La tasa que quiere aplicar Reino Unido a las tecnológicas que tributan en paraísos fiscales
Las últimas semanas han venido cargadas de polémica. Si hace un año las revelaciones de los Papeles de Panamá alertaron del dinero que estaba volando de las arcas de países como el nuestro para esquivar la fiscalidad local y trasladarse a paraísos fiscales, este año la bomba que ha detonado se llama Paradise Papers. Un ejemplo más de cómo miembros de las élites económicas mundiales mueven su dinero hacia lugares de fiscalidad nula o minúscula para no pagar los impuestos que les corresponde.
Las últimas semanas han venido cargadas de polémica. Si hace un año las revelaciones de los Papeles de Panamá alertaron del dinero que estaba volando de las arcas de países como el nuestro para esquivar la fiscalidad local y trasladarse a paraísos fiscales, este año la bomba ha estallado con los Paradise Papers. Un ejemplo más de cómo miembros de las élites económicas mundiales mueven su dinero hacia lugares de fiscalidad nula o minúscula para no pagar los impuestos que les corresponde.
Por este motivo, algunos países están trabajando para castigar a las empresas que se ha demostrado que protagonizan estos entramados. Así, el parlamentario británico Philip Hammond ha desvelado que están desarrollando un plan para cobrar una nueva tasa a las compañías que eluden impuestos en su país. En este caso, la tasa va dirigida hacia las tecnológicas, con gigantes como Apple, Amazon o Google como objetivo.
Las compañías tecnológicas, que últimamente están en el ojo del huracán, tendrían que enfrentarse a nuevos impuestos por el dinero que generan y que luego declaran, principalmente, en países como Irlanda. El nuevo impuesto entraría en vigor en abril de 2019 y reportaría, de acuerdo con sus cálculos, cerca de 200 millones de libras esterlinas anuales –225 millones de euros–.
La medida, aunque llamativa, apenas recaudaría una pequeña cantidad de la que ahora se les escapa, según algunos expertos. Por ejemplo, el economista Gabriel Zucman escribió en The Guardian que Reino Unido pierde el equivalente a 15.000 millones de dólares anuales simplemente por con lo que evaden las sociedades. Asimismo, la cantidad que estaría perdiendo la Unión Europea sería equivalente a una quinta parte del total de lo que recauda en impuestos corporativos.
En Reino Unido, en el año 2015, Apple pagó 12,9 millones de libras –14,5 millones de euros– en impuestos. En España, pagó 6,5 millones de euros. Hammond no niega, en cualquier caso, esta realidad y asume que la nueva medida “no resuelve el problema”. Con todo, sostiene que es una “señal” de su “determinación” para acabar con una situación que afecta notablemente a la riqueza del país.
La iniciativa no termina de convencer, por su laxitud, a los defensores de la equidad tributaria, tal y como ilustra la revista Quartz. «Se trata de una gota en el océano y no creo que a los gigantes tecnológicos les afecte mucho», declara al medio Alex Cobham, director ejecutivo Tax Justice Network. «La cantidad potencialmente recaudable es tan pequeña en comparación a las ganancias de las compañías tecnológicas que no creo que nadie vaya a ver esto como una solución«.
De este modo, Cobham sugiere que si Hammond tuviera un interés genuino en combatir la evasión fiscal, se esforzaría –a través del Tesoro– en obligar a las grandes compañías a publicar los ingresos que tienen anualmente en cada país. Actualmente, matiza, es opcional.