La policía detiene a tres sospechosos de causar incendios en el Amazonas
Los investigadores sospechan que el trío pagó a unos 50 hombres para derribar 20.000 hectáreas más de selva próximas a la propiedad
La Policía Civil del estado de Pará, en el norte de Brasil, ha identificado y arrestado a tres sospechosos de provocar incendios en la selva del Amazonas, el pulmón del planeta que sufre estos días por el fuego natural y premeditado.
Dos hermanos que son dueños de la hacienda Ouro Verde y el gerente de la propiedad, localizada dentro del Área de Protección Ambiental Triunfo do Xingú, fueron detenidos y acusados de incendiar 5.000 hectáreas de selva, según informa Efe.
Los investigadores sospechan que el trío pagó a unos 50 hombres para derribar 20.000 hectáreas más de selva próximas a la propiedad. Los sospechosos van a responder ante la Justicia por los cargos de daños al medioambiente, polución, incendio y asociación criminal.
Además, durante el operativo policial, fueron encontrados en la propiedad de los acusados trabajadores en condiciones de esclavitud.
Las autoridades también cumplieron órdenes de allanamiento en otras haciendas de los sospechosos en el estado de Goiás (centro).
El caso es uno de los tantos aislados en los que la Policía local de los estados amazónicos buscan encontrar a los responsables de los miles de focos de incendio que se propagaron en los últimos días por la Amazonía y concitaron la atención internacional.
Las acciones del Gobierno de Brasil para frenar las llamas en la Amazonía continuaron este jueves con la prohibición del uso de fuego para preparar las tierras para las siembras, una decisión que se extenderá por un período de dos meses.
Aunque la tala y quema de los terrenos en la Amazonía está permitida bajo determinadas normas, y es una práctica común, usada hasta por los indígenas, la medida busca evitar que surjan nuevos focos de incendio, en momentos en que las autoridades empiezan a controlar las llamas.
En Pará, uno de los tres estados más afectados por el fuego, las quemas pasaron de 1.004 el 13 de agosto a 352 el 28 del mismo mes, una reducción del 64,9%.
Para el Instituto de Investigación Ambiental de la Amazonía (Ipam), de los 27.000 focos de incendio registrados, solo en agosto, la mayoría están relacionados con la deforestación en la región, que alcanzó los 2.254,8 kilómetros cuadrados en julio, un volumen un 278% superior al del mismo mes del año anterior.
Bolsonaro vs. Macron
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, fuertemente criticado por su discurso a favor de la agroindustria y la minería en la región del Amazonas y por una reacción tardía frente a los incendios, volvió a minimizar el impacto de los mismos en su transmisión semanal de los jueves por las redes sociales.
«Ha sido una semana agitada, pero el promedio este año (de incendios) no es el más alto, queríamos que fuese cero, pero no es el más alto como dicen y la selva como tal es difícil que se queme porque es húmeda y alta», ha afirmado el mandatario.
Para el jefe de Estado, su homólogo francés, Emmanuel Macron, al condicionar la ayuda del G7 y la ratificación del acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea (UE) a compromisos medioambientales de Brasil, «puso en juego la soberanía sobre la Amazonía».
«Agradezco aPiñera, a España y a Trump por defender en el G7 a Brasil. El Amazonas es muy importante y el 6 de septiembre en Leticia, Colombia, estaremos con los presidentes de Perú y Ecuador para pensar y discutir sobre ese asunto», ha apuntado.
Según Bolsonaro, la ayuda ofrecida por Macron «es una limosna»: «Brasil vale mucho más que 20 millones de dólares. Muéstrenme una hectárea replantada y yo sé que ese dinero en su mayoría es para los oenegeros. Es poco lo que se destina para la reforestación».