El príncipe Harry, dispuesto a todo por garantizar la seguridad de su familia
El hijo pequeño de Carlos de Inglaterra amenaza con demandar al Gobierno de su país
Que el príncipe Harry está dispuesto a todo por los suyos no es una sorpresa. Por su mujer y su hijo puso tierra de por medio, trasladándose a vivir a California. Y de paso renunció a sus obligaciones como miembro de la Familia Real hace dos años. Siete meses después del nacimiento de su hija, el hermano pequeño de Guillermo de Inglaterra tiene la intención de visitar su país natal.
Hasta ahí todo perfecto. Pero el hijo menor del príncipe Carlos se ha visto en una disyuntiva que, para él, tiene una clara solución. Todo sea por garantizar la seguridad de su mujer y sus dos hijos mientras se encuentran en suelo inglés. Está dispuesto a lo que sea necesario. Y si eso implica emprender acciones legales contra el gobierno británico lo hará.
Según el Daily Mail, los representantes legales de Harry enviaron hace unos meses una ‘carta de protocolo de acción previa’ al ministro del Interior. En ella indicaron que buscarán una «revisión judicial» si los duques de Sussex no cuentan con seguridad permanente mientras están en Gran Bretaña. Un pulso al gobierno inglés por su decisión de eliminar la seguridad policial del Reino Unido a Harry y su familia. Algo que considera que es «inseguro».
En un comunicado emitido en nombre del duque de Sussex, se hace referencia a otros casos similares que, como él, han dejado un cargo público. Pero estos sí continúan recibiendo protección policial. Harry lo tiene claro, si no se garantiza su seguridad y la de su familia no le temblará el pulso a la hora de llegar al Tribunal Superior de Justicia.
Correría con los gastos
«No pueden regresar a su país» por considerar que es «demasiado peligroso», ha dicho uno de sus abogados en un comunicado. «Reino Unido siempre será el hogar del príncipe Harry y un país en el que quiere que su esposa y sus hijos estén seguros», continúa. Y afirman que, «con la falta de protección policial viene un riesgo personal demasiado grande».
Se hace alusión a un incidente que vivió Harry en Londres el pasado verano, cuando su seguridad se vio comprometida cuando su coche se vio sometido a una persecución por parte de los paparazzi después de acudir a un evento solidario. Sus abogados argumentan que «su rol dentro de la Institución ha cambiado, pero su perfil como miembro de la Familia Real no lo ha hecho y tampoco la amenaza para él y su familia» .
«Sigue siendo el sexto en la línea de sucesión al trono, cumplió dos periodos de servicio militar en Afganistán y, en los últimos años, su familia ha sido objeto de amenazas neonazis y extremistas que están documentadas», indican sus representantes legales.
Como ya puso sobre la mesa en enero de 2020, el duque de Sussex no tendría problema en asumir el coste de la seguridad «para no comprometer al contribuyente británico». Así lo hacen con el equipo de guardaespaldas que tienen en Estados Unidos. «Los duques de Sussex financian personalmente un equipo de seguridad privada para su familia», pero este equipo no tiene jurisdicción en el extranjero ni acceso a la información de la inteligencia británica.
Las razones de su regreso
Si bien la agenda privada de los duques de Sussex es todo un misterio, hay tres citas importantes en el Reino Unido que podrían haber provocado este golpe en la mesa del príncipe Harry. Él ya estuvo en su país en el 2021. Primero, para despedir a su abuelo, el duque de Edimburgo, que falleció en abril a los 99 años. Meses después volvió para inaugurar, junto a su hermano, la estatua conmemorativa de Lady Di en el que hubiera sido su 60 cumpleaños.
El empeño del duque de Sussex por volver a Inglaterra con su mujer y sus dos hijos está más que justificado. El próximo 2 de junio tendrá lugar, además del Trooping the Colour (el Desfile del estandarte), la celebración del Jubileo de Platino de la reina Isabel. 70 años en el trono que bien merecen un reencuentro familiar al completo.
Dos días después, el 4 de junio, los Sussex celebrarán el primer cumpleaños de la pequeña Lilibet Diana. La pequeña lleva un nombre muy significativo en honor a su bisabuela la reina y a su abuela paterna. Debido a las circunstancias sanitarias, ningún miembro de la Familia Real conoce a la niña, por lo que esos podrían ser unos días entrañables con la soberana y su bisnieta como auténticas protagonistas.
Por si esto fuera poco, el 31 de agosto se cumplirán 25 años de la muerte de Lady Di. Un día complicado para los hijos de la malograda princesa que, aun con el paso del tiempo, sigue siendo muy querida y también muy recordada por los británicos. Aunque todavía no se conoce cómo se la homenajeará, seguro que sus hijos estarán en Londres para recordarla.
Harry contrataca en el peor momento
El príncipe Harry vuelve a colocarse en la palestra en un momento muy delicado para la Corona. Todo debido a la situación judicial del príncipe Andrés que irá a juicio por las acusaciones de supuestos abusos sexuales que planean en su contra y que ha intentado evitar por todos los medios.
Hace casi una semana que el juez norteamericano Lewis Kaplan, rechazó archivar el caso y desestimar las alegaciones del equipo de abogados del hijo de Isabel II, poniendo sobre la mesa el acuerdo al que llegó en su momento Virginia Giuffre (la mujer que le acusa de haber abusado de ella) con Jeffrey Epstein.
Una vez conocida la decisión del magistrado, el Palacio de Buckingham no se quiso pronunciar al respecto: «No comentamos sobre lo que es un asunto legal en curso». Pero horas más tarde la soberana británica actuó con contundencia, anunciando con un comunicado, que la reina había decidido despojar de sus afiliaciones militares y de sus patrocinios reales al príncipe Andrés. Eso incluye el hecho de dejar de utilizar el tratamiento de Alteza Real.