La gran cita de los Urdangarin que podría ser la presentación oficial de Ainhoa Armentia
Desde que se conoció la relación del todavía marido de la infanta Cristina y su compañera de trabajo, la discreción ha sido su máxima, incluyendo a toda la familia
El mes de enero comenzó con una de las noticias bomba de este año: la nueva relación sentimental de Iñaki Urdangarin con una compañera de trabajo que responde al nombre de Ainhoa Armentia. Un escándalo que destapó cuál era la situación del matrimonio de la infanta Cristina con su marido, después de más de 20 años juntos y cuatro hijos en común. No solo eso. Su historia de amor parecía invencible a juzgar por cómo lidiaron con los problemas judiciales del exjugador de balonmano, que terminaron con él ingresando en prisión. Y doña Cristina siempre a su lado.
Hasta que llegaron las fotos. La revista ¡Hola! publicó un reportaje en el que Iñaki paseaba abrazado de su nueva conquista, durante una escapada a uno de sus destinos de playa favoritos que además no estaba muy lejos de Vitoria. Sus circunstancias personales en cuanto al cumplimiento de la condena le mantenían ligado a su ciudad natal, teniendo que solicitar permisos judiciales en caso de querer abandonar la provincia.
A partir de ese momento tanto Iñaki Urdangarin como su nueva pareja, Ainhoa Armentia, se convirtieron en el foco de la noticia. Una situación que llevaron de la mejor manera posible. Casi sin hacer declaraciones, aguantando la presión mediática y llevando a cabo su rutina diaria de la manera más natural posible.
Seis meses de discreción
A lo largo de este medio año transcurrido desde que saltó a la luz este noviazgo, las informaciones sobre el ex duque de Palma han sido una constante. Él mismo dio varios pasos adelante, siempre en consenso con la infanta, la que peor lo ha pasado. Juntos hicieron público un comunicado en el que anunciaban la interrupción de su vida matrimonial.
Se han visto en varias ocasiones tanto solos como con sus hijos. Ellos son su prioridad y, según se ha publicado, también han acusado la separación de sus padres. No importa su edad, han sufrido todo lo concerniente al proceso judicial de su padre y también han padecido las burlas y los insultos de compañeros de colegio precisamente por lo que se estaba viviendo en la familia.
Tanto Iñaki Urdangarin como doña Cristina han estado muy pendientes de sus cuatro vástagos. Y mientras la hija mediana del rey emérito se ha volcado en sus hijos, sus padres y hermana, así como en sus amigos, su todavía marido ha continuado afianzando su relación con Ainhoa. Eso sí, en un discretísimo segundo plano. Hasta el punto de que parece ser que todavía no ha habido una presentación oficial de Ainhoa Armentia al resto de los Urdangarin.
El ‘día D’
Todo esto podría cambiar el próximo 19 de agosto. Según afirma Vanitatis, ese viernes toda la familia tiene una cita ineludible fuera de España. Iñaki Flood, sobrino de Iñaki Urdangarin, se casa en Estados Unidos. Esta podría ser la excusa perfecta para que el yerno del rey emérito aparezca del brazo de su actual pareja. La familia al completo viajará hasta Minnesota donde tendrá lugar el enlace en el que no se espera que esté la infanta Cristina.
Hace casi una semana se publicaron unas nuevas imágenes de Iñaki y Ainhoa compartiendo unos días de vacaciones. Según la publicación que destapó su idilio, las fotografías supondrían un nuevo punto de partida para ellos tras haber superado una crisis. Lo cierto es que su relación continúa. Han pasado ya seis meses desde que la vida de Iñaki Urdangarin comenzó a dar un giro de 180 grados tanto en lo personal como en su faceta laboral.
Todavía no ha habido testimonio gráfico de que Ainhoa ya sea una más del clan Urdangarin. Y eso que ambos siguen residiendo en Vitoria. Pero tanto para uno como para otro sus respectivas familias son su pilar, de ahí que vayan despacio en cuanto a formalizar su historia de amor -al menos de puertas para adentro-.
La familia de Iñaki Urdangarin, entre la espada y la pared
La relación de los Urdangarin con la infanta Cristina ha sido inmejorable. La hermana de Felipe VI ha sido una más del clan desde que comenzó su historia de amor con Iñaki a finales de los 90. De hecho, durante el proceso judicial por el caso Nóos, parecía que la infanta había encontrado más comprensión y apoyo en su familia política que en la suya propia. La postura de Casa Real respecto a lo que estaba ocurriendo con Iñaki Urdangarin quedó clara. Por eso tanto Vitoria como Bidart fueron el refugio de la infanta, que siempre estaba acompañada de sus hijos, su suegra y sus cuñados y sobrinos.
Claire Liebaert no dudó en afirmar que su relación con doña Cristina seguiría siendo la misma. Lo dijo cuando salieron a la luz las imágenes de la pillada a su hijo y su nueva pareja. La madre y los hermanos de Iñaki Urdangarin están en una complicada tesitura. Por un lado, está el cariño que sienten todos por la infanta después de más de dos décadas. Y por otro, el amor y el respeto que tienen por Iñaki que, después de más de una década en el candelero debido a sus problemas con la justicia, vuelve a ser feliz.