En dicha operación han sido intervenidos más de 400.000 archivos explícitos de abusos sexuales a menores, entre ellos, vídeos y fotogramas en los que se reproducen abusos sexuales desde bebés hasta niños y niñas de 16 años, además de algunos archivos donde se aprecian escenas de un elevado contenido de violencia sexual ejercida sobre las víctimas. Según Tine Hollevoet, portavoz de Europol, la investigación comenzó en junio de 2015 tras recibir información facilitada por la policía suiza.
De los 24 registros domiciliarios practicados por la Guardia Civil en las diferentes provincias de nuestro país, fueron intervenidos un total de 65 discos duros, 36 dispositivos USB, una CPU clónica, seis ordenadores portátiles, un router, 17 tarjetas de memoria SD, 69 DVD´s, una cámara de fotos, un ordenador Mac, un teléfono móvil, tres tablets y un iPad.