«Trump tiene un 70-80% de probabilidades de ganar las elecciones»
El analista financiero Juan Ignacio Crespo predijo en 2016 la victoria de Donald Trump a pesar de lo que decían las encuestas. Ahora vaticina una reelección
«Todo apunta, excepto las encuestas, a que Trump va a ganar». El analista financiero Juan Ignacio Crespo ignora las múltiples encuestas que pronostican una victoria del candidato demócrata a las elecciones estadounidenses del próximo 3 de noviembre, Joe Biden, y considera que «la cosa está ahora mismo en un 70-80% a favor de Trump». Es la conclusión que explicó durante el seminario web El impacto de las elecciones de EEUU en la economía y mercados, organizado por la proveedora de datos de mercados financieros Refinitiv.
A Crespo, miembro del Cuerpo Superior de Estadísticos del Estado, no le faltan motivos para desconfiar de los sondeos, que pronostican la derrota del presidente. También hace cuatro años lo hacían… y se equivocaron. «Nunca considero las encuestas, sino un método que me funcionó en las pasadas elecciones. Entonces yo comentaba que Hillary Clinton solo tenía una probabilidad del 16% de ganar» por «las regularidades históricas de las elecciones americanas».
En Estados Unidos, son excepcionales los casos en los que un presidente se ha presentado a una reelección sin ganarla. «Desde 1896, si quitamos los años de Trump, nos quedan 120 años». En ese periodo, «durante 104 años siempre ha gobernado un presidente elegido y reelegido», recuerda Crespo. Sin embargo, estas elecciones son propicias a que se dé la excepción. ¿Por qué? El propio Crespo lo explica: «Los cuatro años de Trump, rematados por una pandemia[contexto id=»460724″] que era algo completamente inesperado, ponen en cuestión conclusiones que pudiéramos sacar con ese método. En enero ya publiqué artículos diciendo: «Salvo desgracia, Trump va a ganar las elecciones». Bueno, pues vino una desgracia».
De modo que, para llegar a la conclusión de que las probabilidades juegan a favor de Trump, Crespo ha acudido a otros indicadores: el paro, la productividad y la confianza de los consumidores. «Si fuera por el paro, Trump lo tendría muy difícil: lo tiene al 7,9%. Pero eso no le impidió, por ejemplo, a Obama revalidar con 7,8% de paro o a Reagan con 7,4%. Es decir, no sería un factor decisivo. El de la productividad sí lo parece. Normalmente, cuando un partido, después de ocho años de gobernar, pierde las elecciones con el candidato que sea, esa pérdida coincide con un bajón de la productividad. Sin embargo, en el periodo de Trump ha habido una subida de productividad que no ha sido espectacular, pero que ha sido una subida al fin y al cabo. Y el otro elemento, el de la confianza de los consumidores, normalmente se hunde con las recesiones. En el caso de la crisis financiera, se hundió hasta el 20-25 y ahora Trump la tiene en 102 [horas después de dar esta cifra se conoció el dato actualizado de octubre, que sufrió un ligero descenso hasta los 100,9 puntos]. Con esa confianza, nadie ha perdido las elecciones».
Diferencias de programa
En cuanto a los puntos económicos de los programas electorales de Donald Trump y Joe Biden, Crespo no ve «grandes diferencias» porque, aunque la protección social «suele ser más fuerte con presidentes demócratas, en este caso no se puede hablar de poca protección social cuando el incremento del gasto público en Estados Unidos ha sido de 2,5 billones de dólares con una administración republicana». Y añade: «No sé si Biden puede hacer una política social, si la entendemos como gasto público, que pueda superar a la de Trump».
Donde sí observa diferencias Crespo, que —entre otros cargos— ha formado parte del consejo de administración de la Corporación Caja Madrid, es «en el tema de protección del medioambiente: ahí sí claramente con Biden se supone que Estados Unidos volvería al Acuerdo de París y se supone que el fomentar las energías verdes sería una prioridad para él». Con todo, opina que, de ganar las elecciones, Biden «va a tener muchos problemas para ejecutar ese programa, por la sencilla razón de que el gasto público se ha descontrolado y que en muchos sitios las energías renovables siguen siendo muy caras».
«Donde sí puede hacer algo Biden —añade Crespo— es en revertir la bajada de impuestos que hizo Trump, que sí se notó sobre todo en 2018 con repatriaciones de beneficios acumulados por parte de las empresas americanas, sobre todo las grandes tecnológicas en el exterior para no pagar impuestos fuertes al repatriarlo, pero también veo muy dudoso que pueda ejecutar eso con la presión de los lobbies». Y un punto en el que Crespo ve que sí hay margen para el gasto público es la sanidad. «Como eso formó parte de la ejecutoria en la que él era vicepresidente, supongo que para él sería un orgullo recuperar de nuevo esa protección de la ley que se aprobó en tiempos de Obama».
¿Doble recesión?
Crespo considera «muy elevada» la probabilidad de una doble recesión. De nuevo, tira de hemeroteca para justificar su conclusión. «Hay como una regularidad histórica también de los 102 últimos años. En esos 102 años ha habido tres pandemias, la cuarta es la que vivimos ahora». El analista financiero explica que tanto la gripe de 1918 —la llamada gripe española—, como la gripe asiática de 1957 y la llamada gripe de Hong Kong de 1969 coincidieron en Estados Unidos con una recesión y que, poco después de superada la primera, llegó una segunda. «Parece como si las recesiones que coinciden con pandemias fueran de dos en dos», alerta.
Con todo, se muestra optimista para el futuro. «Tanto si hubiera esa segunda recesión como si no, en Estados Unidos lo que veo para después de ese momento son 10-15 años de crecimiento sostenido». Ese crecimiento, considera, estará basado en el aumento de la productividad. «Se está disparando ya la productividad por hora en Estados Unidos por el efecto del aumento del desempleo, que ha sido superior a la caída del PIB, pero hay un fenómeno en esta pandemia, que es que todo lo que se pueda convertir en digital se va a convertir en digital, y eso va a hacer que la productividad de las empresas se dispare», vaticina. «Yo creo que va a sustentar ese periodo de crecimiento posterior a esas dificultades tanto si hay una nueva recesión como si no y tanto si gana Biden como si gana Trump».
En cualquier caso, ¿qué candidato sería más conveniente para España que ocupara el despacho oval? «Una victoria de Biden haría más fáciles las relaciones diplomáticas con todos sus aliados, entre ellos España, y, por lo tanto, el tratamiento en cuanto a aranceles para empresas españolas que exportan a Estados Unidos sería más razonable o más fácil de negociar que con estos sobresaltos que nos pega Trump», concluye Crespo.