La actitud que comparten María Pombo y Álvaro Morata: su reacción ante las críticas
El capitán de la selección española ha confesado lo que sufre por las críticas y cuáles serán sus próximas acciones
María Pombo y Álvaro Morata. | Gtres
Álvaro Morata ha dicho ‘basta‘. El capitán de la selección española, a pocas horas de que se celebre la semifinal de la Eurocopa, ha concedido unas declaraciones en las que pone el foco en la presión mediática. El deportista del conjunto de Luis de la Fuente también ha hablado de las ocasiones en las que los medios de comunicación han reinterpretado su discurso y sus acciones. Y no solamente eso. Su familia, especialmente su mujer, ha explicado, a través de las redes sociales, que todas las duras críticas que se están vertiendo sobre el jugador, están afectando a todo su entorno y a él, personalmente.
Una actitud que se parece -y mucho- a la que mantiene la influencer María Pombo. La creadora de contenido siempre se ha quejado de cómo son recogidas las informaciones sobre su persona en los distintos medios de comunicación. Esto ha hecho que, además, como ella misma ha confesado, se le quiten las ganas de compartir más contenido en su perfil de Instagram, donde tiene millones de seguidores. Además, mide cada palabra que dice o cada acción que comparte con el único objetivo que no puedan ser malinterpretadas y no ser titular dentro de una noticia.
La actitud de María Pombo y las críticas que ha recibido
Algo que, por su repercusión, ha sido especialmente complicado. La última vez que la creadora de contenido ocupó la prensa fue hace unos días cuando se quejó de la cantidad de personas que había en el aeropuerto de Ibiza. Unas declaraciones que María hizo a través de sus redes sociales, comparando la afluencia de gente con uno de los aeropuertos más importantes del mundo; el de Nueva York. Unas declaraciones que recogieron algunos de los periódicos locales de la isla, que no vieron con buenos ojos la crítica a su gestión. Algo que María recogió en sus redes sociales y siguió manteniendo que, por esa razón, era cada vez menos la información que compartía a través de su perfil de Instagram, con el único objetivo de no ser noticia en los medios de comunicación.
Sobre todo después de la mala experiencia que tuvo durante su paso por La resistencia, en el que fue muy criticada por las bromas que realizó, que no gustaron de todo a su público, por lo encorsetada que estaba y, también, por afirmar que se había gastado más de tres mil euros en su regalo al programa cuando luego se supo que formaba parte de la empresa. Tras esto, y como ella misma confiesa en su documental, reclinó dar declaraciones a los medios de comunicación. Y las pocas entrevistas que concedió se ceñían a su faceta profesional, sin dejar paso a la improvisación y con todas las preguntas bien cerradas.
Cómo se enfrenta Morata a los comentarios negativos
Una actitud que recuerda mucho a la que está teniendo Álvaro Morata. El capitán de la selección española ha concedido una entrevista a El Mundo en el que desvela el «calvario» que está pasando después de los pitos y las críticas que ha recibido en su paso por la selección que le han llevado hasta a querer dejar de lado su posición dentro del conjunto rojo. «Pero es verdad que en España me cuesta mucho ser feliz. Al final siempre sale algo por algún lado. El otro día por hacer un gesto a los periodistas, simplemente de silbar, un gesto que pensé que se iba a quedar entre nosotros, pues algún periodista lo subió y…», ha confesado el jugador de fútbol al mencionado medio.
Un comentario con el que pone el foco en los medios de comunicación y en su papel. «No sé, fue un gesto sin más, pero algunos aprovecharon para criticar, como siempre. Como con el tema de si me sacaron amarilla o no, pues algunos ya decía ‘pues ojalá se la pongan’, o ‘jugamos mejor sin él’… Incluso cuando las cosas van bien…», se ha defendido el capitán de La Roja. «Cuando llego a mi casa siempre soy súper feliz, pero delante de la gente, me siento como si estuviera desnudo, y quizá eso no me ha dejado dar todo lo que tenía. Muchas veces es muy difícil estar en España porque siempre hay uno que dice una gracia, otro que…», ha apostillado sobre lo complicado que se le hace desenvolverse en público. Un discurso que coincide mucho con el que siempre ha expresado María, en el que queja de los comentarios que se hacen sobre todas las decisiones que toma y el papel de la prensa.
Es por eso que, probablemente, Morata se irá alejando cada vez más de sus obligaciones y busque un lugar en el que pueda desarrollar su día a día sin ningún tipo de crítica o comentario. Algo que parece cuanto menos complicado, teniendo en cuenta que por mucha distancia que ponga seguirá formando parte de la historia del fútbol de nuestro país y, como personaje público, sus acciones se medirán al dedillo.
