Melania Freire, ganadora del Mercedes-Benz Fashion Talent: “La moda te permite profundizar mucho en las cosas”

La diseñadora gallega Melania Freire ha conquistado la pasarela de jóvenes talentos de la Mercedes-Benz Fashion Week de Madrid con una colección inspirada en una retrospectiva de David Hockney, con “un discurso propio y un estilismo fresco y contemporáneo”, según las palabras del jurado.

Con solo 27 años, esta diseñadora de Lugo podrá, gracias a este galardón, dar a conocer su colección en una de las pasarelas de la Fashion Week de Praga, lo que considera una oportunidad para “vivir nuevas experiencias, que al final yo creo que es la clave del éxito”, cuenta a The Objective, todavía nerviosa tras la entrega del premio.

“Como es tan importante, digamos que tiene un deje todo un poco surrealista”, dice, sin terminar de creerse mucho que el jurado de este concurso de jóvenes talentos la haya elegido a ella.

Con los pies en la tierra, Melania Freire sabe que, a pesar de haber dado un paso muy grande al desfilar en una de las pasarelas más importantes del país, “el éxito se consigue poco a poco”.

Por eso, al preguntarle por su futuro, afirma que lo más importante es verse “en un punto en el que yo me sienta realizada y siga teniendo las mismas ganas de seguir haciendo cosas”. “Sí, puede que trabajar para algún diseñador de los que tengo de referencia, o puede que con mi propia marca, no sé, pero en un punto en el que yo me sienta que estoy aprendiendo y estimulada”.

Antes de estudiar Diseño Textil y Moda, estudió Bellas Artes. En su currículum hay exposiciones artísticas individuales y colectivas, trabajos en el mundo audiovisual como directora de arte, y, por supuesto, en el mundo de la moda.

El hecho de haber trabajado también en proyectos artísticos ha influenciado las colecciones de Melania Freire. “En mis anteriores colecciones siempre hay ilustración en las prendas”, afirma al explicar la evolución que han vivido sus creaciones hasta llegar a la colección que la ha llevado a ganar este concurso.

“No es por haber estudiado Bellas Artes, pero sí que es verdad que ese bagaje me sirvió para proyectar mis intereses de otra manera en las prendas”, explica.

Sobre la colección que presentó al concurso, que fue su proyecto de fin de estudios, asegura que sus creaciones han evolucionado desde entonces. “Desde que la presenté hace un año en mi escuela he ido creciendo a todos los niveles hasta este momento”, afirma. “Supongo que eso irá en constante evolución siempre”.

Para llevar a cabo todo el trabajo que la ha traído hasta aquí, Melania Freire asegura que ha contado con todo el apoyo de su familia. “Es una cuestión supongo que excepcional, y la verdad es que lo agradezco”, dice, consciente de que dedicarse a la moda es algo que a muchas familias les cuesta aceptar.

“A ellos les costó entender por qué cogía el coche y recorría media Galicia para hacer una exposición normalita, o por qué me quedo cosiendo hasta las 08:00 de la mañana para conseguir una prenda y estoy cansada, pero entienden que yo me guío por el instinto y sé que eso me va llevar a algo”, dice, agradecida.

Por eso precisamente sabe que, aunque a veces no vea claro lo que está haciendo, en algún momento tendrá sentido. “Al final te esfuerzas, no sabes muy bien por qué, y al cabo de dos años resulta que eso que hiciste tiene un sentido y te acaba de abrir una nueva puerta, pero en el momento era simplemente una pérdida de tiempo o de dinero”.

“Hay que confiar siempre en que si lo haces lo mejor que puedes o que sabes y te equivocas, no pasa nada, porque lo hiciste lo mejor que sabías en ese momento, y seguir, seguir constantemente”, anima.

Y también es constante el aprendizaje, asegura Freire, que considera que lo mejor que le aporta la moda es “el hecho mismo de aprender y de descubrir cosas”. “Creo que la moda, como todo proceso creativo, te permite profundizar mucho más en las cosas, porque lo investigas a través del tejido y eso es una pasada”.