18 años de la muerte de Érika Ortiz: la situación actual de su hija y el gran dolor de la reina Letizia
La hermana pequeña de la reina Letizia murió hace justamente 18 años tras sufrir una fuerte depresión, dejando una hija

Felipe y Letizia, junto a Juan Carlos I, en el funeral de Erika Ortiz. | Gtres
Se cumplen 18 años de un episodio muy duro para la reina Letizia: la muerte de Érika Ortiz, su hermana pequeña. Fue el 7 de febrero de 2007, cuando la joven tenía 31 años de edad, que murió de forma inesperada en su casa de Madrid. Se había quitado la vida dejando a una familia desolada y sola a su única hija, Carla Vigo. Al día siguiente se conoció la noticia y comenzó uno de los días más amargos de la reina, en ese entonces princesa. Se la vio llorar, apoyarse en su familia política y mantener ante los medios la entereza que la caracteriza. La Letizia más natural frente a la Letizia que acababa de entrar en la Familia Real.

Letizia llegó al tanatorio de La Paz del brazo de Felipe, sin poder hablar y con el rostro descompuesto. El Príncipe de Asturias estuvo a su lado en todo momento al igual que la familia Borbón. Los reyes Juan Carlos y Sofía y las infantas Cristina y Elena, junto a sus parejas, no dudaron en acompañar a la periodista en su pérdida. Estos peculiares asistentes al velatorio fueron a ratos consuelo, como se vio en el abrazo de Letizia y Cristina, que por entonces eran buenas amigas.
El día más amargo de Letizia

Pero también generaron estampas más violentas. Como es el caso de Letizia arrodillándose ante el Rey a modo de disculpa por las palabras de un hombre: «Vosotros habéis tenido la culpa», le gritó a Juan Carlos. La periodista Pilar Eyre recuerda que en este momento marcó a la princesa, «fue un antes y un después, más que su propia boda. Él si tuvo la culpa». A pesar de lo inoportuno del momento, la prensa estuvo en el cementerio para seguir el estado de los herederos de la corona y preocuparse en especial por Letizia, que también estaba embarazada de seis meses de la infanta Sofía. Sacando fuerzas la periodista convertida en royal se acercó a los de su gremio: «Solo quería dar las gracias a todas las personas que se han sentido apenadas por la muerte de mi hermana pequeña». También Felipe quiso agradecer la «comprensión» de los medios.
Érika Ortiz Rocasolano había nacido en 1975 y era por ello 3 y 2 años menor que Letizia y Telma. Las hermanas compartían padres, Jesús Ortiz y Paloma Rocasolano, aunque ya se habían separado en 1999. Estos acudieron al tanatorio en esa mañana de invierno, fría y lluviosa de más. La menor de sus hijas sufría una depresión severa por la que recibía medicación. La autopsia desveló que su muerte se debió a una sobre ingesta de tranquilizantes, que acabó con su vida a los 31 años. Hasta el trágico final, Érika se dedicaba al interiorismo y diseño gráfico en Globomedia, la productora de Emilio Aragón.
Carla Vigo y la reina recuerdan a Érika Ortiz
Ahora Carla Vigo tiene 24 años pero al momento de perder a su madre tenía solo 6. Ella misma ha admitido que no tiene mucho recuerdos de su madre pero eso no significa que no la eche de menos, más aún alrededor de su aniversario. La prima de Leonor y Sofía tiene por costumbre compartir un mensaje este día en honor a su madre. El de 2023 daba cuenta de todo el tiempo que ha pasado ya desde su marcha: «Por aquí las cosas han cambiado mucho, pero seguimos pensando en ti». La sobrina de Letizia a que admitía que «cada vez me duele menos, pero cada día de mi vida lo que más deseo es que pudieses bajar de donde quiera que estés a darme un último abrazo y para ver la persona en la que me he convertido». La joven se dedica a las redes sociales y no se esconde de la atención mediática, como sí hacen sus primas y abuelos por discreción.

La reina Letizia no volvió a mencionar a su hermana en público desde su pérdida. Siguiendo con el protocolo guarda sus muestras de afecto para la intimidad y evita poner el foco en su faceta personal. Esto no quita que cada año incluya un detalle en su agenda pública en honor a Érika. La reina suele elegir este día para vestir de negro o blanco, colores usados tradicionalmente para el luto en occidente y Asia. Este año no veremos si recurrirá a estas prendas simbólicas, porque ha despejado su agenda y no tiene deberes con la Corona. Así se reserva el día para recordar a su hermana de forma privada, junto a Felipe y otros familiares.