta corriente, en este caso– con sus padres, Ana y el resto de sus hermanos.

Datos sobre Pardo de Vera

El escrito de la UCO reclama al juez un estudio económico-tributario de la expresidenta de ADIF y del exdirector de Carreteras que «ha de contextualizarse con el análisis de la documentación intervenida en los últimos registros». Esa fórmula da a entender que los agentes han encontrado pruebas de presuntas mordidas de las que se habrían beneficiado ambos, antiguos altos cargos de Transportes durante la etapa de Ábalos.

La UCO destaca que las pesquisas han revelado que Ábalos y su asesor Koldo García «habrían cobrado presuntas contraprestaciones económicas por su labor en beneficio de las constructoras» con contratos en los que aparecen tanto Pardo de Vera como Herrero. Los agentes justifican su petición al juez en que ambos son «facilitadores de asistencia para las exitosas adjudicaciones proyectadas». Las nuevas diligencias resultan «imprescindibles» para saber si también fueron receptores de cualquier tipo de contraprestación, de la naturaleza que fuere».

Los investigadores inciden en que se aprecian «indicios» de que tanto Pardo de Vera como Herrero habrían ayudado a que «las adjudicaciones» proyectadas por Ábalos y Koldo García llegaron a buen término gracias a que ambos facilitaron de forma inmediata «la información conveniente que obraba en los diferentes expedientes o la salida a licitación de otros, siguiendo las directrices que el ministro, a través de su asesor, les impartía». Los dos se desligaron de los presuntos amaños de obra en su declaración en la Audiencia Nacional el pasado 21 de julio.

La expresidenta de ADIF aseguró en sede judicial que ningún mensaje de Koldo García tuvo efecto sobre las adjudicaciones. Sin embargo, los investigadores han constatado que el hombre de confianza de Ábalos despachaba de forma habitual con Pardo de Vera y el exdirector de Carreteras para hablar de obra pública.

Conversaciones con Koldo

En una conversación grabada por Koldo García el 18 de noviembre de 2020, el asesor pedía con insistencia a la entonces presidenta de ADIF una adjudicación para Levantina, Ingeniería y Construcción. En un primer momento, trató que fuese de mantenimiento, pero tras la negativa de Pardo de Vera, propuso que fuese de emergencia. La investigada le recordó que acababan de concederle una y darle otra iba a resultar sospechoso, aunque se comprometió a sopesar las opciones, según la documentación en poder de la UCO.

«Le hemos dado una de 700.000, hace nada, eh. Hace nada, es que otra vez va a cantar, déjame mirarlo», contestó Pardo de Vera a Koldo García. Unas semanas más tarde, ADIF propuso directamente a Levantina como adjudicataria de una obra de emergencia en Asturias por importe de 592.053 euros. Meses antes, el 28 de enero de 2019, el hombre de confianza de Ábalos envió a la entonces presidenta de ADIF una imagen con los resultados de las ofertas presentadas a una licitación para construir la línea de alta velocidad en Extremadura, «previamente remitida» al asesor por un directivo de Acciona.

La trama perdió esa adjudicación, lo que provocaría el descontento del asesor de Ábalos. Apenas 72 horas después, la expresidenta de ADIF firmó un contrato en Murcia por 146 millones que beneficiaría a la trama. Las pesquisas apuntan a que Pardo de Vera recibía instrucciones de Koldo García para presuntamente manipular adjudicaciones de obra pública. Firmó de su puño y letra las autorizaciones del consejo de administración que daban luz a esos mismos contratos y que habrían sido alteradas para beneficiar a ciertas empresas de la trama. Las concedidas a Acciona superarían los 342 millones de euros.

La UCO encontró durante el registro de la vivienda de Pardo de Vera el pasado 26 de junio un documento sobre el suministro de cinco millones de mascarillas. Se trata del número de cubrebocas que adquirió al inicio de la pandemia el ente público que presidía a Soluciones de Gestión, la empresa investigada en la trama para la que Víctor de Aldama hacía de intermediario. La expresidenta de ADIF también está imputada por su supuesta involucración en la contratación en Ineco de Jésica Rodríguez, expareja de Ábalos.

La defensa de su hermana

Pardo de Vera explicó en la Audiencia Nacional que se limitó a derivar su currículo tras recibir una petición «por si había alguna vacante en la que encajara su perfil». Se enteró de la relación entre Jésica Rodríguez y Ábalos avanzado el proceso, lo que le provocó incomodidad. Por eso, dijo, «doy largas» a prorrogar el contrato tras dos años de trabajo.

Un informe de la UCO desveló diferentes mensajes con Koldo García que demuestran que estaba al tanto del fichaje y que, antes de agotarse su relación contractual, habría propiciado una salida a la joven a través de Tragsatec en la que medió un subordinado. Ana Pardo de Vera siempre ha defendido públicamente la honorabilidad de su hermana. «Ya declaró en el Supremo. No recordaba, y así se lo dijo a los jueces, si había sido por WhatsApp o por email. Ella le dijo que no se puede dar de alta sin seguir un procedimiento», afirmó en una intervención en Cuatro.

Publicidad