La actividad de la princesa Leonor en Elcano con la que sigue los pasos de la reina Letizia
La hija mayor de los Reyes llegará a Tenerife el próximo viernes y, mientras tanto, está centrada en su formación

La princesa Leonor en su último día en Elcano. | Gtres
La princesa Leonor sigue en el Juan Sebastián Elcano. La hija mayor de los Reyes llegará al puerto de Tenerife en los próximos días, concretamente el viernes 17 de enero. Así, la heredera estará estos días aprendiendo las nociones básicas sobre el mar y las maniobras que ha estudiado, de forma teórica, en los últimos meses en Marín. La vida en el barco, además, estará muy organizada. Tanto ella como el resto de guardiamarinas se despertarán a primera hora de la mañana, ya que a las siete de la mañana se ofrecerá el desayuno. Luego, comenzarán con las clases. Aunque eso sí, también tendrá tiempo libre para hacer actividades diferentes y que salgan, un poco, de su día a día. Entre ellas, realizar un informativo junto a sus compañeros, en el que hablarán de las noticias que leen en prensa y sobre todo lo que sucede en el buque, que filmarán y con el que pasarán un momento entretenido.
En los próximos meses, la princesa recorrerá unos ocho países y varias ciudades. Por la noche tendrá que irse pronto a la cama en su camarote que compartirá con otras tres alumnas. Tal y como han contado varias de las personas que han pasado por el barco, el espacio es muy reducido y es por eso que la princesa tendrá que colocar toda su ropa debajo de la cama y contará con poco lugar para moverse. Sí que es cierto que serán contadas las horas en las que esté en la cama, ya que normalmente se tendrá que centrar en su formación y en las distintas actividades que llevan a cabo durante el día.
La princesa Leonor sigue los pasos de su madre, la reina Letizia

El día comenzará para todos ellos antes de las siete de la mañana. Excepto para aquellos que han hecho la guardia nocturna. Luego, tendrán tiempo de asearse y arreglar sus literas, justamente antes del desayuno. Más tarde comenzarán con las clases y las actividades de formación con unas 18 asignaturas. Será a la una del mediodía cuando se servirá el la comida y, luego, volverán a retomar las maniobras hasta las seis de la tarde. En ese momento, acaban todas las actividades profesionales y se da paso al tiempo libre que cada alumno puede distribuir como quiere. Algunos optan por pasar tiempo con sus compañeros, leer o jugar a juegos de mesa. Tras esto, se produce la cena y a las diez y media de la noche llega la hora de acostarse cuando tienen que apagar las luces e irse a dormir.
Además, en el buque fomentan el sentimiento de grupo. Es por eso que hay algunas actividades que hacen todos juntos como, por ejemplo, el Telelcano. Tal y como confirmaron en Vanitatis, se trata de un informativo que la princesa y sus compañeros realizan cada siete días y que se acompaña por algunos sketches cómicos de alguna situación que se ha llevado a cabo a bordo. Anteriormente, se centraba en todo lo que tenía que ver con la información de actualidad de fuera del buque, sobre todo cuando no se tenía acceso tan fácilmente a la prensa. Ahora, los guardiamarinas hacen un resumen de las noticias principales de los medios de comunicación y lo presentan en vídeo a sus compañeros. Algo en lo que, sin duda, la princesa Leonor tendrá algo de experiencia, ya que era el trabajo de su madre, la reina Letizia, antes de que se anunciara su compromiso con Felipe.
Su tiempo libre en Elcano

Además de esa parte informativa, los alumnos narran algunas de las experiencias graciosas que se han vivido en el barco tanto con los profesores como entre ellos mismos. Es por eso que «no se salva nadie, incluidos los mandos y en este periplo tampoco la Princesa de Asturias. Es una manera de divertirse sin hacer mofa de nadie ni de nada. Es muy divertido y se desarrolla el ingenio». Luego, todos ellos participan en varias actividades una vez que se bajan al puerto. Algunos de ellos visitan las Embajadas y hablan con las autoridades sobre las actividades que realizan dentro del barco y en unas conversaciones en las que hablan de las características del barco y de sus costumbres.

En estos últimos años, el buque-escuela se ha ido adaptando a la modernidad. Así, dispone de WiFi y se ha aumentando el número de enchufes y las tomas de USB. Esto hará posible que los guardiamarinas puedan hablar con sus familiares y, también, puedan consultar las redes sociales. Aunque eso sí, el tiempo de diversión será limitado y estará muy controlado para que todos los guardiamarinas sigan adelante con su rutina, que está especialmente marcada. Además, la princesa no tendrá ningún privilegio si lo comparamos con sus compañeros y se comportará como una más junto al resto de los alumnos.