Ana Peleteiro revela que lloró mucho tras ser madre: «Me costó verme en top y braga»
La deportista ha revelado que tras dar a luz incluso lloraba, ya que no sentía que su cuerpo fuese realmente suyo
Ana Peleteiro en El Hormiguero | Antena 3
Ana Peleteiro está viviendo, sin duda, uno de los mejores momentos de su vida. En el terreno profesional, la deportista se clasificó para los Juegos Olímpicos de París de 2024; y en el personal, a finales del 2023 se casó con el amor de su vida, el también atleta Benjamín Compaoré, con quien tuvo una hija Lúa, nacida en diciembre del año 2022.
La maternidad colmó de felicidad a la atleta, no hay duda, pero no todo fue bueno. Así lo ha confesado ella misma este lunes en El Hormiguero. Las complicaciones comenzaron en el mismo parto, ya que finalmente tuvo que ser sometida a una cesárea, por la que le abrieron siete capas de abdomen.
Es indudable que el parto y el posparto cambian el cuerpo de la mujer, pero para una deportista profesional, el hecho puede ser mucho más traumático. Así lo ha reconocido ella misma en el programa de Antena 3.
Yo compito en top y braga y lloraba porque sentía que ese no era el cuerpo. Tengo que aceptarme tal y como soy, pero sí me costó verme con el atuendo de competir
«No me gusta hablar de este tema porque habrá gente que dirá: ‘¿cómo te quejarás tú?’. Yo compito en top y braga y yo lloraba porque sentía que ese no era el cuerpo. No es el cuerpo en el que están todas. (…) Tengo que aceptarme tal y como soy, pero sí me costó verme en top y braga», ha reconocido a Pablo Motos.
Ana Peleteiro se sometió a un duro entrenamiento para recuperar su físico tras ser madre
«El año pasado fue un año muy duro mental y físicamente. Este año se están viendo los resultados del trabajo del año pasado. De ir a entrenar tras haber dormido una hora. De verme laxa. De ver mi cuerpo completamente mutado de lo que yo había sentido antes del embarazo. (…) Lo peor fueron los dolores que yo tuve por la cesárea», ha admitido.
Un parto por cesárea es más complicado, así como la recuperación. Sin embargo, Ana Peleteiro ya estaba entrenando a los 28 días de dar a luz junto a su entrenadora, Cristina Díaz.
Un cambio de vida
Hay mujeres que llevan mejor que otras la maternidad, y Ana Peleteiro nunca ha escondido que al principio se le hizo un poco cuesta arriba. A sus problemas con el físico se le sumaron los de la logística, que le traín de cabeza. «Algo tan simple como tirar la basura requería una logística de la leche: pon a la niña en el carro, ponle el abrigo, coge la basura… cuando te quieres dar cuenta, llevas una hora intentando salir de casa. No podía ir a ningún sitio sin mi hija, sobre todo al principio, porque además estaba dando el pecho. Me separaba de ella diez minutos y parecía que los senos me iban a explotar», dijo en otra entrevista.
Quizá la propia deportista reflexiona de más sobre el tema por su propia situación, ya que ella es adoptada: «A mí me abandonaron, y eso te crea… Separarte de tu madre al nacer… Por lo que yo sé, que es poco, mi madre dio a luz y me dejó en Menores», relató en La Sexta.
Ahora, sin embargo, el tiempo ha pasado y todo se ha ido colocando en su sitio. De hecho, a Ana Peleteiro no le puede ir mejor, ya que va a abrirun gimnasio, en A Coruña, de la mano del jugador del Real Madrid, Lucas Vázquez, y con la ayuda de Crys Dyaz, tal y como te contamos en THE OBJECTIVE.
