Game Jam Cultura Abierta, una perspectiva diferente de nuestro patrimonio cultural
La sinergia entre el videojuego y nuestro patrimonio cultural es una realidad fuera de discusión, e iniciativas como Game Jam Cultura Abierta promovida por DEV, AC/E y el Ministerio de Cultura y Deportes lo demuestran.
La pasada edición de Gamelab, uno de los eventos más relevantes del mundo del videojuego en nuestro país, contó con la presencia del actual ministro de Cultura, José Guirao, en su acto de inauguración. Durante el breve discurso que ofreció, insistió en la necesidad de potenciar el videojuego como “la gran industria cultural de nuestro país”, atendiendo a su capacidad para generar puestos de empleo y su proyección internacional. Una situación de bonanza que no puede pasarse por alto, aunque todavía falte mucho para equiparse al nivel de otros países.
Que las instituciones y los órganos de Gobierno empiecen a prestar atención al videojuego es, desde luego, una noticia excelente. Así que no sorprende que este año haya vuelto a convocarse la Game Jam Cultura Abierta, una iniciativa puesta en marcha por la Asociación Española de Desarrolladores de Videojuegos, DEV, y el Ministerio de Cultura y Deporte. El objetivo de una game jam es la realización de un videojuego en un tiempo marcado; suelen ser varias horas, normalmente un día o un fin de semana completo, aunque algunas jams pueden extenderse durante un periodo mayor. Para los desarrolladores que se atreven con este reto, la necesidad de ceñirse a una limitación de tiempo y recursos supone una manera de poner a prueba sus habilidades; una forma de aprender, crecer a nivel personal y potenciar el trabajo en equipo. Además, es un buen punto de partida para acometer proyectos de mayor envergadura: muchos juegos comerciales de notable éxito, como Superhot, el español Gods Will Be Watching o Baba is you surgieron como pequeñas creaciones de game jam en su día.
Hay otro elemento habitual que define las jams casi siempre, un añadido más al desafío: nuestro juego debe estar inspirado en un tema determinado. Este es, precisamente, el aspecto que distingue a la Game Jam Cultura Abierta: los participantes deben escoger una obra cultural de dominio público generada en España y crear un juego en torno a ella. Así, se convierte esta iniciativa en una manera de dar a conocer, desde una óptica diferente y con el añadido de la interactividad, nuestro acervo cultural patrio.
La primera edición de la Game Jam Cultura Abierta tuvo lugar a finales del año pasado, del 16 al 18 de noviembre. Durante este periodo, se crearon nada menos que 30 juegos, con inspiraciones de lo más variado: desde las pinturas negras de Goya hasta la poesía de Lorca o sus Bodas de sangre, pasando por leyendas populares, la obra de Juan Gris, el inevitable Lazarillo de Tormes… e incluso se mostró el enfrentamiento final entre Góngora y Quevedo, ¡por fin! La creatividad de los participantes quedó fuera de toda duda. Los juegos están disponibles en la página creada para la game jam, en la plataforma itchi.o. Además, varios de ellos formaron parte de una exposición en la Quinta del Sordo, una comunidad de artistas ubicada en el centro de Madrid, entre el 23 y el 30 de enero de este año. La inauguración de la exposición contó con el apoyo del Ministerio de Cultura a través de Eduardo Asensio Leyva, asesor de la subdirección general de Propiedad Intelectual, e incluso un invitado internacional, Greg Buchanan, guionista de No Man’s Sky: Atlas Rises, quien ofreció la charla Originalidad e inspiración en el desarrollo AAA e indie.
Teniendo en cuenta esta acogida tan positiva, no es de extrañar que este año se haya repetido la iniciativa. En esta ocasión, ha sido durante el fin de semana del 13 al 15 de diciembre, y se ha sumado a la ecuación, como promotora del evento, la entidad pública Acción Cultural Española. El número de participantes se ha visto reducido un tanto: en la página de Itchi.o pueden verse los trece juegos finales. Lorca, el Lazarillo o Don Quijote han estado presentes, cómo no, pero también la Celestina o Emilia Pardo Bazán se han sumado esta vez, como fuente de inspiración para los desarrolladores.
¡Ya podéis echar un vistazo a los juegos de la @JCulturaAbierta! Vais a encontrar jueguitos basados en obras de Emilia Pardo Bazán, Ramona López de Ayala, Lorca o Rosalía de Castro.
☺️👉 https://t.co/TSUDi0Q7ys
#⃣ #JamCulturaAbierta w/ @dev_es, @ACEcultura y @culturagob.— eleazar⚡️ (@Eleavania) 16 de diciembre de 2019
Al igual que el año pasado, y como es habitual en muchas game jams, era posible participar en remoto o acudiendo a la sede física en Madrid, en el espacio de coworking Bernabéu. Quienes eligieron participar en dicha sede también pudieron asistir a las charlas de inauguración, en esta ocasión a cargo de la periodista y escritora Eleazar Herrera, quien centró su intervención en la literatura de dominio público, y el bufete de abogados Blue&Bird, que habló sobre propiedad intelectual, un tema en ocasiones peliagudo para cualquier desarrollador en ciernes.
La página web de la jam Cultura Abierta también menciona que, al igual que sucedió a principios de este año, se seleccionarán varios de los participantes para una exposición física en Madrid. La fecha y los detalles todavía no se han definido; habrá que estar atentos a las novedades. En una game jam no suele haber perdedores o premiados, no obstante; solo ganadores en materia de aprendizaje y diversión. Y en esta, además, existe un valor añadido que la hace especial: la doble reivindicación del carácter cultural del videojuego, una realidad ya fuera de discusión, y de la sinergia entre este y otros ámbitos de nuestra producción artística. Esperamos ver muchas más ediciones de esta iniciativa, y, por qué no, contemplar cómo se convierte sea el germen de otras muchas ideas similares que nos permitan redescubrir nuestro patrimonio desde una perspectiva lúdica.