El supuesto 'testaferro' de Zapatero se convirtió en bróker aéreo en pleno rescate de Plus Ultra

El presunto ‘testaferro’ de José Luis Rodríguez Zapatero se convirtió en bróker aéreo en pleno rescate de Plus Ultra. El Consejo de Ministros aprobó una ayuda de 53 millones de euros para la aerolínea el 9 de marzo de 2021. Días más tarde, el 17 de marzo, Julio Martínez Martínez cambió el objeto social de una empresa, a la que renombró como Voli Analítica. La sociedad pasó de la actividad inmobiliaria a dedicarse a la «intermediación en el transporte aéreo de mercancías y personas actuando como bróker de vuelos». Su irrupción en el sector se produjo sin apenas estructura, ya que ni siquiera contaba con empleados.

La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional registró la aerolínea el pasado 11 de diciembre. Ese mismo día fueron arrestados Martínez Martínez, un empresario con fuertes vínculos con Plus Ultra; su presidente, Julio Martínez Sola; y su CEO, Roberto Roselli. Se les atribuyen delitos de fraude fiscal, pertenencia a organización criminal y apropiación indebida. Los tres declararon hace una semana ante la juez Esperanza Collazos, que les dejó en libertad con medidas cautelares.

La actual Voli Analítica fue creada con el nombre de Rentas Litoral en abril de 2018, meses antes de que Pedro Sánchez se convirtiera en presidente del Gobierno. El primer administrador de la sociedad fue Manuel Martínez Martínez, al que los investigadores señalan como hermano del presunto testaferro de Rodríguez Zapatero. La empresa se creó con un capital social de 200.000 euros e instaló su sede en la urbanización El Mirador de Vera (Almería) donde el expresidente del Gobierno poseía un chalet. El empresario utilizó una dirección incompleta, lo que dificulta a los investigadores encontrar el nexo con el antiguo líder socialista.

Una comisión para Zapatero

Rentas Litoral indicó en el registro mercantil que se dedicaba a «la actividad inmobiliaria en general entendida en su más amplia acepción». E insistía: «El objeto social irá dirigido al arrendamiento no financiero de toda clase de edificios, terrenos y bienes inmuebles en general, por cuenta propia o ajena de todo tipo de terrenos y edificaciones». Tres años más tarde, el escenario cambió por completo.

En marzo de 2021 Rentas Litoral se convirtió en Voli Analítica. Cambió de nombre; renovó su actividad; mudó su sede de Vera a un polígono de Elda (Alicante); y sustituyó a su administrador. La tarea recayó en Julio Martínez Martínez, uno de los detenidos por el caso Plus Ultra. A partir de ese momento, la empresa pasó del sector inmobiliario a actuar como un bróker aéreo. Lo hizo apenas unas semanas después de que el Gobierno concediera un rescate de 53 millones de euros a Plus Ultra a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).

El préstamo se concedió mediante el Fondo de Ayuda a la Solvencia de las Empresas Estratégicas (Fasee), con el que también se rescataron a otras aerolíneas como Air Europa (475 millones de euros) y Volotea (200 millones) durante la pandemia. Hasta ahora, la compañía de capital venezolano solo ha devuelto los intereses. La UDEF sospecha que Plus Ultra no cuenta con fondos para devolver el crédito: está obligada a reintegrar 19 millones en el próximo año y los 34 millones restantes en 2028.

Los investigadores sospechan que Rodríguez Zapatero cobró una comisión por ayudar en el rescate de 53 millones a Plus Ultra y que usó a Martínez Martínez como testaferro. Las fuentes policiales indican a este diario que la relación entre ambos comenzó en 2012, poco después de que el socialista abandonara Moncloa. A partir de entonces mantendrían un contacto frecuente que se ha traducido en viajes recurrentes a Venezuela en los que el empresario alicantino habría cerrado diversos negocios gracias al respaldo y la intermediación del expresidente del Gobierno.

Las sociedades de Martínez Martínez

Los agentes de la UDEF consideran que parte de esos 53 millones se destinó a devolver préstamos a sociedades extranjeras radicadas en Suiza, Francia y Panamá en lugar de garantizar la viabilidad de la aerolínea. Esas firmas estarían vinculadas a una presunta organización criminal dedicada al blanqueo de capitales y podrían guardar relación con operaciones de oro venezolano y pagos a entidades como la empresa estatal de petróleo y gas de Venezuela, Pdvsa.

Martínez Martínez activó al menos ocho sociedades mercantiles en los meses posteriores al rescate de Plus Ultra, según avanzó Vozpópuli. El amigo de Rodríguez Zapatero pasó a figurar en cuestión de semanas como administrador único de Rentas Litoral (que renombró como Voli Analítica), Rentas Emeritenses, Mérida Capital, Nez Asesores, Afitta, Agropecuaria Lucena, Zenebtimar y Zenzap. Empresas sin apenas actividad con diversos objetos sociales.

La última de esa lista, Zenzap, tenía alrededor de 350.000 euros en su tesorería al cerrar el ejercicio de 2021, el del rescate a Plus Ultra. Sin embargo, declaró cero euros como ganancia de su actividad de negocio. Los investigadores creen que esas cifras son compatibles con el cobro de una comisión por algún tipo de gestión durante ese curso. Al año siguiente, las cuentas de la empresa se hundieron hasta los 28.000 euros, por lo que el grueso de ese dinero salió de la sociedad rumbo a otras del mismo empresario, perdiéndose así la pista. Ese año también, otra de las empresas de Martínez Martínez, Análisis Relevante, se convirtió en cliente de la agencia de las hijas de Rodríguez Zapatero.

El empresario depositó las últimas cuentas de Voli Analítica el 30 de marzo de 2023, por lo que corresponden a 2022. La firma facturó 27.272 euros, muy por debajo de los 71.895 euros del ejercicio anterior. Esta empresa pasó a formar parte de un entramado de 18 sociedades desvelado por TO y que Martínez administró estos años desde una nave industrial en un polígono de Elda (Alicante), que fue registrada la semana pasada por agentes de la UDEF.