El duro momento de Amador Mohedano: lejos de la televisión y perdiendo sus propiedades
El que fuera marido de Rosa Benito está haciendo frente a una gran deuda que ha adquirido con la Agencia Tributaria
Amador Mohedano está viviendo un momento complicado. El hermano de Rocío Jurado, alejado de los medios de comunicación, y, especialmente, de la televisión, ha visto cómo tenía que ir entregando, una a una, sus propiedades a la Hacienda Pública para resolver la deuda que tiene con la Agencia Tributaria. Además, en estos últimos años, ha tenido que enfrentarse a la separación con la que era su mujer, Rosa Benito, y a varias rupturas amorosas. En este momento, lo que más debe provocar a Mohedano es la deuda que tiene y que es de lo más cuantiosa.
Es más, desde la Agencia Tributaria se le advirtió que si no la hacía frente, esto podría causar el desahucio de la finca en la que vive y que heredó de su hermana Rocío Jurado, Los Naranjos. Es por eso que, en este tiempo, ha tenido que decir ‘adiós’ a distintas propiedades y tan solo conserva, como deslizan desde Vanitatis, una plaza de garaje-trastero que tiene que compartir con su mujer en la localidad de Chipiona, muy importante para la familia Mohedano-Jurado.
La pérdida de Los Naranjos, la finca más especial de Rocío Jurado
Como decimos, una de las últimas fincas que ha perdido Amador ha sido Los Naranjos, una de las más importantes por la carga sentimental que tiene. Su pérdida se ha hecho pública a través del Boletín Oficial del Estado, en el que se informa que ha perdido la vivienda en una subasta. El que fuera marido de Rosa Benito tenía el 50% de la finca que compartía con su hermana Gloria, tal y como explican desde Ok Diario. Así, el solar ha sido adquirió por 103.309,60 euros. Sí que es cierto que, por ahora, no se sabe quién ha pujado por la finca, aunque el propio ex colaborador de televisión ha confesado que sabe «perfectamente» quien lo ha hecho. Sí que es cierto que, a pesar de que se haya producido esta transacción, Mohedano puede seguir residiendo allí porque, como decíamos, su hermana Gloria todavía tiene el 50 por ciento.
La finca era una de las favoritas de Rocío Jurado quien siempre ha tenido muchísimo cariño a la localidad gaditana y a la Virgen de la regla. Lo que más destaca de ella es su gran extensión y, también, la enorme plantación de naranjos que hay repartidas por todo el terreno, de la que recibe su nombre. Dentro de la finca, además, se encuentra una casa que tiene varias habitaciones y una zona para el servicio. Fue en el año 2018 cuando Amador puso en venta parte del territorio debido a las deudas que había contraído, momento en el que, además, confirmó que estaba pasando por distintos inconvenientes económicos. Como se explica desde la revista Semana, las personas interesadas en comprar la casa depositaron más de 15.500 euros, lo que suponía el 5% del valor de subasta del lote.
El delicado momento de Amador Mohedano
Sí que es cierto que la cantidad con la que se quedará Haciendo no servirá para cubrir toda la deuda que tiene el hermano de Rocío Jurado que asciende a los 199.000 euros. «Me he echado una siestita y sois vosotros los que me estáis informando.He dicho muchas veces que la finca no está dividida. Y, por lo tanto, en el momento en que se haga efectiva esa segregación, la casa es de mi hermana. Mi casa nunca la voy a dejar. Si hay un comprador lo será de los 15.000 metros en los que no entraría nunca a la casa. A mí que me dejen la casa, el corralito y lo demás me da exactamente igual. Me da pena porque fue lo que me dejó mi hermana», contó Amador a Vanitatis tras conocer la puja.
En todo este tiempo, Mohedano ha recibido hasta tres anotaciones de embargo. La primera de ellas iba dirigida a la mencionada finca, mientras que la segunda hacía referencia a al trastero-garaje que dio muchos dolores de cabeza en su divorcio con Rosa Benito. Sí que es cierto que las prórrogas de anotación preventiva le han permitido conservar el 50 por ciento todavía a su nombre. Esta plaza se sitúa en el semisótano de un edificio municipal en Chipiona y tiene poco más de 23 metros cuadrados.
Por tanto, Amador tendrá que hacer frente a todas estas decisiones y a la deuda que tiene que pagar en uno de los momentos más inestables de su vida profesional. Sí que es cierto que, en otras etapas, el colaborador de televisión ha estado más activo en la pequeña pantalla, de la que se ha separado, en lo que parece ser definitivamente. Tampoco mantiene una relación fluida con la que era su mujer, Rosa Benito. Todo esto ha hecho, sumado a su última ruptura, que su momento personal sea especialmente delicado.