La conciencia no la dejaba dormir. «Me he liberado de un peso insoportable». Una turista canadiense que robó una escultura de Pompeya durante su luna de miel, en 1964, decide devolver el objeto 50 años después, ya que su acción no la dejaba vivir.
La conciencia no la dejaba dormir. «Me he liberado de un peso insoportable». Una turista canadiense que robó una escultura de Pompeya durante su luna de miel, en 1964, decide devolver el objeto 50 años después, ya que su acción no la dejaba vivir.
Inicia sesión en The Objective
Crea tu cuenta en The Objective
Recupera tu contraseña
Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective