Sandra Barneda y su novia, Pescalle Paerel: una historia de amor que sigue dando que hablar
¿Boda a la vista? Las fotos de ambas en redes avivan los rumores sobre un posible paso más en su relación
Sandra Barneda y Pescalle Paerel | RRSS
El amor tiene muchas formas de manifestarse. Algunas parejas lo gritan a los cuatro vientos, otras lo protegen en la más estricta privacidad y otras, como Sandra Barneda (49 años) y Pescalle Paerel (43 años), lo viven a medio camino, generando titulares sin decir una palabra. Al respecto, esta semana ambas han vuelto a ser noticia por una serie de fotografías que han compartido en redes sociales. En las instantáneas se daba a entender que ambas se habían casado, pero ¿era cierto?
La respuesta, al menos por ahora, es no. No ha habido boda oficial. No ha sonado la marcha nupcial ni se ha celebrado ningún banquete formal. Pero lo que sí ha habido romanticismo del bueno, complicidad, poesía y una declaración de intenciones que va más allá del papel.
Las imágenes de Sandra Barnerda y su novia: ¿se han casado?
El 26 de julio, Sandra Barneda —presentadora, escritora y rostro habitual de la televisión— compartió en Instagram unas fotografías en las que aparece junto a su pareja, Pescalle Paerel, firmando un documento, mirándose con ternura y sellando el momento con un beso.
El texto que acompañaba las imágenes rezaba: «La vida es la suma de momentos. Es el Ahora. El sentir más que pensar. Es confiar. Amar y volver a Amar. Amarte y Amar. Y sonreír y llorar cuando hay que hacerlo». Pocas líneas después, Sandra dejaba entrever que se trataba de un acto de profundo significado personal: «La vida es para los que se atreven. A cruzar los océanos de inseguridades, de miedos y dudas y… más allá encuentran la certeza de la vida: estar vivos, sentirse vivos… vivir en paz y vibrando alto. Amar, amarse… práctico y me elevo a la fe del camino llamado vida». ¿Poético? Mucho. ¿Ambiguo? También. ¿Suficiente para que las redes sociales y los medios saltaran a conclusiones? Sin duda.
Una avalancha de felicitaciones
Las reacciones no se hicieron esperar, pues todo el mundo entendió que se habían casado. Amigos y seguidores comenzaron a dejar comentarios dando la enhorabuena a la pareja, interpretando las imágenes como un anuncio de boda o una unión formal. Algunas cuentas incluso llegaron a dar la noticia como cierta, especulando con la posibilidad de una ceremonia íntima en Ámsterdam, ciudad que ha jugado un papel clave en este capítulo de su historia.
Sin embargo, la revista ¡HOLA! se apresuró a desmentirlo: Sandra y Pescalle no se han casado. Lo que sí han hecho —y no es poca cosa— es comprarse una casa juntas en la ciudad natal de Paerel, sellando un paso significativo en su relación.
Al parecer, pareja aprovechó unas vacaciones en los Países Bajos para dar un paso firme, que no es otra cosa que invertir en una vida en común. La adquisición de una vivienda en Ámsterdam es mucho más que un gesto logístico; es una declaración de compromiso, de estabilidad, de futuro compartido. En un mundo donde muchas relaciones se construyen sobre la inmediatez y la exposición, Sandra y Pescalle parecen haber elegido su propio ritmo.
Una relación sólida y discreta
Desde que hicieron pública su relación, Sandra Barneda y su novia han mantenido un perfil bajo. Sin esconderse, pero tampoco buscando protagonismo. La conexión entre ambas ha quedado patente en entrevistas, apariciones y, sobre todo, en el lenguaje que usan para hablarse.
Barneda, que lleva años explorando el mundo emocional en sus novelas y como conductora de programas de ‘amor’ como La isla de las tentaciones, parece haber encontrado en Pescalle Paerel no solo una pareja, sino una compañera de camino. Pescalle, por su parte, ha mantenido una vida más alejada de los focos, lo que ha añadido un aire de misterio y autenticidad a esta historia de amor. No se trata de una influencer, ni de una cara televisiva, sino de una mujer que, según quienes las conocen, ha aportado equilibrio y serenidad al mundo de la presentadora.