Piden la dimisión del nuevo primer ministro de Perú por acusaciones de violencia de género
Valer, que juró el cargo el primer día de febrero, habría golpeado en repetidas ocasiones a su esposa y a su hija durante 2017
Héctor Valer junto a Pedro Castillo durante su presentación en el cargo. | Presidencia de Perú
El nuevo primer ministro de Perú podría tener que abandonar su cargo tras solo dos días ostentándolo. Héctor Valer, designado por el presidente Pedro Castillo, ha sido acusado de haber cometido varios delitos de violencia de género contra su esposa y su hija, quien llegaría a denunciarle ante la Policía de Perú, durante 2017.
El diario El Comercio ha tenido acceso a un documento en el que la jueza Roxana Palacios Yactayo dictó en 2017 medidas de protección a su mujer tras una denuncia presentada por presuntos maltratos. Otro periódico peruano, La República, detalla que en la denuncia Valer le propinó a su esposa un puñetazo en el rostro y la empujó contra el suelo.
«Que se vaya hoy mismo. Maltratador de mujeres no puede gobernarnos«, ha reaccionado a esta información el exministro de Interior de Perú, Carlos Basombrío, en un mensaje publicado en su perfil oficial de Twitter, agregando que «ojalá ocurran cacerolazos» y «sean masivos».
Además, el exministro peruano ha publicado en sus redes sociales la denuncia policial presentada por la hija de Valer en una comisaría del distrito de San Borja, en Lima, en la que se detalla una agresión física por parte de su padre a bofetadas, puñetazos y patadas.
«Valer, el nuevo primer ministro, le dio tal pateadura a su hija de 29 años que esta presentó denuncia en la Comisaría. Inaceptable que pretenda gobernar», ha dicho Basombrío.
Gritos y agresiones
Por otro lado, el medio peruano RPP ha obtenido el testimonio de los exvecinos de Valer, quienes han asegurado que en su domicilio siempre se escuchaban gritos y agresiones a su esposa e hija. En concreto, una exvecina, que ha declarado bajo anonimato, ha sostenido que el nuevo primer ministro «tenía reacciones violentas» durante su estancia en San Borja entre 2009 y 2019.
