Destapada una red de ciberespionaje a importantes políticos italianos
Otras importantes personalidades afectadas serían el también ex primer ministro italiano, Mario Monti, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, y otros políticos y empresarios que poseen algún tipo de información reservada. Según la investigación de la policía, la red tuvo acceso a “noticias relativas a la seguridad del Estado” tras lograr penetrar en los sistemas informáticos de las víctimas, donde cometieron una “interceptación ilegal agravada de comunicaciones o telecomunicaciones”. Los detenidos residían en Londres, aunque tenían domicilio en Roma. Según explican las autoridades en un comunicado, se trataba de dos personas “muy destacas en el mundo de las altas finanzas capitalinas”. Ahora, ambos permanecen en prisión de forma cautelar y dependerán de la Fiscalía de Roma, acusados de ser los presuntos cabecillas del robo de información.
La policía de Estado italiana ha detenido este martes en Roma al ingeniero informático Giulio Occhionero, de 45 años, y a su hermana Francesca, de 49, como sospechosos de crear una red de ciberespionaje con el objetivo de controlar instituciones y administraciones públicas, estudios profesionales y empresarios. Los imputados habrían accedido al correo personal del ex primer ministro italiano, Matteo Renzi, que dimitió en diciembre.
Otras importantes personalidades afectadas serían el también ex primer ministro italiano, Mario Monti, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, y otros políticos y empresarios que poseen algún tipo de información reservada. Según la investigación de la policía, la red tuvo acceso a “noticias relativas a la seguridad del Estado” tras lograr penetrar en los sistemas informáticos de las víctimas, donde cometieron una “interceptación ilegal agravada de comunicaciones o telecomunicaciones”. Los detenidos residían en Londres, aunque tenían domicilio en Roma. Según explican las autoridades en un comunicado, se trataba de dos personas “muy destacas en el mundo de las altas finanzas capitalinas”. Ahora, ambos permanecen en prisión de forma cautelar y dependerán de la Fiscalía de Roma, acusados de ser los presuntos cabecillas del robo de información.