La peor semana para Federico y Mary de Dinamarca: relación fría y gestos determinantes
El matrimonio ha protagonizado su visita de Estado a Suecia a bordo del yate Dannebrog más distanciados que nunca
Los frios gestos de Federico y Mary de Dinamarca. | Gtres
Esta última semana podría haber sido una de las más importantes para Federico y Mary de Dinamarca. Los actuales monarcas se embarcaron, el pasado 2 de mayo, en una de sus posesiones más especiales; el yate real Dannebrog. En estos últimos días, ambos han llevado a cabo un intenso viaje por Suecia y Dinamarca donde han disfrutado de dos visitas de Estado, coincidiendo, también, con el Rey y herederos del país sueco. En un primer momento, se apuntó a que ambos iban a estar navegando sobre este magnífico yate pero, finalmente no fue así, ya que la pareja desembarcó para pasar la noche en su residencia oficial.
Un extremo que preocupó, sobre todo, a los medios daneses. Y que se vio agravado cuando se supo que la pareja llegó a Estocolmo en avión y se fueron de allí de la misma forma. Sí que es cierto que, durante tan solo una noche, durmiendo abordo del yate, pero solamente eso. También, protagonizaron una recepción oficial. Unos eventos que quedan muy lejos de aquello que se planeó y se anunció para esta visita de Estado que, al final, será recordada por aquello que pudo ser y no fue y, también, por la infinidad de gestos de distanciamiento entre Federico y Mary de Dinamarca.
La visita de los Reyes a Suecia
Desde que se convirtieron en reyes, uno de sus objetivos ha sido el de darle más naturalidad a su matrimonio y, sobre todo, demostrar que entre ellos no había ningún problema. Algo especialmente difícil de creer sobre todo después de la publicación de las imágenes en las que aparecía Federico junto a Genoveva Casanova en Madrid. Una vez esas fotografías salieron a la luz, desde la Casa Real danesa comenzaron a mover la maquinaria y en el mes de enero, la reina Margarita abdicó en su hijo. Con esta decisión, todo apuntaba a que el matrimonio iba a consolidarse y olvidarse de toda la polémica y, lo más importante de todo; reconciliarse.
Este -supuesto- buen momento quisieron sellarlo con un apasionado beso el día de su coronación. Pero, pronto, se comenzó a ver al matrimonio más distanciado de nunca. Además, la situación se agravó cuando la Familia Real empezó a disfrutar de unas extensas y largas vacaciones, en las que sus apariciones públicas se contaron con los dedos de una mano. Tras esto, fue Mary quien tomó un papel fundamental dentro de la Corona mientras que su marido se desplazaba a un segundo plano. Una decisión que no se entendió, ni por parte de los medios de comunicación ni tampoco de la población. Es más, esto ha hecho que la popularidad de la Familia Real se haya visto gravemente afectada.
Los fríos gestos de Federico y Mary de Dinamarca
Es por eso que este viaje, distendido y relajado, en barco, era la oportunidad perfecta para Federico y Mary para demostrar que su amor estaba más vivo que nunca. O que, al menos, podían darle cierta tranquilidad a sus ciudadanos. Los dos llegaron a Suecia el pasado lunes por la mañana y se embarcaron en el Dannebrog. Más tarde, se subieron en otro barco de la Familia Real sueca en el que se reencontraron con Victoria de Suecia y su marido. Ambos les acompañaron, a Federico y Mary, hasta el aeropuerto para dirigirse a Copenhague. Su viaje ha estado observando con lupa y, por eso, cada uno de sus movimientos han sido observados y analizados.
Ha llamado especialmente la atención que, en uno de los eventos públicos, Federico y Mary se fundían en dos cariñosos besos. En el que, segundos más tarde, era el propio rey de Dinamarca quien se pasaba la mano por la boca, como si estuviera limpiándose. También, ha sido muy comentada la sonrisa de ambos monarcas durante todo el viaje, algo que la prensa danesa ha calificado como de poco natural. Lo cierto es que ninguno de los dos ha podido encontrar un equilibrio sano en su relación de cara a los medios de comunicación. Cada uno de sus gestos han sido medidos al dedillo y, aunque en todo momento han intentado aparentar tranquilidad y que ninguna polémica iba con ellos, lo cierto es que su expresión corporal dice mucho más.
La noticia de las imágenes entre Genoveva y Federico pilló a ambos monarcas durante la visita de Estado de Felipe y Letizia en Dinamarca. A pesar del gran revuelo que se estaba formando, no solamente en la prensa danesa, sino, también, en la española, ninguno de los quiso pronunciarse sobre la noticia que lo revolucionó todo. Es más, en los siguientes ambos, el matrimonio se mostró reforzado y unido. Aunque eso sí, cuando las cámaras no miraban se podía ver a una Mary más compungida y sensible. A partir de ese momento, sus apariciones públicas han sido contadas, sus vacaciones «demasiado» largas y los gestos de distanciamiento han sido constantes.
