Yuriko Koike, la primera gobernadora de la historia de Tokio
La veterana política, que se presentó como independiente, se ha impuesto con casi un 50% de los votos a los otros 20 candidatos. El papel del gobernador combina funciones de un alcalde americano y de un gobernador del estado. No es la primera vez que una mujer ostenta el cargo de gobernador en Japón, pero si en Tokio, la capital del país y la ciudad más grande con 13,6 millones de habitantes, una de las áreas urbanas más pobladas del mundo. La biografía de Koike, que fue ex ministra de Medio Ambiente y de Defensa, es algo inusual en un político japonés más allá de ser mujer. Es una ex presentadora de noticias divorciada, está titulada en sociología por la Universidad Americana de El Cairo, habla inglés y árabe con fluidez. Se trata de la candidata más hacia la derecha de los otros tres principales candidatos, pero decidió presentarse al cargo como independiente. Entre sus principales cometidos durante los próximos años estará la de supervisar la preparación de los Juegos Olímpicos de 2020.
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Una nueva mujer ha ingresado en el grupo de las mandatarias. Yuriko Koike, de 64 años, se ha convertido este domingo en la primera mujer que consigue el cargo de gobernador de Tokio con una aplastante mayoría. Uno de sus grandes retos será aguantar en el cargo más que sus predecesores, que no han durado los cuatro años por diversos escándalos de corrupción.
La veterana política, que se presentó como independiente, se ha impuesto con casi un 50% de los votos a los otros 20 candidatos. El papel del gobernador combina funciones de un alcalde americano y de un gobernador del estado. No es la primera vez que una mujer ostenta el cargo de gobernador en Japón, pero si en Tokio, la capital del país y la ciudad más grande con 13,6 millones de habitantes, una de las áreas urbanas más pobladas del mundo. La biografía de Koike, que fue ex ministra de Medio Ambiente y de Defensa, es algo inusual en un político japonés más allá de ser mujer. Es una ex presentadora de noticias divorciada, está titulada en sociología por la Universidad Americana de El Cairo, habla inglés y árabe con fluidez. Se trata de la candidata más hacia la derecha de los otros tres principales candidatos, pero decidió presentarse al cargo como independiente.
Entre sus principales cometidos durante los próximos años estará la de supervisar la preparación de los Juegos Olímpicos de 2020.
