Leire Díez pide anular los audios en los que se presenta como «mano derecha» de Cerdán
La defensa de la exmilitante del PSOE denuncia que esas cintas vulneran una serie de derechos, como el de intimidad

Leire Díez. | Matias Chiofalo (Europa Press)
Leire Díez ha pedido al juez que anular las grabaciones por las que está investigada. La defensa de la denominada fontanera del PSOE reclama que se expulse del procedimiento tanto el audio que originó el caso como el que aportó a la causa el fiscal Ignacio Stampa, en el que la imputada asegura ser «la persona que ha puesto el PSOE». En esa y otras citas, se presentaba como «mano derecha» del entonces secretario de Organización del partido, Santos Cerdán, con el que este diario documentó reuniones en la sede de la madrileña calle de Ferraz. La exmilitante socialista está citada este lunes a declarar por presuntos delitos de tráfico de influencia y cohecho.
Las fuentes jurídicas consultadas explican a THE OBJECTIVE que la defensa de Díez ha presentado este mismo lunes, momentos antes de su declaración, un escrito en el que denuncia que las grabaciones vulneran una serie de derechos, como el de la intimidad o el secreto de las comunicaciones. La fontanera del PSOE y el empresario Javier Pérez Dolset han accedido al Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid a las 12.30 horas para declarar, después haber recibido varias denuncias por sus presuntos sobornos.
El juez Arturo Zamarriego considera a Díez la líder de un grupo que buscaba información sobre mandos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y de la Fiscalía Anticorrupción. El magistrado sostiene que la exmilitante socialista encabezaba una «actuación delictiva, continuada y coordinada» junto a Pérez Dolset y el periodista Pere Rusiñol para «recabar información comprometida o irregular» con el fin de «anular o malbaratar» investigaciones en «casos relevantes que afectan a políticos y empresarios».
Díez y su vínculo con el PSOE
Zamarriego tiene pensado reproducir este lunes, durante las declaraciones de Díez y Pérez Dolset, la grabación que efectuó Stampa de una reunión que mantuvo el pasado 7 de mayo con ambos y a la que también asistió Rusiñol. El juez busca dilucidar (en una causa abierta tras una denuncia de Hazte Oír) si se habrían emprendido maniobras para recabar «información comprometida o irregular de los mandos de la UCO y de la Fiscalía Anticorrupción a cambio de favores procesales o profesionales».
Las pesquisas parten de varias denuncias contra Díez después de que saliera a la luz unos audios donde ofrece favores a un empresario investigado por la Audiencia Nacional. El documento sonoro, que avanzó El Confidencial, desveló que brindó un pacto a Alejandro Hamlym a cambio de información sensible del teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Balas, jefe del departamento de delincuencia de la UCO y, por tanto, encargado de las pesquisas sobre la esposa y el hermano de Pedro Sánchez, del fiscal general del Estado y del caso Koldo. La exmilitante socialista siempre ha defendido que actuaba como periodista de investigación.
Una coartada que se desmoronó después de que Stampa, al que habría intentado sobornar, aportara unos audios a la causa. Díez se presentaba a las citas afirmando ser la mano derecha de Cerdán. En las tres horas de grabación que aportó el fiscal, diferentes mensajes y una llamada de 13 minutos la exmilitante socialista revela que reportaba sus actividades al ex secretario de Organización del PSOE, pero también al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; al ministro de Justicia, Félix Bolaños; y al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz.
En el audio con Stampa que Díez quiere impugnar, la fontanera del PSOE manifiesta al fiscal que es la «mano derecha» de Cerdán, en prisión preventiva desde el pasado 30 de junio por presuntos cobros de mordidas a cambio de adjudicaciones públicas. También le asegura que es la «persona que habría puesto el partido «a ver qué había detrás de todo esto», en alusión a supuestas irregularidades policiales y judiciales.
Vulnera la confidencialidad
En ese encuentro del 7 de mayo que el fiscal grabó, y cuyo audio figura en la causa, participó también Pérez Dolset, a quien se escucha contar que el juez Manuel García-Castellón le dio unos audios del comisario José Manuel Villarejo para desencriptarlos, entre los que se incluía un supuesto espionaje a Sánchez.
La defensa de Díez también ha pedido anular la grabación de una reunión que mantuvo con el empresario huido de la Justicia Alejandro Hamlyn en un despacho de abogados. En ese encuentro, la fontanera del PSOE ofreció un pacto a cambio de información sensible del teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Balas, jefe del departamento de delincuencia de la Unidad Central Operativa (UCO) y, por tanto, encargado de las pesquisas sobre la esposa y el hermano de Pedro Sánchez, del fiscal general del Estado y del caso Koldo.
Se trata del audio que originó el caso y que, según la defensa de Díez, vulneraría la confidencialidad de las conversaciones entre letrado y cliente, ya que era una reunión en la que se abordaba una estrategia procesal. Este diario destapó otro audio de cómo la denominada fontanera del PSOE manejaría la Fiscalía para atacar a la UCO. La exmilitante socialista también se reunió con el comandante de la Guardia Civil Rubén Villalba, investigado en el caso Koldo para pedirle información sensible de los «elementos subversivos» del cuerpo a cambio de dispensarle protección judicial y gestionar su rehabilitación.
El titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid incorporó a la causa las denuncias por intento de soborno presentadas por los fiscales Stampa y José Grinda. La Fiscalía explicó en un escrito a Zamarriego que entendía que era necesario investigar los hechos «conjuntamente» porque «el patrón de actuación es exactamente el mismo».
