Los creadores LGTBQ que están revolucionando la televisión
Mae Martin, Janet Mock, Greg Berlanti, Hannah Gadsby, RuPaul o Los Javis están ampliando las historias que los personajes LGTBQ cuentan en TV.
¿Cómo reapropiarse de la comedia romántica desde la perspectiva de una mujer lesbiana? Véase Feel Good, de Mae Martin. ¿Cómo mostrar la realidad de las personas trans racializadas? La guionista Janet Mock, mujer, negra y trans, ofrece la respuesta en Pose. ¿Pero es posible salir de los márgenes e introducir narrativas LGTBQ en un género tan mainstream como el de los superhéroes? Greg Berlanti y su Arrowverso demuestran que sí. ¿Y en España? Los Javis han hecho pleno con Veneno: una reflexión sobre la referencialidad y el poder de la representación en televisión a través del icono trans más irreverente de nuestra tele reciente. Las voces LGTBQ detrás de las series, concursos, documentales y hasta monólogos más influyentes de la pequeña pantalla.
Nunca ha habido más personajes LGTBQ en la televisión que hoy. Pero la representación no solo depende de la cantidad, sino de la diversidad de sus historias, donde los creadores tienen mucho que decir. Empezando por las cifras, según el informe anual elaborado por La Alianza de Gays y Lesbianas contra la difamación, según sus siglas en inglés GLAAD, un 10% de los personajes principales de la televisión en abierto estadounidense fueron contabilizados como LGTBQ, una cifra récord para la televisión generalista. Destacan, asimismo, la creciente presencia de personajes bisexuales, transgénero, no binarios y de color en todos los medios, televisión por cable y plataformas de streaming incluidas.
Si la tendencia va en alza, la principal demanda de espectadores y artistas es la inclusión de personajes LGTBQ contradictorios e imperfectos, con tramas tan variadas como sus vidas, dejando de lado, por fin, las historias de superación o las experiencias traumáticas relacionadas con su vida sexoafectiva. Atendiendo a estas historias, y con motivo de la celebración del Día Internacional del Orgullo LGTBQ, prestamos atención a una decena de creadores que desde sus parcelas de éxito están ampliando todos estos relatos posibles. Ya sea deconstruyendo la comedia romántica, en este caso con una pareja de lesbianas, como hace Mae Martin en Feel Good. Dando espacio a las personas y las historias trans en el caso de Janet Mock, guionista, directora y productora de Pose. Explorando las intersecciones de la identidad de género y la orientación sexual con la raza en el caso de Lena Waithe. O simplemente convirtiendo a los personajes LGTBI en algo tan aspiracional como los superhéroes. Gracias, Greg Berlanti. Todo esto sin olvidarnos de los glamurosos desfiles de RuPaul o nuestros Javis y su magistral Veneno: una reivindicación de las mujeres trans sin parangón en nuestra televisión.
Mae Martin y la nueva comedia romántica
Partiendo de una comedia romántica de libro, Feel Good (Netflix) consigue dinamitar la etiqueta de serie de lesbianas para narrar, simplemente, una complicada relación de pareja. Como tantas otras. Esta ficción autobiográfica, escrita, protagonizada y hecha a la medida de la actriz y comediante Mae Martin, cuenta la historia de amor de una monologuista canadiense, la propia Mae, y una maestra hasta entonces heterosexual, George. El chica conoce a chica, surge el amor e inmediatamente viven juntas se complica porque George oculta a su familia y amistades su relación lésbica y Mae evita contarle que participa en un grupo de narcóticos anónimos para no recaer en su adicción a las drogas.
En palabras de la revista Shanghay, Mae Martin se ha convertido en un nuevo y potente referente lésbico en televisión. Primero, porque la serie está fantásticamente escrita e interpretada. Pero también porque apuesta por visibilizar la realidad de una pareja de lesbianas con naturalidad. Lo que incluye el sexo y sus propias contradicciones. Normalizar sin edulcorar.
Janet Mock la creadora trans que fichó por Netflix
Cabe preguntarse si una serie como Pose (disponible en HBO España y Netflix) hubiera llegado a emitirse sin un productor del éxito de Ryan Murphy detrás. Pero fue Janet Mock, guionista, productora y directora de la serie, quien le dio vida. Ambientada en el Nueva York de finales de los años 80, esta ficción se acerca al voguing, una forma de expresión entre el desfile transgénero y las batallas de baile surgida en las comunidades afrodescendientes y latinas queer como respuesta a la exclusión. Y lo hace tomando la forma de un emotivo drama familiar donde un grupo de personajes rechazados por la sociedad se une para formar su propio hogar.
