Demócrata

Los poderes de la CUP

La constatación de que un grupúsculo antisistema como la CUP puede determinar los presupuestos generales de Generalitat y las facetas más escabrosas del proyecto de secesión da una idea de la azarosa circunstancia que la sociedad catalana lleva viviendo desde hace tiempo. La CUP dio su apoyo a Junts pel Sí –es decir, Convergència y ERC- a cambio de que descabalgasen a Artur Mas y le sustituyeran, ya mucho más allá del principio de Peter, por Carles Puigdemont, aunque ambos comparten una aparatosa ignorancia sobre el Estado de Derecho y sobre la política y, en concreto, sobre la historia política de Cataluña y de toda España. Estamos en el ámbito del mito, irracional y primario. Los 300.000 votos de la CUP y sus diez escaños condicionan el futuro inmediato de una sociedad que por su parte ya ha desconectado de la desconexión, al contrario del microcosmos político nacionalista.

La verde Jill Stein tiene la llave para frenar la presidencia de Trump

La verde Jill Stein tiene la llave para frenar la presidencia de Trump

Varias publicaciones internacionales informan de que un grupo de expertos ha urgido a Hillary Clinton a pedir un nuevo escrutinio por posibles ataques informáticos en esos estados. Si Clinton fuera la vencedora finalmente en esos tres estados clave, tendría 278 electores en el Colegio Electoral, el organismo que elige al inquilino de la Casa Blanca, y sería la presidenta electa. Wisconsin reparte 10 electores, Michigan, 16 y Pensilvania, 20. Para ser presidente hay que llegar a 270 electores y Donald Trump superó a la demócrata al ganar más estados y obtener 316 compromisarios por los 232 de Clinton. Sin embargo, Clinton fue la ganadora del voto popular por casi dos millones de diferencia.

A Hillary Clinton le votaron 1,75 millones más de personas que a Donald Trump

A Hillary Clinton le votaron 1,75 millones más de personas que a Donald Trump

El voto popular no elige al presidente. Lo hace el Colegio Electoral, integrado por 538 electores o compromisarios de todos los estados. Esa cifra es igual al total de senadores y congresistas (100+435) del país y los tres representantes del Distrito de Columbia, en Washington. La senadora demócrata Barbara Boxer ha iniciado una campaña para que esto cambie. Para ello ha introducido un proyecto de ley para enmendar la Constitución de EE.UU. y modificar su sistema electoral para que el ganador del voto popular en comicios futuros sea quien llegue a la Casa Blanca. La iniciativa que pretende impulsar la senadora Boxer, que en enero deja su cargo, eliminaría el Colegio Electoral e instauraría el sistema de una persona un voto, pero , al tratarse de una enmienda constitucional, requiere el apoyo de dos tercios de las dos cámaras -ahora en manos de los republicanos-, además del 75% de los estados, por lo que es improbable que se apruebe.

Publicidad
Publicidad
Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D