
La policía y sus confites
La Audiencia Nacional ha liberado a dos hombres, Edrissa Ceesay y Samir Sennouni, presos desde el 27 de diciembre, que fueron engañados por un confidente de la Policía acusados de estar preparando un atentado yihadista en Madrid. La base de la acusación eran unos vídeos que finalmente resultaron ser un montaje de uno de los confidentes. Según el texto del auto de libertad firmado por el juez Santiago Pedraz, “los indicios que apuntaban a que los investigados tenían un corte yihadista se han desvanecido”. Bueno, se desvanecieron desde el inicio, cuando el CNI, o sea, nuestros espías, advirtieron del error y de la calaña del informante.