El explorador más jóven de la historia de España es amante y defensor de los perros
Con sólo 16 años, Manuel Calvo Ariza está a punto de comenzar la mayor aventura de su vida. Es uno de los participantes de Desafío Ártico, una expedición organizada por la asociación Maratón Dog y patrocinada por Tiendanimal, dentro de su programa Tiendanimal Educa.
Con sólo 16 años, Manuel Calvo Ariza está a punto de comenzar la mayor aventura de su vida. Es uno de los participantes de Desafío Ártico, una expedición organizada por la asociación Maratón Dog y patrocinada por Tiendanimal, dentro de su programa Tiendanimal Educa. El objetivo principal de la expedición es realizar un censo de la población canina del noroeste de Groenlandia, donde hay más perros que personas. Se trata de una región remota que sufre las consecuencias irreversibles del cambio climático y en la que convive el pueblo Inuit con los perros de raza groenlandesa en una relación simbiótica que les permite sobrevivir en condiciones ambientales tan extremas.
Los datos obtenidos en esta expedición servirán para completar la información proporcionada a las universidades de Málaga y Barcelona en ediciones anteriores. Ya se han apuntado muchas curiosidades y diferencias entre las bacterias y algunos otros elementos orgánicos de los perros groenlandeses, primitivos y aislados en pureza de otras razas caninas, con respecto de los que conocemos en otras latitudes. Un proyecto interesante para cualquiera, pero especialmente para Manuel, amante y defensor de los perros, que recorrerá junto a su padre 400 kilómetros a -20ºC y regresará como el explorador ártico más joven de España del que se tenga constancia.
Manuel Calvo Villena, padre de Manuel, líder de la exploración y director de eventos y relaciones institucionales de Tiendanimal, asegura que para él se trata de una doble experiencia: “Por un lado, la de sentir que estás enseñando a alguien tan joven –de 16 años– a curtirse y a superar las adversidades en un terreno hostil y por otro lado, la de ver crecer a tu hijo en el plano más profundo y vital, compartiendo con él esta aventura.” Está orgulloso de su hijo Manuel y lo manifiesta con claridad: “Que de él surgiera la idea de venir a este desafío conmigo es la prueba más valiosa de su increíble espíritu de superación, del que yo soy testigo desde que nació.” Por otra parte, cuando se le pregunta sobre el pueblo Inuit, el expedicionario lo tiene claro: “La humildad es un valor que los Inuit ya no sólo enseñan, sino que practican en cada acción que llevan a cabo. Solidaridad y humildad son las dos grandes enseñanzas que cada año me llevo del Ártico.”
Esta experiencia será posible gracias al programa Tiendanimal Educa, patrocinador de la expedición, que nació en octubre de 2016 como una iniciativa de RSC a nivel nacional con el objetivo de fomentar entre el público infantil el respeto hacia los animales. Según la información suministrada por Tiendanimal: “Se trata de la mayor campaña educativa puesta en marcha en el territorio español, con el propósito de educar y concienciar a la población más joven en relación al cuidado de mascotas y, de esta manera, contribuir a la tenencia responsable para evitar los problemas de abandono y maltrato animal.” Bravo. La educación es, sin duda, la mejor herramienta. Mucho éxito, amigos ¡Nos vemos a la vuelta!