El éxito de esta serie, renovada ya por una tercera entrega por FX, llevó a Netflix a firmar un multimillonario acuerdo de exclusividad con Mock, la primera mujer trans y negra en obtener un acuerdo de esta índole con un gran estudio. “Hay potencial para presentar a cientos de millones de espectadores a las personas trans y mostrar a quienes no nos comprenden que podemos contar nuestras propias historias”, dijo la guionista cuando se hizo público el fichaje. De momento, ha ejercido como productora, directora o guionista en The Politician y Hollywood, ambos proyectos de Murphy para la plataforma.
Today, @JanetMock makes history as the first Black trans woman to establish an overall deal with a major studio.
«…there’s potential to introduce hundreds of millions of viewers to trans people, and showing people who may not understand us, that we can tell our own stories.» pic.twitter.com/nXhaW0STvo
— Strong Black Lead (@strongblacklead) June 19, 2019
De RuPaul a Shangela: el poder transformador del drag
El éxito internacional de RuPaul’s Drag Race, con una docena de temporadas y tres spin offs, disponibles muchos en Netflix, puso el drag en el mapa del mainstream. Lo que visibiliza al colectivo, además de ofrecerle una oportunidad para desarrollarse profesionalmente. Compartiendo no solo su espectacular creatividad, sino su autoconfianza, empatía, coraje o fraternidad.
Tres concursantes de este programa, Bob the Drag Queen, Eureka O’Hara y Shangela Laquifa, protagonizan en HBO We’re Here, un documental que desde el título deja bien claras sus intenciones de mostrar que estas reinas no solo existen, sino que no tienen intención de esconderse. Partiendo de esta premisa, las tres artistas recorren Estados Unidos pueblo a pueblo organizando un espectáculo drag de una sola noche con la población local. Y mientras preparan cada show, la purpurina, las pelucas y los trajes abren paso a íntimas conversaciones sobre la realidad de las personas queer, los prejuicios que deben afrontar en su entorno y el constante valor necesario para seguir adelante.
“Sí, el drag es brillo y glamour por fuera. Pero cómo afecta a las personas por dentro es donde ocurre la verdadera magia”, contó Shangela a The Hollywood Reporter sobre We’re Here. “Espero que los espectadores se den cuenta de la importancia que puede tener un acto de bondad o apoyo para alguien que se siente aislado. Nuestra serie aborda los retos únicos que las personas queer afrontan en comunidades pequeñas y conservadoras, y con suerte logrará que personas no-queer quieran ser mejores aliados”, añadió.
Greg Berlanti, el héroe LGTBQ
Cuesta trabajo mantener la cuenta de las series que Greg Berlanti ha desarrollado en las últimas dos décadas. Baste señalar que actualmente maneja 17, incluidos sus proyectos en desarrollo. Centrándonos en el tema que nos ocupa, comenzó a romper barreras en Dawson crece, primero introduciendo una pareja homosexual entre sus protagonistas para después emitir el primer beso gay de la televisión estadounidense en abierto. Pero quizá su mayor aportación haya sido construir un universo donde los superhéroes LGTBQ también existen.
Si nos fiamos de la wiki de la serie, 64 personajes del Arrowverso (en HBO España) son LGTBQ. A destacar: Batwoman, la primera superheroína lesbiana de la tele americana, encarnada por Ruby Rose; Nia Nal, la primera superheroína transgénero, a quien interpreta, en la misma serie, la activista trans Nicole Maines; Thunder, la primera superheroína negra y lesbiana, a quien da vida Nafessa Williams en Black Lightning; o la pareja gay formada por Citizen Cold (Wentworth Miller) y The Ray (Russell Tovey) en The Flash y Legends of Tomorrow. Además del bisexual Constantine de Matt Ryan o la villana de sexualidad fluida Fish Mooney, a quien da vida Jada Pinkett Smith.
En palabras de Berlanti, que también es homosexual, a la revista Entertainment Weekly: “Una de las cosas de las que estoy más orgulloso es de ayudar a asegurar que los héroes se vean y se sientan como las personas a las que están salvando. Esa es parte de la responsabilidad de cualquiera que vaya a llevar estos icónicos personajes de una generación a otra, expandir los elementos sobre ellos de forma que reflejen a la generación de personas que los están contando hoy”.
