Leire Díez desvela que el PSOE trató de «invalidar» el 'caso Ábalos' anulando los audios
La ‘fontanera’ de Ferraz confesó al comandante Villalba que querían inutilizar la cadena de custodia del material de Koldo

Ilustración de Alejandra Svriz.
El PSOE buscó la forma de anular el proceso judicial del caso Ábalos mediante la invalidación de la cadena de custodia de las pruebas obtenidas por la Unidad Central Operativa (UCO), tanto en los dispositivos de su ex secretario de Organización José Luis Ábalos como en los de su asesor Koldo García. Especialmente de este último, al que se le intervinieron 23 teléfonos móviles, algunos de los cuales utilizó para grabar las conversaciones con personas de su esfera política que hoy constituyen algunas de las pruebas más sólidas de la investigación. Leire Díez, la mujer recibió el encargo de Ferraz de recabar información sensible sobre agentes de la UCO y jueces, confesó al comandante de la Guardia Civil Rubén Villalba que la vía para invalidar el juicio era, precisamente, anular esa cadena de custodia. De ahí, explican fuentes próximas a la investigación, la insistencia de Koldo y Ábalos por recuperar los teléfonos móviles del asesor.
La clave está en los teléfonos de Koldo, tanto por parte de los investigadores de la UCO, para quienes han sido una fuente casi inagotable de información sobre las actividades de la trama, como para la defensa de los imputados. Hasta el punto que la defensa de Koldo ha llegado a solicitar la anulación del juicio si no le devuelven los dispositivos. De hecho, también se convirtieron en uno de los principales objetivos del PSOE en su intento por anular la causa. O al menos, así lo reconoció Leire Díez.
El pasado 10 de febrero, Díez y Rubén Villalba mantuvieron un encuentro en un establecimiento hostelero de Madrid, en el que la denominada ‘fontanera del PSOE’ le planteó una oferta al comandante de la Guardia Civil: reclutarle para su ‘causa’, obtener información privilegiada y crítica de mandos y agentes de la UCO, y a cambio ofrecerle la restitución de su carrera en el cuerpo y un destino en el extranjero. Lo que ocurrió, sin embargo, es que el comandante tomó notas de todo y advirtió a sus superiores del Servicio de Información de lo que estaba planeando Díez. Villalba ha testificado recientemente en la causa judicial abierta contra Díez por estos movimientos.
Las notas de aquel encuentro reflejan precisamente el interés de Leire y de altas esferas del PSOE por anular el caso Ábalos. «Leire dice de manera reiterada que ellos van a intentar invalidar por todos los medios el proceso judicial y los problemas en la cadena de custodia. Me lo habrá dicho unas 5-6 veces en el transcurrir de la reunión», señala Villalba en sus notas, a las que ha tenido acceso THE OBJECTIVE.
Según fuentes de la investigación, la clave para demostrar esos problemas en la cadena de custodia a los que se refiere Díez estaría en los propios dispositivos. En el momento en el que Díez le confiesa ese plan a Villalba se había producido, unos días antes, un extraño hallazgo: un pendrive incautado por la Guardia Civil durante la detención de Koldo en su domicilio, y que alguien dejó olvidado en una caja durante un año. La defensa de los acusados pidió dejarlo fuera de la causa al entender que se había roto la cadena de custodia.
Resulta reseñable también el hecho de que alguno de los teléfonos que Koldo García utilizó para grabar a Ábalos o a Santos Cerdán le fueron proporcionados por el comandante de la Guardia Civil.
Recuperar los teléfonos
El magistrado del Tribunal Supremo Leopoldo Puente rechazó el pasado octubre una nueva petición de Koldo García para que se le devolvieran los dispositivos electrónicos intervenidos durante el registro de su domicilio en febrero de 2024. El juez argumentó que los aparatos seguían siendo objeto de un análisis exhaustivo por parte de los investigadores y que todavía se estaba procesando una cantidad muy elevada de documentación. Además, recordó que García podrá ofrecer sus explicaciones o hipótesis alternativas sobre los informes policiales cuando vuelva a declarar ante el tribunal.
La defensa de Koldo García solicitó la devolución de los dispositivos alegando que la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil había elaborado sus informes sobre la base de conjeturas e interpretaciones, no de pruebas directas. Esos informes señalaban la existencia de una posible reserva de dinero en efectivo de origen desconocido que habría manejado García, supuestamente vinculada al exministro José Luis Ábalos, algo que ambos han negado.
El juez también desestimó la petición subsidiaria de suspender el procedimiento hasta que se completara la devolución de los dispositivos. Consideró que no existe base legal para paralizar el proceso y que el derecho de defensa no se ve afectado por esa circunstancia. Añadió que todavía no se han podido entregar copias completas de los terminales intervenidos porque el material sigue analizándose y debe ser depurado para evitar incluir información privada de terceros.
