La historia de éxito de Houseparty, la app de los creadores de Fortnite y resucitada en plena pandemia
La aplicación más descargada en cuarentena ya no solo atrae a la Generación Z
Houseparty es la más aplicación más descargada en la App Store de Apple y está entre las cinco primeras en Google Play desde que empezó la cuarentena. No es de extrañar: el distanciamiento social forzado por la pandemia del coronavirus[contexto id=»460724″] ha provocado que busquemos alternativas para estar en contacto con familia y amigos, y la que más triunfa es la que tiene forma de videollamada.
Aunque otras aplicaciones, como Hangouts, Skype o Zoom, están despuntando, Houseparty parece que puede con todas. ¿Por qué? Porque ofrece algo que ninguna ofrece: la disponibilidad de juegos simples para jugar durante las videollamadas.
La aplicación más exitosa durante esta cuarentena pasaba desapercibida antes de que estallara la crisis, y solo una generación –la Generación Z[contexto id=»381720″]– se fijaba en ella. Pero ahora está en boca de todos y vamos a repasar su historia de éxito, sus características principales e, incluso, la famosa polémica por el supuesto robo de datos a usuarios.
Creación y adquisición de Epic Games
Houseparty nació en 2016 de la mano de la compañía Life on Air, con sede en San Francisco. Su popularidad era relativa. Muy enfocada en el público más joven, hasta junio de 2019 Houseparty se había descargado 35 millones de veces pero su ritmo de utilización se estaba ralentizando, incluso estancando.
En junio de 2019, los de Epic Games, creadores del famoso videojuego online Fortnite, adquirieron por una cuantía aún desconocida esta aplicación, y también su compañía creadora. El objetivo en aquel momento de Epic Games era el de diversificar su negocio y competir con Discord, la plataforma de gamers que estaba a la vanguardia entonces.
Como en el caso de Fornite, la clave del éxito de Houseparty es que es una aplicación gratuita. Entonces, ¿de dónde sacan beneficio? De las compras dentro de la propia aplicación. En enero de 2019, Houseparty agregó el popular juego móvil Heads Up, con el que ofrecía compras en la aplicación por primera vez. Meses después, en marzo de ese año, se puso al frente de la compañía Sima Sistani, quien cofundó la aplicación y quien era su jefa de operaciones hasta ese momento. Lo que ni la CEO ni los responsables de Epic Games pudieron prever era una pandemia global que colocaría a Houseparty en una aplicación tan demandada como las principales plataformas.
Boom en tiempos de coronavirus: diferencias con sus competidores
La pandemia global trajo consigo un impulso insospechado para esta aplicación que, como hemos dicho, andaba estancada en su nicho, los más jóvenes. Ahora Houseparty es de dominio intergeneracional. Esta nueva edad de oro propiciada por el distanciamiento social puede extenderse todo lo que dure la crisis la sanitaria y, quién sabe, quedarse si logran fidelizar a sus usuarios.
El principal atractivo de esta aplicación es que no ofrece solamente videollamadas. La aplicación sí puede usarse como si fuera una app de videollamadas tradicional, en que el usuario puede establecer contacto con hasta otras 7 personas a la vez. Pero en sus juegos radica su diferencia.
Hay cuatro juegos en total: Heads Up, Chip & Guac, Trivia y Quick Draw. Todos cuentan con diferentes modalidades.
En el primero –que fue el que antes se popularizó–, todos los participantes de la videollamada excepto uno ven una carta. El jugador «ciego» debe adivinar su contenido con las pistas de los demás. El de Chip & Guac consiste en asociar palabras, el de Trivia funciona como un juego de preguntas clásico y Quick Draw es una especie de Pictionary.
La aplicación, que aún no está traducida al español, destaca también por la buena calidad de vídeo y audio que ofrece, siempre dependiendo de la conexión de los usuarios, pero es mejor que en otras.
¿Roba los datos de los usuarios?
El éxito ha venido acompañado, como suele ser costumbre, de polémica. Recientemente han saltado los rumores de un posible hackeo a través de los datos que los usuarios facilitan en el momento de descargar la aplicación.
Algunos de sus usuarios comenzaron a difundir mensajes y pantallazos de otros en los que se aseguraba que se había tenido acceso a cuentas de otros servicios a través de las credenciales de Houseparty.
Dichos usuarios aseguraban que sus cuentas de Spotify y de otras redes sociales, así como sus datos bancarios, habían sido accesibles a otros usuarios y que la raíz de todo estaba en Houseparty. Esto provocó alarma y que los usuarios de la aplicación llamaran a desinstalarla.
No obstante, sus responsables se han defendido diciendo que todo formaba parte de una campaña difamatoria. «Todas las cuentas de Houseparty son seguras. El servicio es seguro, nunca ha estado comprometido y no recoge contraseñas de otros sitios», aseguraban en un primer momento en Twitter.
All Houseparty accounts are safe – the service is secure, has never been compromised, and doesn’t collect passwords for other sites.
— Houseparty (@houseparty) March 30, 2020
Tras continuar los mensajes de usuarios que animaban a otros a borrar su cuenta en la aplicación, Houseparty lanzaba un nuevo mensaje en el que anunciaba que estaban investigando si los rumores de hackeo de las cuentas de la app procedían de una campaña de difamación pagada para «hacer daño a Houseparty».
Para tratar de esclarecer si esto era así, la compañía ofrecía una recompensa de un millón de dólares «para el primer individuo que aporte pruebas de esta campaña».
We are investigating indications that the recent hacking rumors were spread by a paid commercial smear campaign to harm Houseparty. We are offering a $1,000,000 bounty for the first individual to provide proof of such a campaign to [email protected].
— Houseparty (@houseparty) March 31, 2020
El tiempo dirá si realmente el servicio de Houseparty se ha visto comprometido. Desde luego, estos problemas no afectan a la totalidad de sus usuarios, ya que siguen creciendo cada día. Es la historia de un éxito propiciado por el coronavirus.