Perdiguero: "Los Mossos no atendieron las recomendaciones de la Policía ni de la CIA, quizá entiendan que son autosuficientes"
Alfredo Perdiguero, Subinspector de Policía Nacional: «Los Mossos no atendieron las recomendaciones de la Policía ni de la CIA, quizá entiendan que son autosuficientes»
El pasado diciembre de 2016, la Comisaría General de Seguridad Ciudadana del Cuerpo Nacional de Policía envió un comunicado a todas las comunidades autónomas para ordenar a los ayuntamientos que tomasen medidas concretas para prevenir un posible atentado yihadista. Entre esas medidas, bloquear las zonas con gran afluencia de gente con bolardos, maceteros o balizas para evitar la entrada de camiones o furgonetas. Estas directrices no gustaron en Cataluña. El portavoz del cuerpo catalán, Xavier Porcuna, subrayaba en ese momento: «Se bloquearán de esta forma cuando se considere que esta es la mejor manera de protegerlos».
Hace dos meses la CIA advertía a los Mossos de un posible ataque en La Rambla de Barcelona. En este punto, muchas son las voces que se preguntan si las autoridades catalanas tenían un plan de prevención ante estas advertencias. Alfredo Perdiguero, Subinspector de Policía Nacional, nos responde a esta pregunta. «Habrá que pedir explicaciones a los responsables de los Mossos y la Generalitat para saber por qué motivo no se acometió las recomendaciones de la Policía y las de la CIA», apunta, y agrega: «Quizá entiendan que son autosuficientes».
Por su parte, Salvador Burguet, CEO de la empresa española AICS, Asesoría de Inteligencia y Consultoría de Seguridad, señala que «hablar de fallos es exagerado». Sin embargo, hace hincapié e insiste en que si bien España tiene mucha experiencia en lucha antiterrorista quizá haya detalles que potencialmente no se estén enfocando de forma adecuada. «Estamos ante una situación, un modus operandi y una gente diferente. Quizá las medidas que se están tomando a este tipo de amenazas no están perfectamente ajustadas».
¿Por qué Barcelona?
Es la ciudad más turística y más conocida de España. Un atentado en la capital catalana tendrá siempre más repercusión que en otros lugares de la Península, sobre todo si se produce allí donde hay gran concentración de turistas extranjeros, como en las Ramblas o en la Sagrada Familia. Para Burguet, además, en Barcelona se dan circunstancias que no se dan en el resto de España. «Hay una gran comunidad musulmana, con más elementos radicales que en otros sitios«, algo más de medio millón, es decir, el 7% de la población. Además, para el CEO de AISC, su situación geográfica, próxima a Francia, «les viene mejor para cometer estos atentados».
«Quizá las medidas que se están tomando no están perfectamente ajustadas»
– Salvador Burguet, AICS
Hasta el atentado de Barcelona, las fuerzas de seguridad sumaban este año hasta 32 intervenciones en suelo nacional, según datos ofrecidos por el Observatorio Internacional de Estudios sobre Terrorismo. Estas actuaciones se han traducido en 51 detenidos en lo que va de ejercicio —y otros tres arrestados en el extranjero—, por los 69 de todo el pasado año. En concreto, en Barcelona, según datos actualizados el 7 de agosto de 2017, se detuvieron a 7 personas en 11 operaciones policiales que tuvieron lugar en Badalona (3), Roda de Ter (2), Terrassa (1), Vallbona d’Anoia (1), Barcelona (2) y en Cornellà de Llobregat (1).
Ante esta situación, Alfredo Perdiguero hace un llamamiento a los ciudadanos y apunta que «ahora más que nunca es necesario la colaboración ciudadana para denunciar cualquier cosa anómala». «Mejor descartar que luego llorar», insiste.
Invertir en seguridad
«Con austeridad no hay seguridad», así de contundente se ha mostrado Ramón Cossío, portavoz del Sindicato Unificado de la Policía (SUP), quien asegura a este periódico que
«invertir en seguridad es salvar vidas».
Además, Cossío asegura que la Policía Nacional tiene un déficit de unos 11.000 agentes, ahora el cuerpo cuenta con 65.000 policías, apunta el portavoz, quien añade que «el número de agentes que entran cada año con respecto a los que se van debería mantenerse independientemente de la situación económica». «La delincuencia tradicional ha cambiado», explica, asegurando que de esos 65.000 agentes la mitad no disponen de chaleco antibalas.
En cuánto a si se debería activar el nivel 5 de alerta antiterrorista, aunque apunta que no es él quien deba pronunciarse al respecto para no crear alarma, asegura que «nadie debería rasgarse las vestiduras y si tenemos que contar con el ejército para que patrullen las calles, como en Francia, se debería hacer por la seguridad de los españoles». El 26 de junio de 2015, tras los atentados de Francia, Túnez, Kuwait y Somalia, el Ministerio de Interior activó el nivel 4.
Por último, Ramón Cossío concluye: «Desde las diferentes administraciones tampoco lo estamos haciendo tan bien, tenemos que ponernos las pilas«.