Alec Baldwin rompe su silencio: «Yo no apreté el gatillo»

Alec Baldwin ha hablado por primera vez ante una cámara de televisión tras la tragedia ocurrida en el set del western Rust. Todo sucedió el 21 de octubre, cuando el intérprete mató, de manera accidental, a la directora de fotografía Halyna Hutchins, e hirió al director de la película, Joel Souza, cuando disparó un arma de atrezo, que no estaba cargada con balas de fogueo.  

Ha pasado algo más de un mes y Baldwin ha decidido hablar por primera vez tras el accidente. Y lo ha hecho en una entrevista en exclusiva con el periodista George Stephanopoulos –presentador de Good Morning América-, que se emitirá esta noche en Estados Unidos en la cadena ABC. Pero ya se ha podido ver un adelanto de la misma.  

Emocionado hasta el punto de no poder evitar llorar en algún momento, el actor es tajante en sus declaraciones: «Yo no apreté el gatillo. Jamás apuntaría a alguien con un arma y apretaría el gatillo. Nunca», afirma, aún conmocionado por lo sucedido. 

«No tengo ni idea de lo que sucedió, alguien puso una bala de verdad en la pistola, una bala que ni siquiera debió de estar en la propiedad», reconoce, entre lágrimas. Pero parece ser que durante la investigación se encontraron más de 500 proyectiles.  

De ahí que las pesquisas de los investigadores tengan bajo mira a la maestra armera y al ayudante de dirección, los dos responsables de la armería utilizada en el rodaje del film. «Todavía me cuesta creer que el incidente que ocurrió. No me parece real», explica durante la conversación. 

«¿Es lo peor que le ha pasado en la vida?», le pregunta el periodista al actor. Y él, compungido, asiente: «Sí, por supuesto, porque echo la vista atrás y pienso: ¿qué podría haber hecho yo para evitarlo?».  

Además de exponer sus sentimientos, el artista dejó claro que mantenía una excelente relación con Halyna: «Era una persona querida, apreciada y admirada por todos los que trabajaban con ella». Baldwin ha estado en contacto, de manera permanente, con el marido y la familia de la víctima, que tenía un hijo pequeño.  

Será a las ocho de la tarde 

La ABC emitirá la entrevista a las ocho de la tarde –hora de la costa Este- y el presentador ha dado unas pinceladas de cómo fue mantener esta conversación con Baldwin que, según él, sigue «devastado» por la tragedia.  

Al parecer la entrevista duró en total una hora y veinte minutos y Stephanopoulos ha reconocido que se quedó muy sorprendido con la sinceridad con la que habló el invitado en todo momento, a pesar del momento tan complicado por el que atraviesa.  

«Ha sido muy directo. Respondió a todas las preguntas, habló de Halyna Hutchins, de la reunión que mantuvo con su familia. Ha hablado con todo detalle de lo que pasó aquel día en el set de rodaje», ha dicho el comunicador al programa que él mismo conduce a diario.  

Volcado en su familia 

A lo largo de estas semanas, Alec Baldwin ha estado centrado en su familia. Ellos han sido su refugio y gracias a su amor y a su apoyo, ha encontrado la serenidad suficiente como para hablar del incidente que le ha cambiado la vida. Aún están en nuestra retina las imágenes del actor llorando, totalmente impactado por lo que había vivido, minutos después de que sucediera todo.  

Baldwin tuvo que declarar en dependencias policiales y, a su salida, publicó un comunicado en sus redes sociales en el que se mostró conmocionado y triste por lo ocurrido durante la jornada de trabajo. Explicó que estaba cooperando de manera activa con la investigación y confirmó que estaba en contacto y apoyando de manera activa a la familia de Halyna.  

Tras estas palabras, el protagonista de la serie 30 Rock, anunció también que se retiraba de la vida pública de manera temporal para recuperarse. Y lo hizo refugiándose en su familia: su mujer, Hilaria, los seis hijos que tienen en común, además de su hija Ireland, nacida de su relación con Kim Basinger.   

Denuncias  

Tres semanas después, el jefe de iluminación del largometraje, Serge Svetnoy, interpuso una demanda contra Alec Baldwin y el resto de productores de la cinta, acusándoles de haber escatimado en gastos en relación a los protocolos de seguridad, así como de haber manejado mal las armas de fuego en el plató donde tuvo lugar la tragedia. «Eran conscientes de lo erróneo y perjudicial de su conducta». 

A esta demanda se le sumó, días después, la de Mamie Mitchell, supervisora de guión de Rust, acusando al equipo de producción -incluido Baldwin-, de ser responsables de las «peligrosas condiciones en el set», así como de causarle a ella heridas físicas y emocionales tras el accidente.