Lugares seguros y paseos virtuales: cómo sobrellevar la cuarentena desde los videojuegos

Para algunos, el aislamiento provocado por la triste situación en torno al COVID-19 supone un cambio radical en sus costumbres, casi como verse arrojados a una realidad alternativa. Para otros, no obstante, no dista demasiado de su cotidianidad. Sin embargo, de lo que no cabe duda es de que todos andamos necesitados de cierto descanso mental, de apartarnos aunque sea durante unos instantes de la tensión y las preocupaciones que nos genera la actualidad. Y la ficción, por supuesto, es casi siempre un excelente refugio.

Por suerte para nosotros, tenemos una oferta cultural amplísima en todos los ámbitos para tratar de sobrellevar la cuarentena, incluso para atrevernos con nuevas aficiones. En el terreno del videojuego, hemos seleccionado varias obras que, de un modo u otro, nos pueden ayudar a sentirnos mejor. Lugares seguros donde relajarnos, o escenarios virtuales por los que pasear mientras esperamos el momento de volver a salir a la calle, libres de temor. 

The Bird Museum, de everydaylouie

Los pájaros están de moda en Internet, casi tanto como los gatos. Así que no es de extrañar que The Bird Museum haya surgido como un proyecto colaborativo a través de Twitter. El desarrollador Louie Zong, everydaylouie, comparte con nosotros a través de itch.io, de forma gratuita, esta peculiar idea: un museo en el que los cuadros y las esculturas representan diferentes especies de aves dibujadas por tuiteros. Es un paseo absorbente gracias a su melodía relajante, que también resulta ideal para los más pequeños de la casa, ahora que tantos padres se preguntan cómo entretenerlos durante la ausencia de clases.

No es la primera vez que Zong nos propone una experiencia de este tipo: suyo es el simpático Beach Walker, por ejemplo. Un juego para navegador que consiste en lo que su nombre indica, ni más ni menos: pasear por la playa. También bastante pertinente ahora, sin duda.

A Short Hike, de Adam Robinson-Yu

Otro juego para PC, disponible a través de Steam, que hará las delicias de mayores y pequeños. A Short Hike nos traslada a un mundo de gráficos encantadores y animales antropomorfos (muy en la línea de la franquicia Animal Crossing) y nos invita a acompañar a su protagonista, una joven pingüina, en su trayecto hacia la cima de una montaña, donde espera tener cobertura para su móvil. Lo importante no será el destino, no obstante, sino el camino. Multitud de personajes se cruzarán con nosotros y nos veremos envueltos en sus propias historias, pequeñas pero importantes. Un título donde la solidaridad y la comunicación con los demás juegan un papel fundamental.

Walden, a game, de Tracy Fullerton

Ya lo decíamos al principio. Está claro que la cuarentena va a suponer un cambio radical en la vida diaria de muchas personas, pero no necesariamente negativo. Quizás, para algunos, represente una oportunidad para la introspección o para retomar tareas y hobbies abandonados. Es posible que algunos se sientan como Thoreau en el momento en que decidió que quería, al menos por un tiempo, “vivir deliberadamente”, conectado con el mundo natural.

Para acompañar este sentimiento podemos dar una oportunidad a Walden, a game. Efectivamente, es la adaptación para PC de la novela homónima del mencionado autor. El Smithsonian Magazine lo describió como “el juego más improbable del mundo” en el momento de su lanzamiento, en 2017. Una experiencia interactiva en el bosque en la que debemos encontrar el equilibrio entre la supervivencia y la búsqueda de lo trascendente. No sabemos si el propio Thoreau lo hubiera aprobado, pero desde luego es una manera diferente y original de rescatar sus vivencias y adaptarlas a los nuevos tiempos.

PLAYNE: The Meditation Game, de Krish Shrikumar

Krish Shrikumar se define en su Patreon como “un desarrollador que quiere ayudarnos a tener una existencia más feliz”.  Una meta que ha cristalizado en su único trabajo hasta el momento, PLAYNE: The Meditation Game. Como obra interactiva, es de lo más sencilla: nos lleva hasta un prado en el cual podemos detenernos a meditar, estableciendo el tiempo que queramos dedicarle al día. Sin embargo, el verdadero valor de PLAYNE estriba en que puede ayudarnos con uno de los requisitos más complicados de esta actividad: la creación de un hábito.

Aprender a meditar, a controlar nuestra respiración de modo consciente e iniciarnos en los beneficios del mindfulness, puede ser muy sencillo; no obstante, el verdadero reto se encuentra en convertirlo en una rutina diaria. Aunque nos planteemos dedicar diez minutos al día, a menudo los quehaceres y los imprevistos nos impiden hallar ese momento.

PLAYNE nos gamifica la tarea mediante una serie de alicientes: nuestro “prado para la meditación” irá cambiando y ampliándose cuantos más días seguidos dediquemos a ello, y podremos desbloquear nuevas áreas. Además, nos ofrece una guía paso a paso y nos permite registrar nuestro progreso y nuestros logros. Incluso podemos configurar un recordatorio diario a través de su grupo de Discord.

Kind Words, de PopCannibal

Aunque ya dedicamos un artículo completo a este título, no podemos dejar de recomendar Kind Words de nuevo. Y es que son muchas las páginas de videojuegos y los usuarios que están redescubriendo sus beneficios durante esta época tan complicada.

Kind Words es un espacio para escribir cartas. Tan sencillo como eso. En ellas, podemos dejar constancia de nuestros pensamientos, realizar preguntas o solicitar consejo en un entorno seguro, protegido (y con mucho celo por parte de los moderadores, que no toleran comportamientos tóxicos). Recibiremos la respuesta de personas anónimas que intentarán ayudarnos en la medida de sus posibilidades.

Aunque no debería sustituir el consejo de un profesional si se necesita, por supuesto, es un lugar idóneo para sentirnos aliviados de nuestras cargas, durante un rato al menos, o tratar de hacer más llevaderas las de los demás. Un simple vistazo nos permite encontrar numerosos mensajes de preocupación o consejos referentes a la pandemia de COVID-19. Entre las múltiples muestras de solidaridad y fraternidad que estamos viendo en estos días, tratar de confortar a otros en la distancia no es, desde luego, la menor o la más insignificante de ellas. Kind Words es una estupenda herramienta para esto.