El Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha llamado a los ciudadanos de la Unión Europea a reducir su consumo de energía rusa para así «cortar los lazos económicos con Rusia en represalia por la ofensiva militar contra Ucrania». Borrell ha pedido a los estados «cortar el cordón umbilical de nuestras economías con Rusia».
«Los europeos necesitan que el ruido de las bombas a las 5 de la mañana al caer sobre Kiev les despierte de su sueño de bienestar y les permita afrontar los desafíos que el mundo proyecto sobre nosotros«, ha asegurado el jefe de la diplomacia comunitaria en un debate sobre la situación en Ucrania en el Parlamento Europeo.
«Corten el gas en sus casas, disminuyan la dependencia»
En este sentido, ha pedido extraer lecciones de la crisis del coronavirus y apostar por esfuerzos colectivos a nivel europeo en la «cruzada política» contra Rusia, empezando por limitar al máximo la dependencia energética. «Corten el gas en sus casas, disminuyan la dependencia de quien ataca a Ucrania y comprometámonos más en una defensa colectiva», ha resumido.
Así, Borrell ha llamado directamente a bajar la calefacción en las casas, comparando este paso con el uso de la mascarilla durante la pandemia. «Lo que hemos hecho durante el coronavirus hay que hacerlo con Ucrania. Un compromiso colectivo ante una tarea histórica. Hemos empezado tarde, pero más vale tarde que nunca», ha señalado.
Borrell ha cargado contra las expectativas del mandatario ruso sobre su respuesta a la crisis: «Putin pensó que nuestros lazos energéticos con Rusia nos inmovilizarían, y ciertamente nuestros lazos energéticos nos condicionan». El alto representante Exterior de la UE ha subrayado que los estados deben alejarse del capital ruso: «Hemos de cortar el cordón umbilical que une nuestras economías con Rusia y el principal ingreso que le permite financiar la guerra».
La invasión rusa del país vecino abre, según Borrell, una nueva era histórica que marcará las políticas europeas las próximas décadas. En este sentido, ha avisado de que la cascada de sanciones europeas tendrán que reforzarse y mantenerse en el tiempo, tras indicar que la respuesta inicial frente a Moscú no es suficiente.
Borrell abre la puerta a una defensa comunitaria
Sobre el refuerzo de la dimensión militar, el Alto Representante ha sido tajante al señalar que la UE debe repensar «qué quiere ser» y como defender sus valores y principios del «círculo de fuego» en el que se encuentra rodeado.
Según Borrell, la UE debe avanzar los trabajos para construir una seguridad y defensa colectiva y en este sentido ha reclamado a los Estados miembros aumentar el gasto militar, apuntando al paso dado por Alemania en plena guerra en Ucrania.
«Todos preferimos la mantequilla a los cañones«, ha dicho, en referencia a lo difícil que es anunciar más inversión en Defensa, pero ha insistido en que en el contexto actual sería «negar la realidad».