Detrás de este gran avance está un equipo de científicos de cinco universidades de Reino Unido. Actualmente, se están sometiendo al tratamiento 50 pacientes y uno de ellos podría ser la primera persona del mundo en curarse. «Se trata de uno de los primeros intentos serios de una cura completa para el VIH. Estamos explorando la posibilidad real de curarlo. Es un gran desafío y, aunque aún es pronto, el progreso ha sido notable», ha asegurado al diario The Sunday Times el director general del Instituto Nacional de Investigación Médica, Mark Samuels.
El tratamiento ataca al virus en dos etapas: golpea y mata. La primera consiste en una vacuna que ayuda al cuerpo a detectar las células infectadas por el VIH. En la segunda fase se emplea un nuevo fármaco, llamado Vorinostat, que activa las células T del ADN -que son fábricas víricas que reproducen el virus- para que puedan ser vistas por el sistema inmunológico y aniquilarlas.
Si finalmente los buenos resultados se mantienen, este tratamiento supondría una gran esperanza para las 36.7 millones de personas que, en 2015, tenían el virus, según datos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.