Miles de venezolanos cruzan a Colombia tras la reapertura de la frontera
El cierre de las fronteras -también se hizo lo propio con la existente entre Venezuela y Brasil- se produjo en un momento de extrema incertidumbre y violentas protestas. Al menos tres personas han muerto y varios centenares han sido detenidas durante el fin de semana. La demacrada economía venezolana, golpeada por una inflación del 475% -la más alta del mundo- según el Fondo Monetario Internacional (FMI), ha sido la excusa perfecta de Maduro para encontrar un culpable exterior. Según el mandatario, cada día más acorralado por la oposición, unas «mafias» que operan desde Colombia almacenan millones de billetes de 100 bolívares y buscan desestabilizar la economía del país. El 2 de enero desaparecerán todos estos billetes, pero difícilmente también lo hará la crisis. Mientras tanto, los venezolanos seguirán cruzando cada día los pasos fronterizos para conseguir comida, pañales y medicamentos.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y el de Colombia, Juan Manuel Santos, acordaron abrir la frontera entre ambos países «de forma progresiva, con estricta vigilancia y seguridad» este lunes por la noche. La consecuencia al día siguiente es que miles de venezolanos han cruzado los pasos peatonales fronterizos, cerrados por Maduro el 12 de diciembre debido al colapso económico, en busca de alimentos y medicinas en territorio colombiano.
El cierre de las fronteras -también se hizo lo propio con la existente entre Venezuela y Brasil- se produjo en un momento de extrema incertidumbre y violentas protestas. Al menos tres personas han muerto y varios centenares han sido detenidas durante el fin de semana. La demacrada economía venezolana, golpeada por una inflación del 475% -la más alta del mundo- según el Fondo Monetario Internacional (FMI), ha sido la excusa perfecta de Maduro para encontrar un culpable exterior. Según el mandatario, cada día más acorralado por la oposición, unas «mafias» que operan desde Colombia almacenan millones de billetes de 100 bolívares y buscan desestabilizar la economía del país. El 2 de enero desaparecerán todos estos billetes, pero difícilmente también lo hará la crisis. Mientras tanto, los venezolanos seguirán cruzando cada día los pasos fronterizos para conseguir comida, pañales y medicamentos.