Facebook cierra varias cuentas por intentos de injerencia extranjera en las elecciones de EEUU

Facebook ha bloqueado unas 30 cuentas en su plataforma y otras 85 en Instagram ante las sospechas de que pudieran estar vinculadas con entidades extranjeras y destinadas a interferir con las elecciones de medio mandato que se celebran este martes en Estados Unidos.

El anuncio se produce después de que responsables de agencias de inteligencia de Estados Unidos y altos cargos del Gobierno alertaran el lunes sobre la posibilidad de injerencias extranjeras en las elecciones legislativas, pese a reconocer que no existen, de momento, indicios de que la infraestructura electoral haya resultado afectada, según un comunicado firmado por los secretarios de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, y de Justicia, Jeff Sessions, así como por el director de inteligencia, Dan Coats, y el jefe del FBI, Christopher Wray.

Un estudio publicado la semana pasada descubrió que se estaba extendiendo información por las redes sociales de forma aún más intensa que durante la campaña de las presidenciales en 2016, en la que Rusia fue acusada de interferir mediante propaganda a favor de la candidatura del hoy presidente, Donald Trump. Unos hechos que siguen bajo investigación.

«El domingo, agentes de Estados Unidos contactaron con nosotros para advertirnos de actividades online que habían descubierto recientemente y que creían que podían estar vinculadas a entidades extranjeras», ha informado Facebook.

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— Facebook (@facebook) 6 de noviembre de 2018

«Nuestra investigación preliminar ha identificado alrededor de 30 cuentas en Facebook y 85 en Instagram que podrían estar involucradas en un comportamiento coordinado indebido. Inmediatamente bloqueamos esas cuentas», asegura la compañía. Todas las páginas de Facebook asociadas a las cuentas estaban en francés o ruso, mientras que las cuentas de Instagram estaban principalmente en inglés, algunas «enfocadas en celebridades, otras en el debate político».

Los servicios de inteligencia de EEUU, por su parte, indicaron que «los estadounidenses deben ser conscientes de que los actores extranjeros, y Rusia en particular, continúan tratando de influir en la opinión pública y el sentimiento de los votantes a través de acciones destinadas a sembrar la discordia».

Entre los posibles actos de injerencia, el comunicado del Gobierno y de los servicios de inteligencia citan la difusión de información falsa sobre el proceso electoral o los candidatos, la propaganda en las redes sociales y otros métodos.

En todo caso, admiten que, «por el momento, no tenemos indicios de que la infraestructura de votación de nuestra nación se haya visto comprometida con el propósito de evitar la votación, cambiar el recuento de votos o perturbar la capacidad de contar los votos».

«Estados Unidos no tolerará la interferencia extranjera en nuestras elecciones por parte de Rusia, China, Irán u otras naciones», advirtieron, recordando que habían calificado a estos países de «amenaza» a la democracia estadounidense en otra declaración conjunta el 19 de octubre.

Sus servicios, añadieron, han «trabajado como nunca antes» para combatir estos intentos externos de influir en los comicios y para ayudar a las autoridades locales a garantizar la seguridad de sus infraestructuras.

Los firmantes del documento también instan a los votantes a frustrar estos esfuerzos de incidir en las legislativas «manteniéndose informados, informando de cualquier actividad sospechosa y siendo vigilantes al consumir informaciones».

En septiembre, el presidente Donald Trump firmó un decreto que establece un marco para sancionar cualquier intento extranjero de perturbar el desarrollo de las elecciones en Estados Unidos.

Según los servicios de inteligencia, Moscú llevó a cabo una operación concertada y planificada para influir en las elecciones presidenciales de 2016 a favor de Trump, en particular a través del uso de las redes sociales y la difusión de «noticias falsas». Rusia ha negado estas acusaciones pero la justicia federal de EEUU continúa investigando si hubo algún vínculo entre Moscú y el equipo de campaña del magnate republicano.

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