El sur de Europa, más preocupado por la emigración que por la inmigración
Aunque la llegada de inmigrantes preocupa en cierta medida a los ciudadanos de países como España, Italia y Grecia, lo cierto es que hay más gente preocupada por las personas que abandonan el país
El auge de la ultraderecha en países europeos, especialmente en lugares como Italia y España, ha puesto de nuevo sobre la mesa el debate sobre la inmigración y lo que esta preocupa a los ciudadanos europeos.
El discurso de partidos como Vox, con medidas antiinmigración en su programa, como la expulsión de todos los inmigrantes irregulares, ha provocado en la población la sensación de que realmente es un problema para a los ciudadanos.
Sin embargo, aunque es cierto que la llegada de inmigrantes preocupa en cierta medida a los ciudadanos de países como España, Italia y Grecia, por ser estos países los principales puntos de entrada de inmigrantes a Europa, también es verdad que en el sur de Europa las personas que abandonan el país generan una mayor inquietud que las que entran.
Esta percepción contrasta con las sociedades del norte de Europa, donde la inmigración es una cuestión más preocupante que la emigración, según una encuesta realizada por el Consejo Europeo de Relaciones Exteriores a 50.000 personas en 14 países, que sumarán en torno al 80% de los escaños en el nuevo Parlamento Europeo que salga de las urnas en mayo.
¿Dónde preocupa la emigración?
El resultado total de los 50.000 encuestados muestra que un 20% está preocupado por la emigración y un 32% por la inmigración. Sin embargo, en seis de los países encuestados, esta situación se revierte.
En Rumanía, Hungría, España, Italia, Polonia y Grecia la preocupación por las personas que abandonan el país para buscar mejores oportunidades es bastante elevada y se sitúa por encima de la que generan los inmigrantes que llegan cada año.
Además, más de un 50% de los ciudadanos de España, Grecia e Italia está a favor de crear medidas que ayuden a controlar la emigración. En Polonia, Hungría y Rumanía, aunque un poco por debajo, también hay un alto porcentaje de personas que está de acuerdo con que estas medidas son necesarias.
Estos datos contrastan con las ideas de líderes como el presidente Viktor Orbán, en Hungría, y el vicepresidente del Gobierno y ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, que tratan de poner la inmigración en el centro de atención de las elecciones europeas, a pesar de que este no es, ni de lejos, el asunto que más inquietud genera a los europeos.
El Gobierno de Orbán, por ejemplo, ha difundido con motivo de estas elecciones un póster en el que advierte de las políticas migratorias de la Unión Europea, con el fin de lograr apoyo para sus políticas antiinmigración.
La percepción en España
En 2018 llegaron a España 64.421 inmigrantes, una cifra que no parece que vaya a reducirse en 2019, según un informe de la Agencia de Refugiados de la ONU (Acnur), que apunta a que España seguirá siendo el principal punto de entrada de inmigrantes a Europa en el año 2019.
A pesar de estos datos, solo al 19% de los españoles le preocupa la inmigración, según esta encuesta. Los datos del barómetro del CIS de febrero de 2019 muestran que solo un 8,8% de los españoles sitúa esta cuestión como uno de sus principales problemas, y solo un 1,6% la pone en primera posición.
En total, un 38% de los encuestados afirma que es más relevante la gente que tiene que emigrar, un 19% considera que lo son los inmigrantes y otro 38% dice que ambos.
Sobre el control de la inmigración, un 56% de los encuestados no cree que el Gobierno deba impedir la inmigración, ya sea legal o ilegal, y un 28% opina que sí debe hacerlo.
Además, un 63% considera que el Gobierno debería tomar medidas para evitar que los españoles se vean obligados a emigrar durante largos periodos de tiempo. Esta cifra sitúa a España a la cabeza de los países que están a favor de estas medidas, seguida de Grecia e Italia.
Las preocupaciones reales de los europeos
A pesar de que la inmigración está en el centro de los discursos políticos de muchos partidos de la derecha y la ultraderecha, son otras cuestiones las que ocupan la mente de los ciudadanos cuando hablamos de los problemas que los políticos deben tratar de solucionar.
El extremismo islámico es uno de ellos. Según muestra la encuesta, una de cada cinco personas ha afirmado sentirse preocupada por esto. El miedo se acentúa en países como Bélgica, Francia – donde ha habido varios atentados en los últimos años – y los Países Bajos, y es menor en el este de Europa.
El cambio climático es también una de las grandes preocupaciones de los europeos. En casi todos los países encuestados, una mayoría de los ciudadanos considera que el medio ambiente debería ser una prioridad, aunque esto suponga un daño para el crecimiento económico.
Aunque hay asuntos que todos los europeos consideran casi por igual, hay problemas que solo son una prioridad para los ciudadanos de algunos países.
La economía, por ejemplo, es lo que más preocupa en Italia, Rumanía y Grecia. Además, en siete países, incluido España, más de la mitad de las personas considera que la corrupción es un problema importante.
Esto demuestra que la inmigración no es tan preocupante para los europeos como los partidos ultraderechistas nos quieren hacer pensar y que, a pesar de que es una cuestión importante, no lo es tanto como para acaparar toda la atención en el discurso político ni en la campaña electoral de los partidos que formarán el Parlamento Europeo.