Ni patatas bravas, ni tortilla: esta es la tapa que triunfa en los bares de España
Esta combinación de ingredientes demuestra que la tapa perfecta tan solo necesita una buena idea bien ejecutada
Esta es la tapa de moda. | (Canva)
Durante años, las patatas bravas y la tortilla de patatas han reinado en las barras de los bares españoles. Son clásicos que nunca fallan y que forman parte de la identidad gastronómica del país. En este contexto, hay una tapa que ha empezado a destacar en muchos locales, conquistando a los comensales con su mezcla irresistible de sencillez, sabor y textura.
Hablamos de las tostas con una capa de patatas cocidas y calamares. Su popularidad ha ido creciendo en los últimos meses, y cada vez más bares la incluyen en sus menús como opción estrella. Así, se ha impuesto incluso a los platos más tradicionales. ¿Qué tiene esta tapa que la hace tan especial? Quizá su equilibrio entre tradición e innovación, o quizás su capacidad de sorprender sin caer en extravagancias.
Tostas de patata cocida y calamares
Ingredientes
- 1 barra de pan rústico
- 4 patatas
- 400 gramos calamares
- aceite de oliva
- sal
- pimienta
- perejil
- ajo
- zumo de limón
Elaboración paso a paso
- Cocer las patatas.
- Tostar el pan.
- Dorar los calamares.
- Montar las tostas.
- Aliñarlas.
- Lavar bien las patatas y cocerlas con piel en agua con sal hasta que estén tiernas. Una vez cocidas, pelarlas y cortarlas en rodajas finas o aplastarlas ligeramente con un tenedor para que conserven su textura pero se adapten a la superficie del pan.
- Cortar las rebanadas de pan y tostarlas ligeramente en una sartén o en el horno. Se puede frotar ligeramente con un diente de ajo para dar un toque de sabor.
- Después, limpia bien los calamares y córtalos en tiras.
- Saltearlos en una sartén caliente con un poco de aceite de oliva durante apenas dos minutos por cada lado.
- Sobre el pan tostado, coloca una capa de patatas cocidas. Encima, disponer los calamares recién hechos.
- Se puede añadir un toque de sal en escamas, un poco de pimienta negra y un chorrito de limón o unas gotas de alioli.
- Espolvorear un poco de perejil picado por encima para dar color al plato.
- Servir caliente o templado, acompañado de una bebida bien fría.
Otras tapas de moda en los bares
Aunque las tostas de patata y calamares están viviendo su momento de gloria, no son las únicas tapas que están renovando el panorama gastronómico en los bares. La tendencia actual se inclina hacia reinterpretaciones modernas de platos tradicionales y combinaciones que apuestan por la calidad del producto y la presentación cuidada.
Entre las más destacadas se encuentran:
- Mini molletes de carrillera ibérica: panecillos tiernos rellenos de carne melosa y jugosa, con salsas que aportan contraste, como mostaza dulce o crema de queso azul.
- Croquetas gourmet: más allá de las clásicas de jamón, ahora se ven de cecina con trufa, de rabo de toro o incluso de boletus y parmesano.
- Huevos rotos con productos de temporada: una reinvención del clásico, ahora acompañados de setas silvestres, sobrasada mallorquina o pulpo a la brasa.
- Tartar de salmón o atún sobre chips de yuca o pan de cristal: combinando la frescura del pescado crudo con bases crujientes y salsas cítricas o asiáticas.
- Hummus de remolacha: acompañado de chips vegetales, falafel en pan de pita o brochetas de tofu marinado.
La tapa de tosta con patata cocida y calamares tiene todos los ingredientes para convertirse en un nuevo clásico moderno. Su éxito no reside en la sofisticación, sino en su capacidad para ofrecer un sabor auténtico, accesible y con una presentación que entra por los ojos. Así que, la próxima vez que te sientes en la barra de un bar, no te sorprendas si, en lugar de pedir las bravas o la tortilla, te ves tentado por una de estas deliciosas tostas. Porque a veces, los pequeños cambios son los que marcan la diferencia.