Comedia desde la ira: Hannah Gadsby y Nanette
La comediante australiana Hannah Gadsby es la creadora de Nanette, un furibundo monólogo que gracias al boca oreja se convirtió en 2018 en uno de los fenómenos de Netflix. Detrás de su ira se encuentran el maltrato y los abusos que mujeres y personas LGTBQ como ella han sufrido. Pero también la frustración, las dificultades y el rechazo que padece cualquier persona diferente que pueda identificarse como el otro. Especialmente en pueblos pequeños e intolerantes donde una mujer de su aspecto, como ella misma señala, llama la atención.
Porque en su Tasmania natal hasta 1997 ser homosexual era un delito penado por la ley. De modo que Gadsby, nacida en 1978, creció siendo homófoba. Y construyó su carrera como cómica riéndose de sí misma, despreciándose y humillándose, a ella y a las personas que se identifican con ella, sobre el escenario. Pero con Nanette esto se acabó.
El pasado 26 de mayo Gadsby regresó con un nuevo monólogo donde utiliza, revisa y comenta su experiencia en Nanette. Es posible que el material de Douglas no sea tan revelador o emotivo como el de su salto al estrellato. Ella misma bromea con la idea de que podía haber reservado algún trauma para futuros monólogos de haber sabido el éxito que tendrían. Pero mientras saca punta al patriarcado, sigue siendo capaz de ofrecer una hora de comedia magistral.
Lena Waithe: la vida de una mujer negra, lesbiana y masculina
Lena Waithe es una de las pocas actrices y guionistas que uno podría nombrar si le preguntan por mujeres negras y lesbianas como ella misma reconoció en una entrevista reciente en The Hollywood Reporter. De hecho, Waithe se convirtió en la primera guionista negra en ganar el Emmy a mejor guion de una comedia por el capítulo Acción de gracias de la serie de Netflix Master of None (2015-2017), basado precisamente en su experiencia personal saliendo del armario frente a su familia.
Después llegarían The Chi (2018-), Boomerang (2019-) y Twenties (2020-), todas series creadas por Waithe donde se aborda la realidad de mujeres lesbianas, particularmente lesbianas y masculinas en palabras de la guionista. “Quería dejar claro que las mujeres negras que se presentan de forma masculina también pueden ser tiernas y vulnerables, que no todas somos agresivas”, señaló sobre los estereotipos heteronormativos en los que muchas veces caen estas representaciones. Como asignar a una pareja de lesbianas el rol masculino y el rol femenino. “Cuando ves a dos mujeres que se presentan de forma masculina la gente dice, bueno, ¿quién es la mujer? No lo entiendo”, aseguró la creadora.
Los Javis y Veneno: la primera serie española protagonizada por un elenco trans
El meteórico ascenso a la fama de Javier Calvo y Javier Ambrossi, desde el off del Teatro Lara con La Llamada, a su posterior adaptación en el cine, pasando por la genial Paquita Salas, ha permitido a la pareja hacer historia de la televisión en España con Veneno.
Basada en la vida y la muerte de Cristina Ortiz, esta serie de Atresmedia está protagonizada por tres actrices trans que se meten en la piel de La Veneno en las distintas etapas de su vida: Isabel Torres, Daniela Santiago y Jedet. Adorada por su carisma y su forma de expresarse libre y deslenguada, La Veneno alcanzó la fama en nuestro país gracias a sus apariciones televisivas en los 90, empezando por el late night de Pepe Navarro Esta noche cruzamos el Mississippi. Convertida inmediatamente en un icono televisivo, Cristina Ortiz visibilizó la realidad de las mujeres trans y habló sin tapujos del maltrato, la prostitución o el machismo.
En palabras de Los Javis: “La Veneno es una mujer que tuvo una historia muy difícil, pero ella nunca se comportó como una víctima. Siempre fue una luchadora. Llenaba su pasado de fantasía y su presente de lucha. Ella salía en televisión cuando no había ninguna mujer trans. Su presencia era una reivindicación en sí misma. Ponía cara a una realidad que la gente no quería ver. Abrió camino para las generaciones que vinieron después”.
Superando las barreras del biopic clásico y navegando, como Los Javis acostumbran, entre la metaficción y la multirreferencialidad, la narración se articula a partir del personaje de Valeria Vegas, la joven periodista y admiradora de La Veneno que tras convertirse en su amiga escribió su biografía, ¡Digo! Ni puta ni santa. Lola Rodríguez interpreta a Vegas, quien también ha ejercido como asesora de guion.
Tras estrenarse el pasado 29 de marzo, el próximo 28 de junio estará disponible el segundo capítulo de Veneno en la plataforma de pago Atresplayer Premium. Para el resto de la serie habrá que esperar hasta que el rodaje, suspendido por el coronavirus, se reanude.