(VÍDEO) Momentos de tensión en el primer mitin electoral de Zemmour: un grupo de activistas se infiltra e interrumpen el acto
En la sala hubo algunos infiltrados como un grupo de activistas de SOS Racismo que tras gritar «¡No al racismo!» fueron agredidos con sillas y puñetazos por decenas de asistentes
En la sala hubo algunos infiltrados como un grupo de activistas de SOS Racismo que tras gritar «¡No al racismo!» fueron agredidos con sillas y puñetazos por decenas de asistentes
Miles de personas, entre los que había sarkozistas decepcionados y muchos jóvenes en busca de un antiguo esplendor, apoyaron este domingo al tertuliano Éric Zemmour, candidato a la elección presidencial francesa, que presentó en su primer mitin electoral el que será su partido: «Reconquista».
«No seamos modestos. Si gano será el inicio de la reconquista del país más bonito del mundo«, dijo Zemmour al comenzar un discurso personalista, cargado de llamados a la patria, críticas a las élites políticas y a los periodistas, y en el que defendió su «concepción de la política: sinceridad y coherencia».
«Amar al país», «Que Francia siga siendo Francia», el respeto a «nuestro modo de vida» fueron las frases más aplaudidas por los espectadores del encuentro, que tuvo lugar en un contexto de alta tensión y con un fuerte despliegue policial en torno al Parque de Exposiciones de Villepinte, a una docena de kilómetros de París y junto al principal aeropuerto del país.
En cambio, la inmigración, el feminismo y la simple evocación de Macron se llevaron gran parte de los abucheos.
Zemmour jugó con el imaginario nacional: sus votantes son «resistentes»; figuras como Molière, Luis XIV, Charles de Gaulle o Víctor Hugo, sus referentes; y él, «el único» capaz de frenar la inmigración procedente «del otro lado del Mediterráneo» y de defender a las mujeres de «esa» amenaza.
Hasta tres controles fueron necesarios para entrar al pabellón. El objetivo era impedir infiltraciones ya que en los últimos días diversos colectivos anti-Zemmour habían hecho llamamientos para inscribirse y tratar de reventar el mitin desde dentro.
En la sala hubo momentos de tensión con algunos infiltrados, como un grupo de activistas de SOS Racismo que tras gritar «¡No al racismo!» fueron agredidos con sillas y puñetazos por decenas de asistentes, así como un equipo de televisión francesa. Todos ellos tuvieron que ser evacuados por la seguridad.
A su llegada al escenario, un hombre agarró a Zemmour por el cuello lastimándole la muñeca, según indicó su equipo de campaña a BFM TV, por lo que un médico le ha dado un baja laboral de nueve días. El extertuliano presentará una denuncia contra el agresor.
En paralelo al encuentro, no se registraron altercados como temían las autoridades. Según las autoridades, unas 2.200 personas desfilaron en París a primera hora de la tarde contra Zemmour, y calificaron sus proclamas de «fascistas».
Con banderas de sindicatos y pancartas contra las restricciones a la inmigración, la manifestación estuvo encuadrada por un contundente dispositivo de las fuerzas del orden, con decenas de agentes, una treintena de furgones de policía e incluso una tanqueta para la acción antidisturbios.
Según la prefectura de París, se produjeron al menos dos detenciones en la capital al margen de las manifestaciones y hubo 46 multas en Villepinte.