Tres maneras de acercarse al vino: un club, una escapada a Portugal y una jornada festiva
Celebrar la época de vendimia en la ciudad, en un espacio a la orilla del Duero o pertenecer a una asociación premium
Las vendimias de Laviana en la calle Ortega y Gasset de Madrid.
Son muchas las maneras existentes para acercarse al vino e incluso engancharse. El imparable crecimiento del enoturismo está ahí para corroborarlo y dado ese auge son bien diversas las propuestas que parten de elaboradores y bodegas con el fin de fidelizar a ese consumidor receptivo. De hecho, una vez finalizada la temporada de vendimias, comienza el tiempo de los planes de fin de semana en torno al vino con múltiples actividades para disfrutarlo. Y es en este exitoso marco que no paran de surgir iniciativas novedosas con la vista puesta en intentar ofrecer cosas diferentes, especiales y sin duda muy atractivas para el neófito y aficionado.
Residence Wines
Entre los proyectos más recientes, en su caso en tierras riojanas, ha comenzado a rodar el club privado Residence Wines con una completa propuesta en torno al vino y todo lo que puede tener relación con él. Es la idea de tres socios, César León, Laura Ogando y Ernesto Funes, vinculados con la Rioja Alavesa por distintas razones, e iniciativa que parte de una pequeña bodega de producción limitada (unas 14.000 botellas), pues los vinos que elaboran –de viñas viejas– están sólo al alcance de los miembros del club, al igual que el resto de servicios.
Disponen también de viña y de una ‘residencia creativa’ que inspira el nombre del proyecto y que acogerá cada seis meses a artistas además, anualmente, elaborar un vino en colaboración con una bodega foránea. En este momento el ‘vino colaborativo‘ lo han hecho con las argentinas Bodegas Ribera del Cuarzo (Patagonia) y se llama DHETLA, un acrónimo de la expresión ‘de hoy en todos los años’… algo complicado pero que responde a un propósito.
Su objetivo, un tope de 500 socios quienes, en función del tipo de membresía que elijan, tendrán acceso a unos servicios concretos. La cuota mínima, 1.500 euros al año, pero puede llegar hasta los 5.000 euros (categoría business). En el ‘pack’ posibilidades creativas y experiencias culturales de diversa índole: arte, cultura, viajes, estancias, publicaciones, encuentros, talleres, gastronomía y por supuesto vinos, todo sin intermediarios; una relación directa entre los fundadores y los clientes, es decir, experiencias compartidas.
Además, se podrá acceder a una red de Residencias Creativas en bodegas que organiza viajes donde el vino y lo gastro son el reclamo principal. En definitiva, un club de culto al vino cuidado en el contenido y el continente, una sede moderna, amplia y luminosa, proyectada sobre lo que fuera la casa de los abuelos de uno de los socios (César León), entre viñas y con vistas a la Sierra Cantabria.
Las vendimias de Laviana
A un nivel más accesible y para todos los públicos se cuentan las decenas de salones de vinos, con distintas temáticas, que se celebran a lo largo del año en el país. Pero entre ese reiterado concepto que se centra en reunir bodegas, Las vendimias de Lavinia tiene su valor diferencial.
Coincidiendo con eso, las vendimias, esta potente tienda de vinos asentada en Madrid (C/ Ortega y Gasset, 16), reunirá el próximo 14 de octubre, en la misma calle en la que se ubica (y que cortarán al tráfico, entre las calles Serrano y Velázquez), a más de 40 bodegas de Castilla y León, de la mano de Tierra de Sabor –marca de calidad de los alimentos de la región–, en una gran fiesta del vino.
Será la sexta edición de Las vendimias de Ortega y Gasset y se celebrará en horario ininterrumpido desde el mediodía hasta las ocho de la tarde. Una jornada para descubrir y probar vinos procedentes de las distintas denominaciones de origen con que cuenta esta comunidad autónoma además de otras tantas referencias que salen bajo la indicación geográfica Vino de la Tierra de Castilla y León.
El acceso a la celebración requiere adquirir una entrada (30 euros por persona), previamente en las tiendas físicas de Lavinia, a través de su tienda online o el mismo día en las taquillas del evento. Con dicha entrada cada participante se llevará una copa de cristal Riedel. La parte sólida de la fiesta correrá a cargo de algunos de los productos de calidad de los que presume este territorio: ibéricos salmantinos, jamón de Guijuelo, cecina de León y quesos de oveja de Valladolid. Y por supuesto no faltará la música en directo para acompañar esta sexta feria del vino en una de las calles emblemáticas del lujo de la capital.
WOW Porto
Por último, una mirada a una de las grandes ciudades del vino de Europa, Oporto, donde en el barrio de Vila Nova de Gaia abría sus puertas hace tres años el distrito cultural WOW Porto, o lo que es lo mismo, el espacio World of Wine. Estamos ante un recinto construido a partir de la restauración de varias bodegas antiguas de vino de Oporto, situadas a la otra orilla del Duero (frente a la capital portuguesa), y que se ha convertido en poco tiempo en un punto de encuentro cultural y artístico para la ciudad y para todo el que la visita.
En pleno centro histórico de Vila Nova de Gaia –donde se encuentran las instalaciones centrales de importantes bodegas del país (Graham’s, Taylor’s, Ramos Pinto, Porto Cruz o Sandeman) – y con privilegiadas vistas a Oporto y al río (allí llamado Douro), este WOW Porto incluye un total de siete museos, doce restaurantes y cafés, tiendas, una Escuela del Vino, una fábrica de chocolate, un espacio de exposiciones y varios espacios para eventos.
La finalidad, ofrecer diversidad de experiencias a quien los visita, muchas de ellas con el vino de esta tierra como protagonista. Una ocasión para conocer sobre el territorio, su clima, suelos, uvas (que aquí se cuentan por centenares), maneras de elaborar, tipos de vino… y disfrutarlos con incomparables vistas, desde sus terrazas, sobre tan bonita ciudad.
