¿Por qué inundan las medusas las playas españolas?
Miles de medusas han inundado varias playas del sur de España en las últimas semanas. Solo en el litoral de la Costa del Sol entre las playas de Vélez-Málaga y de Nerja, unos 8.000 kilos de medusas tuvieron que ser retirados en un fin de semana.
Miles de medusas han inundado varias playas del sur de España en las últimas semanas. Solo en el litoral de la Costa del Sol entre las playas de Vélez-Málaga y de Nerja, unos 8.000 kilos de medusas tuvieron que ser retirados en un fin de semana.
En las costas andaluzas y alicantinas, los bañistas no pudieron disfrutar de un baño en el mar debido a la aparición de estos molestos visitantes durante varios días, y la aparición de carabelas portuguesas desató las alarmas en las playas de Alicante.
Aunque haya generado tanto revuelo, este no ha sido un caso aislado, sino que ha ocurrido en otras ocasiones y volverá a ocurrir, puesto que forma parte de los ciclos naturales de las medusas, según explica a The Objective Juan Jesús Bellido López, biólogo en el Aula del Mar de Málaga.
“Desde un punto de vista científico lo embarcamos dentro de la normalidad”, explica Bellido, haciendo referencia a las recientes plagas de medusas. “Cuando llegan a la playa generan bastante alarma y muchas veces un descontento asociado porque impiden el baño, pero yo pienso que tanto los que trabajamos en el Mar de Alborán como los científicos que trabajan en las playas del levante español somos muy conscientes de que este tipo de incidencias son episodios puntuales que pueden pasar varias veces en un verano, pero que no suelen durar más de un par de días o tres”, afirma.
¿Por qué se generan plagas de medusas?
La mayoría de los factores que generan la aparición repentina de un gran número de medusas son naturales. Principalmente son el aumento del plancton o un cambio en las condiciones oceanográficas favorable para las medusas los que producen la aparición de estas plagas, explica Bellido.
Sin embargo, reconoce que existen algunos factores humanos que influyen en la proliferación de medusas en diferentes zonas de la costa.
“La sobrepesca, que por un lado elimina especies que son depredadoras de medusas y también elimina competidores por el mismo alimento”, es una de las principales causas humanas.
A esto se suma “la desaparición de otros grandes depredadores, como son las tortugas marinas y otras especies que, aunque no sean grandes devoradoras de medusas, sí lo son de forma ocasional”, señala Bellido.
Según varios estudios publicados sobre este asunto, el ciclo de las medusas es de unos 10 o 12 años. Sin embargo, los investigadores están intetando averiguar si estos ciclos se están acortando, si en los últimos años han sido más frecuentes las plagas de medusas.
“Ahora hay una percepción social de que cada vez hay más medusas”, explica Bellido, que afirma que “todavía nos queda mucho que aprender de estos animales a la hora de entender realmente estos ciclos y, sobre todo, de ser capaces de preverlos”.
¿Son peligrosas las carabelas portuguesas?
Cuando aparece una plaga de medusas, automáticamente llega la preocupación por las posibles picaduras a los bañistas, especialmente cuando las especies que invaden nuestras playas no son habituales en la zona.
En el caso de Málaga, por ejemplo, la especie más habitual es la pelagia noctiluca. Sin embargo, este año han aparecido algunas medusas de la especie carabela portuguesa, y lo mismo ha ocurrido en las playas alicantinas.
A pesar de la gran alerta generada por la aparición de esta especie, Bellido asegura que una picadura de una carabela portuguesa “no tiene por qué revestir mayor gravedad que la picadura de una medusa habitual de aquí”.
“Lo que cuenta la gente suele ser una mayor intensidad del dolor, más duración del dolor o las marcas que deja”, explica el biólogo, aunque afirma que las picaduras de las carabelas portuguesas no suponen un grave riesgo para la salud.
Qué hacer si te pica una medusa
Estamos cansados de escuchar consejos y trucos caseros sobre qué hacer si nos pica una medusa. Todo el mundo parece tener la solución para acabar con el dolor de tan incómoda picadura, pero la realidad es que los sencillos consejos de los expertos son los que de verdad ayudarán a evitar una reacción adversa a la picadura.
Lo primero que hay que intentar, si hay medusas, es evitarlas bañándose en zonas donde el agua esté más clara o cuando no haya un gran oleaje.
Si aún así no logramos evitar la picadura, lo primero que hay que hacer es lavarla con agua salada, explica Bellido, nunca con agua dulce. Después, hay que retirar los restos de tentáculos que queden en la piel con la ayuda de un elemento plástico, como una tarjeta, mejor que con unas pinzas, señala.
Por último, si el dolor no desaparece, es bueno aplicar frío pero, dado que el agua dulce no es buena, se debe hacer con hielo envuelto de alguna manera que evite el contacto directo con la piel.
En todo caso, siempre queda la opción de acercarse al puesto de socorro y pedir ayuda “a los profesionales de allí que tienen información y nos darán los mejores consejos”.