Ya que tenía que viajar a Lugo, me pareció que las obras completas de José Alfredo Jiménez podrían hacerme más llevadero el camino. Quizás algún día, si vamos ganando confianza, les contaré por qué quisiera haber sido un mariachi. Por hoy bastará con decirles que Dios puso en el mundo a los mariachis para hacernos creer que la vida cabe en un corrido, de la misma manera que puso en el mundo las campañas electorales para hacernos creer que la vida cabe en un programa electoral.
Antes de votar, reflexionen; pueden hacerlo: por mucho que diga la neurociencia, no estamos condenados a la tribu
Carl Schmitt consideraba el sufragio universal secreto como el gran error político contemporáneo. Para el jurista alemán, ninguna voluntad general puede surgir por la agregación de voluntades particulares, expresadas en la privacidad de una anónima papeleta, envuelta en un sobre entre las bambalinas de una cabina electoral, depositado en una urna cerrada. Cualquiera que sostenga una idea de democracia participativa o deliberativa estará de acuerdo en que el voto cada cuatro años es insuficiente como fundamento y experiencia de la democracia. Y puede aceptar que el ejercicio de depositar la papeleta, aislado de todo proceso de formación de una voluntad popular, es incluso peligroso: puede ser expresión de meros sentimientos manipulables; o de intereses particulares manipuladores.
La llamada nueva política no pareció muy cómoda en este cara a cara encubierto
El hombre es un capitalista con puro y chistera para el hombre.
Vox quiere escribir su apunte en la historia del fin del bipartidismo, y el gentío de Vistalegre más los apuntes de las encuestas le otorgan cierta esperanza de conseguirlo.
Uno de los espectáculos más asombrosos al que hemos asistido en esta campaña electoral ha tenido como insólito protagonista al director de la televisión pública catalana. Y digo insólito porque en cualquier entrevista, y más aún en un medio sufragado por el contribuyente, el protagonismo debería recaer única y exclusivamente en el entrevistado.
Arrastramos una parálisis política e institucional de más de un año. Espero que el gobierno sea lo suficientemente adulto y responsable para no pedir cien días de gracia. Aunque, estamos en España, niña Isabel, porque son uno y lo mismo, lo memos de tus amantes, el bestia de tu marido.