Macron exige a Polonia y Hungría que respeten el Estado de derecho
El presidente francés señala que la corrupción de Hungría y la pérdida de independencia de la justicia son los problemas más importantes a solventar
El presidente francés señala que la corrupción de Hungría y la pérdida de independencia de la justicia son los problemas más importantes a solventar
El presidente francés, Emmanuel Macron, ha reclamado a Hungría y Polonia que respeten el Estado de derecho, y lo ha vinculado al desembolso de fondo europeos, algo que los socios comunitarios con conflictos abiertos con Bruselas consideran discriminatorio.
«El Estado de derecho es un tema sensible», aseguró Macron ante la prensa tras una cumbre en Budapest para preparar la presidencia de turno de la Unión Europea, que Francia asume en enero, y en la que participaron también Eslovaquia y República Checa, que junto a Hungría y Polonia forman el Grupo de Visegrado.
El presidente francés dijo que la corrupción, en el caso de Hungría, y la pérdida de independencia de la justicia son los problemas más importantes a solventar. «Quiero que encontremos una solución, el diálogo es muy importante, ya que hay que solucionar las preguntas ambivalentes», subrayó Macron al opinar que muchos conflictos «surgen de diferencias de interpretación».
El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, afirmó que su país sigue las normas europeas, y pidió que no se discrimine a Polonia. «Funcionamos según las ideas básicas (de la UE), pedimos que no haya discriminación y que lo que se puede hacer en Alemania y Francia también sea posible en otros países», afirmó.
Los fondos europeos
Macron expresó su optimismo para que en los primeros meses de 2022 se pueda avanzar en estas discusiones. El primer ministro húngaro, el nacionalista Viktor Orbán, reconoció por su parte que hubo discusiones «tensas» con el presidente francés, y reiteró que Hungría no recibe fondos comunitarios «por razones políticas».
La Comisión Europea ya ha advertido de que cree improbable que pueda adoptar este año los planes de recuperación pospandemia de Polonia y Hungría, países que tienen expedientes en Bruselas por sus problemas con el Estado de derecho. Macron reiteró este martes que, en el caso húngaro, «hay muy pocos avances en estos temas», y afirmó que «no habrá ningún pago hasta que haya un progreso concreto». Orbán afirmó que ese condicionamiento es un «chantaje político».
La inmigración
El otro gran tema analizado por Macron y los líderes centroeuropeos fue el de la emigración, y todos coincidieron en que la defensa de las fronteras externas de la UE es un grave problema por solucionar. Todos los participantes expresaron su solidaridad con Polonia, que en sus fronteras con Bielorrusia afronta una grave crisis migratoria, generada, según Morawiecki, por Rusia.
Al respecto, Macron destacó que una de las prioridades de su presidencia será el de la inmigración. «Tenemos intenciones de avanzar en este tema. Vemos que hay muchas crisis, por ejemplo en Polonia a través de la guerra híbrida» (en las fronteras con Bielorrusia) dijo.
Según el mandatario francés, el sistema de libre circulación de Schengen «necesita una gobernanza política», y subrayó que hay que mejorar la defensa de las fronteras externas, controlando también la rutas alternativas de los inmigrantes.
En este aspecto, Morawiecki acentuó la importancia de sanciones frente a Bielorrusia, y dijo que la presión en las fronteras de Polonia se ha aliviado debido a la actuación decidida frente a ese país. Los jefes de Gobierno de la República Checa, Andrej Babis, y el de Eslovaquia, Eduard Heger, expresaron su solidaridad con Polonia en esta situación. «Si notamos que hay una escalada en la situación, es muy importante que actuemos conjuntamente», afirmó Heger.
La oposición Húngara
Durante su estancia en Budapest Macron se entrevistó también con los líderes de la coalición opositora a Orbán que la próxima primavera tratarán de acabar, en las elecciones generales, con doce años de mayorías absolutas del dirigente ultranacionalista.
«Está claro que sus planes (de la oposición) europeos coinciden con las de la presidencia francesa en turno (desde el 1 de enero) de la UE», aseguraron los opositores en un comunicado conjunto.
Mientras la oposición húngara y Macron coincidieron en que se necesita una Europa fuerte y exitosa, «Orbán apoya a aquellos que quieren debilitarla», recalcaron, y agregaron que el primer ministro húngaro ha convertido a su país «en un área de influencia rusa y china».
Fuente: EFE
