Así es el desayuno ideal para Felipe VI y que a Letizia no le apasiona: es clásico y equilibrado
Cuando era joven, solía acudir a degustar esa primera comida a la Cafetería Monterrey, en la que siempre pedía lo mismo

El rey Felipe, en una imagen de archivo. | Gtres
El desayuno es la comida más importante del día. Comenzar la jornada con una comida equilibrada en el cuerpo y saludable hace que la energía se vaya distribuyendo en las siguientes horas. Es por eso que será muy importante disponer de un desayuno que tenga variedad, en la que nos podemos encontrar con distintos tipos de frutas, lácteos y proteína. Algo que tiene muy claro el rey Felipe. Es por eso que el monarca desayuna todas las mañanas lo mismo, una costumbre que tiene adquirida desde hace muchos años. Y es que, cuando era más joven, frecuentaba la cafetería Monterrey, en la que siempre pedía lo mismo.
Sí hay que tener en cuenta que en Zarzuela se lleva una alimentación estricta. Y es que la reina Letizia, cuando llegó a Palacio, remodeló un poco todo lo que tenía que ver con la comida. Es por eso que, desde hace más de veinte años, tanto Felipe como sus hijas disfrutan de productos de calidad, de cercanía y, sobre todo, han eliminado distintos alimentos de su día a día. A esto le ayuda que dentro de Zarzuela se haya colocado un huerto en el que se cultivan distintas hortalizas, que forman parte de los platos que se sirven dentro de la casa del Rey.
El desayuno favorito del rey Felipe

Aunque las comidas y las cenas suelen ser un poco más copiosas, el rey Felipe suele empezar su día con un desayuno sencillo y tradicional. Este está compuesto por unas tostadas y un zumo de naranja. Además, suele evitar distintos alimentos que tienen azúcares refinados. También, sabe adaptarse a cada situación. Es por eso que cuando viaja, como por ejemplo una de las últimas veces que ha sido visto haciendo esquí, el Rey disfrutó de un desayuno muy distinto. Lo hizo concretamente en el Moët Winter Lounge, donde degustó jamón ibérico Cinco Jotas que acompañó de Champagne. Sí que es cierto que la reina Letizia suele tomar pan solamente en contadas ocasiones, por lo que es muy probable que no desayune lo mismo que su marido.
Aún así, la elección de Felipe se encuadra dentro de los gustos de la mayoría de personas, quienes optan por alguna tostada junto a distintos tipos de proteínas como el embutido o por queso combinado con fruta como puede ser el aguacate o una verdura como el tomate. También, el zumo de naranja es una gran opción y tomarlo exprimido es un punto a favor para que el alimento no pierda calidad. Esta bebida tiene un alto contenido vitamina C, antioxidante y mejora la digestión. También, tiene propiedades antiinflamatorias y es una fuente rica de agua, por lo que se torna como esencial para hidratar el cuerpo. De la misma forma, el zumo de naranja contiene azúcares naturales, como la fructosa, y que brindan un empujón energético, perfecto para todas las mañanas.
Tostadas y zumo de naranja recién exprimido

También, contribuye a la salud de la piel. Sí que es cierto que, por lo que hemos podido ver, el monarca lleva una dieta saludable, en la que no falta algún que otro plato especial. Así, cada vez que sale, el Rey no suele privarse de nada y disfruta de los platos típicos de cada zona. Es más, una de sus bebidas favoritas es la cerveza, la cual suele pedir cuando acude a cualquier evento. En otra de sus escapadas a la nieve, Felipe eligió un restaurante especializado en carnes para comer. Allí el monarca se decantó por una ensalada de queso de cabra, chuletón, longaniza típica del Valle, morcilla de Burgos, vino tinto, tarta de pistachos y helado. Una serie de platos que pidió junto al resto de sus amigos y que todos ellos compartieron.

Cuando sale con la reina, en las veces que le hemos visto haciendo vida en la capital, suelen elegir restaurantes tradicionales y que tengan una buena materia prima. Así, en el verano del año pasado, el matrimonio se trasladó hasta un establecimiento en el centro de Madrid, concretamente en la plaza de Oriente, donde disfrutaron de una cena en pareja y en la que no faltó un producto tan codiciado como el pescado. En esas ocasiones, la reina sí que suele salir de la dieta tan encorsetada que tiene. Al igual que le sucede a la reina Sofía quien en Zarzuela no suele tomar mucha carne o pescado, ya que convive con su hermana, la princesa Irene de Grecia, quien es vegetariana desde hace muchos años.